Rayo de luna ©

Chico extraño...

El día siguiente en la escuela tuvimos clase de música la cual yo aprovechaba para ir al teatro y ensayar mis pasos de ballet, y como había empezado a mejorar no quería que volviera la torpeza a mis piernas. Comencé a bailar una canción llamada "rayo de luna" era mi favorita y hasta ahora la que mejor me salía. Bailar me ayudaba a tranquilizarme y olvidar un poco todo lo que me estaba pasando. De pronto mi baile se vio interrumpido por la presencia de alguien en las sillas que no dejaba de mirarme, al principio no lo identifique pero cuando hablo no tuve duda de quién se trataba.

-Y además bailas, ¿Hay otra cosa que deba saber de ti?

-Claro una importante, odio que me interrumpan

-Alice tranquila, no pude evitar venir aquí cuando escuche mi canción favorita

-¿Rayo de Luna?, ¿enserio?, también es mi favorita

-Tienes buen gusto, es increíble que nadie sepa quien escribió esa canción

-Mas que increíble lo encuentro algo muy perfecto

El me miro con una sonrisa torcida, rayos era tan guapo, se acerco a mí y me pidió que volviera a bailar que no le importara que el estuviese ahí, que solo quería admirar la perfección de mis movimientos. Le dije que no podía porque debía ir a cambiarme para la próxima clase y salí casi corriendo a los vestidores. Me ponía muy nerviosa estar con él.

Cuando llegue al salón me tope con Grace y comenzó de nuevo, escuchaba lo que su mente decía realmente me odiaba por tener el privilegio de sentarme con el chico nuevo y por además tener al parecer su atención.

-Alice-me dijo y me extraño que me hablara-Supongo que ya sabes sobre la fiesta de inicio de curso que organizo cada año quiero decirte que estas invitada

Supe pronto por sus pensamientos que ella solo me invitaba porque creía que si yo iba Andrew Cedric también lo haría.

-Vaya Grace -respondí- Gracias pero no creo que pueda, ya sabes todos esos libros en mi casa no se leerán solos.

Me aleje de ella y me fui a mi lugar, en ese momento el chico nuevo llego y fue rápidamente a su asiento a lado mío y comenzó a hablar.

-¿Cómo piensas hacer amigos si rechazas una simple invitación a una fiesta?

-No me interesa hacer amistad con Grace me odia además la única razón por la que quiere que vaya es porque piensa que si lo hago iras tu

Pronuncie lo ultimo muy rápido y pronto me arrepentí de ello, había hablado de mas, ¿Como le explicaría que yo sabía los planes de Grace si no había posibilidad de que alguien aquí me los contara?. Entonces pensé, ¿Como sabia él lo ocurrido si no había estado aquí? no dude en preguntar esperando que eso evadiera un interrogatorio para mí.

-Espera un momento, ¿ Cómo es que sabes que no acepte ir? tu no estabas aquí

-Oh bueno yo lo escuche cuando estaba yo estaba afuera

-¿Escuchas des tras de las puertas de un salón de clases?

-Ah si eso es claro

Se puso algo nervioso y dejo de hablarme por todo ese día después de eso, mis síntomas eran cada vez peores, ese mismo día desee con todas mis fuerzas que la luz se fuera para poder salir de la escuela pronto, justo estaba deseando eso cuando ocurrió un corto circuito, ¿casualidad? yo lo pensé pero obviamente no fue así. Salí y me dirigí a mi auto. Fui a mi clase de ballet donde me dijeron que sería la protagonista de el musical próximo, tampoco tenía amigas en mi clase de ballet, ellas eras chicas raras que solo pensaban en moda y chicos guapos. Mi cabeza iba a explotar si me juntaba con alguna de ellas. Cuando llegue a mi casa después de la clase de ballet mi nana me dijo que mis padres no vendrían a cenar ese día,  era su aniversario e irían a cenar fuera. Decidí pasar la tarde en mi cuarto leyendo, después otro síntoma se hizo presente, mi Nana entro a mi habitación para poder limpiarla un poco, no era tarea fácil, era una habitación muy grande, mi cama estaba en el centro de ella y era en forma de circulo, desde ahí podía mirar las estrellas por que el techo era transparente, tenía un baño enorme con tina regadera y jacuzzi, un armario con ropa muy grande, un pequeño espacio con una sala donde estaba mi tele, y tenía un espacio para escribir era como mi propio despacho, era una habitación que contrastaba con los colores crema de la recamara, su color era negro, estaba lleno de pequeñas incrustaciones de focos por todas las paredes que iluminaban aparentando der estrellas y en el centro se una de las paredes pintada a mano estaba la luna, ese era mi lugar favorito en todo el mundo, en mi recamara también estaba un pequeño lugar que simulaba un estudio de ballet donde podía practicar. Todo ese espacio era mío y amaba está ahí. Volviendo al tema del nuevo síntoma, cuando mi Nana entro me entrego un par de aretes que había dejado en la mesa cerca de la alberca el día anterior, al tocar su mano miles de imagines pasaron por mi cabeza donde ella aparecía haciendo que me sintiera mareada por un momento.