EL RETO

CAPITULO X MUNDO PARALELO

_ ¿Tú otra vez?_ no era ninguna coincidencia pero tampoco una agradable sorpresa. Por toda una semana me había encontrado con esa persona observándome o mirando de forma indiscreta. No lo culpaba yo era bella y siempre pasaba pero lo que sí me fastidiaba era otra cosa.

_ No es lo que crees, bueno en realidad sí pero no de la forma en la que

_ Ya basta_ siempre daba el mismo discurso_ Ya te dije que no me interesas, no eres mi tipo y menos aún cumples con los requisitos para ser el novio de alguien como yo_ me estaba cansanda de darle las razones por las que no aceptaba su declaración. Bueno las razones superficiales porque mi verdadera razón era que no le creía ni una simple palabra de su declaración, muy peculiar por cierto_ Oye

_ Ya dije que me llamo Joungwoon

_ Interesante y supongo que no te has olvidado de mi nombre y quién soy_ le dije ya muy airada pero el mantenía su mirada tranquila. Sólo lo delataba ese movimiento de labios que hacía antes de arremeter contra mí, pero fui más rápida_ Soy Hajoon la hermana menor de corea y la mujer más famosa en todo Corea

_ Por el momento_ siempre con algo para contestar y eso último no me gustó para nada_ No te hagas la ofendida pero ése título no es muy antiguo y tampoco te va a durar hasta que envejezcas_ me llevé las manos a la cara_ Te ves linda cuando te sonrojas_ me dedicó una sonrisa tan descuidada sin embargo me dejó sorprendida, sólo un poco. Mis mejillas empezaban a arder.

_ Voy a hablar con tu jefe_ pude ver cómo su cuerpo se tensaba y mis mejillas bajaban de temperatura. Empecé a buscar por el lugar aunque en realidad no estaba convencida de los puestos de cada uno de ellos. Mi plan era encontrar al que aparentaba más edad y quejarme con él, ya que el director no estaba a la vista.

_ No pretendas que sabes quién es mi jefe, no está aquí_ sus ojos vacilaron cuando lo miré directamente

_ Pues tu jefe tendrá que responder al suyo_ le contesté ya muy enfadada_ Iré por..._ mi alma escapó por un instante a causa el susto que me provocó irme contra el piso. Afortunadamente no llegué hasta allí. El vestido que llevaba era el perfecto para una sesión fotográfica pero el menos adecuado para andar por el set buscando a la persona encargada de poner en su lugar a aquel acosador no fan, acosador que me tenía sostenida con una mano en la cintura y la otra apoyada en mi brazo. Me apresuré a quitármelo de encima, aunque por un instante pensé que su cercanía era muy cálida.

_ ¿Qué?_ mis pensamientos los interrumpí al ver la sonrisa ladina que llevaba, él estaba viendo algo gracioso en mí

_ Te sonrojaste_ susurró y al virar hacia la izquierda alcancé a ver mi reflejo en el espejo. Mis mejillas estaban rojas y el calor recién lo empezaba a sentir nuevamente. Entre consternada y ofendida volví mi mirada hacia él. Al verlo, imité su sonrisa

_ No tanto como tú_ ver que sus mejillas estaban rebozando de rojo me hizo sentir superior y también que mi sangre empezara a circular normalmente en mi rostro. No podía permitir que nadie me viera en una situación tan incómoda

_ Yo..._ estaba claramente incómodo. Bajó su cabeza y se llevó ambas manos hacia su rostro. Por un instante lo encontré adorable como un niño que no sabe dónde más esconderse y encuentra en las sombras de sus manos el refugio perfecto para ocultar la pena por una travesura no intencionada. El maldito logró robarme una sonrisa, que intenté disimular al momento en el que sus ojos asomaron por sobre sus dedos. Sus ojos rasgados eran tan típicos de nuestro país, pero su mirada no; tiene un brillo especial y aunque sé que él es el más avergonzado entre ambos empiezo a sentirme acorralada_ Yo tengo razones para ruborizarme_ su voz suena un poco distante, sus manos todavía cubren su nariz y ojos. Se queda en silencio, y yo me pierdo por un momento en su profunda mirada.