Vínculo

Capítulo 11

Kirishima volvió al departamento de Takano con las niñas, sin embargo hallo un silencio absoluto en el lugar, Hiyo encontró a Tazuki en la habitación de huéspedes acomodando las pocas cosas que había llevado con él, ropa suya y de Tsukiyo y algunos objetos personales. Kirishima se asomó a la habitación también al no encontrar a Yokozawa por ninguna parte.

---¿dónde está Yokozawa?

--- ha ido al conbini.

---¿qué dices? ¿Porqué no fuiste con el?--- preguntó.

---porque... Me dijo que me quedara...

---iré a buscarlo, quedense aquí.

---pero... Él fue con Takano-san...

---¡yo también iré!--- afirmó Hiyo, y sin dar tiempo a responder a su padre se dirigió al genkan donde se colocó nuevamente sus zapatos, dejando a los hermanos dentro del departamento.

Los castaños salieron del edificio, llendo al conbini que se encontraba mas próximo al edificio, casi al llegar lo vieron salir con el bebé en brazos y al lado de Takano, quién cargaba un par de bolsas.

Hiyo no esperó más tiempo, salió corriendo en dirección al peliazul para abrazarlo, acción que sorprendió al resto, Yokozawa entregó el bebé a Takano y se inclinó para estar a la altura de la niña y observarla bien, la pequeña lloraba y él no entendía la razón, volteó a ver a Kirishima, quién parecía confundido.

---Kirishima, ¿qué pasó?

---yo... Es que... No sé--- trató de recordar los hechos recientes pero no estaba seguro del todo--- ...fuimos a casa, pero dejé aparcado el auto fuera, no tenía sentido estacionarlo dentro, no tardaríamos de todas formas, bajamos del coche y caminamos hacia el elevador pero... Hiyo quiso adelantarse y a mitad de camino... Un perro enorme salió de una casa, parece que eran vecinos nuevos en el edificio... El perro saltó encima de Hiyori y la asustó, me apresuré a llegar con ella y le quité al perro de encima pero ella me dijo que estaba bien, la ví un poco nerviosa y ya, eso es todo... El tiempo que estuvimos en casa y de regreso ella estaba bien... Al parecer, se asustó bastante con el perro, lo siento, no me di cuenta...

---mami... Me asusté mucho--- siguió llorando, aquella expresión utilizada por la niña era... Inusual, Yokozawa la levantó en brazos y ella fue tranquilizándose poco a poco, pero algo seguía sin convencer al peliazul, quién comenzó a caminar con la niña aún en brazos hacia otra dirección. Había un pequeño parque cerca del lugar y él la llevó en esa dirección con Takano y Kirishima manteniendo una distancia algo alejada de ellos para darles privacidad pero lo suficientemente cerca como para no perderles de vista, Yokozawa se acercó a un banco y se sentó con Hiyori a un lado suyo.

---Hiyo... ¿Qué sucede?

---es que... El perro...

---no, no hablo del perro...  No sé como decirlo... Normalmente... Tu comportamiento es diferente a como eres ahora... ¿Ha pasado algo? Si es así puedes decirlo, sabes que puedes confiar en mí.

---...--- había visto a través de ella y no supo como reaccionar, su propio padre ni siquiera se había dado cuenta pese a estar siempre atento a ella, quiso evadirlo.--- no has estado aquí un tiempo... ¿Cómo sabrías como es mi comportamiento normal? Pasó... Mucho, mucho tiempo antes de que volvieras.

--- lamento no haber estado este tiempo, pero sé que estás distinta porque te conozco.
Parece como si...

---¡está bien! Pero es cierto... No has estado aquí por mucho tiempo--- lloró y sus mejillas estaban rojas--- te extrañé mucho... ¿Qué tiene de malo querer estar más tiempo contigo ahora que estás aquí?

---no digo que sea malo... Es sólo... Lo siento, no sé como explicarme...--- después de todo, ella tenía derecho a ser infantil lo que quisiera, aún era una niña pequeña, y él la amaba.--- pero, también yo te extrañé mucho

--- no vuelvas a irte... No quiero,

---no, no me iré, estar lejos de ti fue horrible, cada día quería  verte después de todo, cocinar contigo, escuchar tus historias, ayudarte con los deberes, o hacerte un nuevo peinado, realmente, te extrañé.

---...--- la niña volteó a mirarle, no descubrió indicios que dijeran que él mentía, se abrazó de él y él volvió a cargarla sentándola en sus piernas dejándola llorar, sus mejillas seguían rojas, tal vez de vergüenza.--- lo que pasa es que yo... yo sé que... Quieres a papá, sé que quieres a Tsukiyo-chan, a Tazuki-kun... Y al bebé pero... Me gustaría que solo estuviéramos nosotros tres como antes, ¿soy mala porque te quiero solo para mí? No es que ellos no me agraden pero... No  quiero compartirte con nadie... Tú eres mi mami...

--- mi niña, lo que ocurre aquí es que tú estás celosa.

---¿celosa?

--- ... Hiyo... No es malo querer estar con alguien que quieres, pero es normal que te sientas así, eso pasa a los niños cuando tienen un nuevo hermano... siempre he estado aquí para ti y lo seguiré estando, eso no va a cambiar aunque haya más personas en casa. Así que no digas que eres mala, eres una niña buena y...

---pero, ellos son tus sobrinos, ¿y si un día descubres que los quieres más que a mí? ¿Y si dejas de quererme?--- gimoteó

---Hiyo... Eso no pasará--- la hizo mirarle de frente, con cuidado limpió las lágrimas que empañaban sus mejillas y le sonrió--- , después de todo, tú no eres solamente la hija de mi novio--- la sorprendió, haciendo que esos ojos mieles lo miraran con asombro ¿cómo era que él sabía lo que estaba pensando?--- tú también eres mi hija, ¿no es cierto?

La niña siguió mirándolo impresionada, era la primera vez que le decía aquello, ella siempre se había puesto en el lugar de "la hija de su novio" y aunque amaba a Yokozawa, y aunque sabía que él la quería nunca se había atrevido a confesar tales sentimientos por miedo, por lo que las palabras del peliazul... Le hicieron sentirse feliz, asintió feliz y se acurrucó en su pecho, las lágrimas dejaron de salir, una sonrisa asomó a su rostro y sus mejillas continuaron ronrosadas como siempre.
Yokozawa besó su frente y acarició sus cabellos permaneciendo así un momento antes de levantarse para volver a casa.
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