RAMÉ: Hermano Mayor.

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Lee Hwayoung era una ganadora. Jamás perdía y jamás se equivocaba.

Al final, las cosas siempre resultaban de la forma que ella quería.

Incluso si sus planes habían sufrido un cambio imprevisto, todavía podía poner las cosas en su curso nuevamente, podía recuperar a Wooseok.

Después de todo, cuatro meses transcurrieron desde la insolencia de Jinhyuk. Su tonto y sentimental hijo se le había salido de las manos, pero como siempre, todo estaba bajo su control.

—Jinhyuk-ah, hiciste todo ese alboroto por nada. Me pregunto cuál es la diferencia para ti, Wooseok mayor o Wooseok menor, los dos son la misma cosa, si no te hubieras enterado que eran gemelos, ni siquiera hubieras notado cuando uno de los dos desapareciera, ah, ¿por qué tenías que jugar al hyung confiable y protector? Solo me facilitaste el trabajo, no pudiste salvar a nadie. Y hoy iniciaré con la última parte de mi plan.

Jinhyuk hizo un ruido similar al de un gruñido o un sollozo, en su condición no se podría saber.

—Patético. —Ella rió— Solo mírate arrastrándote por algo de esto, que vergüenza.

Extendió la caja cuyo contenido no era mas que alguna droga a base de metanfetaminas, Jinhyuk se veía como un perro desquiciado rogando por algo de comida, lastimando su tobillo al querer deshacerse de las cadenas para poder ir y arrebatársela, incluso estaba babeando un poco.

—Esto es lo que tu adorado hermanito ha estado haciendo, drogas que resultan ser un éxito para Whitestar. Wooseok mayor es brillante, sabía que una vez que se rompiera me iba a ser de utilidad, todo lo que tuve que hacer fue decirle que estabas muerto y que el ridículo monstruo es él. Los niños siguen siendo niños e ingenuos por muy inteligentes que sean, ¿no lo crees, Jinhyuk?

Jinhyuk sollozó golpeándose el rostro, probablemente queriendo volver en sí, pero demasiado necesitado y adicto para poder hacerlo.

—¿Es duro para ti? ¿Quieres morir? ¿no puedes soportar este mundo más?

El chico asintió, ella alzó el mentón con altanería.

—Demasiado engreído de tu parte pensar que puedes morir, ¿acaso tu vida te pertenece? Te lo he dicho varias veces, tu, y los gemelos, son míos. Yo los hice, yo les enseñé, ninguno de ustedes tiene el derecho de siquiera pensar por sí mismos, solo tenían que callarse y obedecer a Mamá. Ninguno va a escaparse mi jaula, a menos que yo así lo decida.

Hwayoung suspiró y se acomodó el cabello.

—Ah, te lo diré porque tu mirada parece querer preguntar por ti, ¿que por qué hice todo esto? Bueno, estoy segura que reconoces esa sensación. Nosotros los genios nos aburrimos con facilidad, las personas a nuestro alrededor se ven tontas, inferiores y fáciles de manipular. Pensé que sería divertido, engañar a mi hijo mayor que también es un genio de que su hermano estaba enfermo, y ver como ambos gemelos crecían por separado, hacerlos competir sin que se dieran cuenta y elegir al que se quedaría, todo fue por diversión. La mejor parte fue ver a ese mocoso altanero temblando de miedo a mis pies, como debió estar desde el principio.

Ella lanzó la bolsa y Jinhyuk se aferró a esta como un indigente necesitado. 

—Solo espera, mi plan solo verá su fin una vez que ponga a Wooseok mayor en una tumba.

Lee Hwayoung salió del lugar con una sonrisa elegante y gélida, sus guarda espaldas se le unieron en el camino al laboratorio de Wooseok.

—¿Qué hay de DG?

—El Jefe está más que satisfecho con la última mercancía.

—Muy bien, Wooseok estará trabajando en un proyecto importante, así que no le enviaré nada nuevo durante un tiempo.

RAMÉ (Wooseok/Seungwoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora