Cinco días

Mar

Sintiendo la estructura debajo de sus pies, e ignorando el profuso dolor del agua fría apuñalando cada centímetro de su cuerpo, Valentina se impulsó hacia a la superficie tirando a Juliana consigo, pero la fuerza del trasatlántico era tal, que sus acciones quedaron en intentos, ambas fueron succionadas detrás del enorme buque junto al panadero y a los otros chicos que se encontraban junto a ellas, intentaron flotar por una cantidad incierta de tiempo mientras el metal bajo el agua gruñía como un terrible monstruo marino. Una Corriente las llevó abajo, más debajo de lo que creyeron posible y el frío allí se intensificó aun más, Valentina quiso llorar de miedo pero el shock que vivía lo hacía difícil, en ese giro perdió la noción de dónde se encontraba la superficie y comenzó a entrar en pánico, no estaba segura de si a Juliana le había ocurrido lo mismo, pero ésta tiraba de ella hacia un lado y tal cual estaba, Val decidió dejarse llevar, más aún, pataleó con fiereza hasta que el aire de sus pulmones comenzó a agotarse. Segura de que moriría, abrió los ojos una última vez al mar helado y logró distinguir en la distancia la silueta del barco siendo engullido por la monstruosa oscuridad, unos eternos segundos después su cabeza salió a la superficie y comenzó a toser.

Val ...- aferró el brazo de Juliana intentando subirla, pero no era necesario, la chica ya tosía a su lado- Un bo... te ... - la chica miró alrededor, pero todo cuanto pudo ver fueron a muchas personas más chapoteando a su lado igual de aterradas que ella- Val...

Va... mos – logró articular mientras el agua helada parecía oprimir sus pulmones. Juliana se desenganchó de su chaleco y chapoteo torpemente sin tener una pista de a dónde ir, Valentina tiró de Juliana a su derecha, intentando nadar pese al horrible entumecimiento de todo su cuerpo procurando voltear de cuando en cuando para ver que la chica en efecto siguiera allí, observó al lado suyo a dos hombres peleando por un barril, un cadáver, una pieza de madera para mantenerse a flote, pronto se alejaron del los demás sobrevivientes pero ninguna dejó de nadar hasta que de pronto Valentina se dio de bruces contra lo que parecía ser el pedazo de una mesa.

A... quí – dijo Jalando a Juliana quien se recargó en la madera nada más llegar.

Su...be – pidió Juliana- no tengo... no tengo fuerza – Valentina por toda respuesta se sumergió en el agua helada y la impulsó desde abajo a la par que trataba de dar estabilidad a la pieza para que la chica se arrastrara arriba - ¿Y t...u? -inquirió la chica una vez que estuvo arriba.

Bus... buscare algo – dijo – no te... muevas de aquí...

Ni... me puedo mover, Val... - la chica asintió y chapoteo un poco más procurando mantenerse en calor, pero por más que inspeccionó el negro océano no logró encontrar nada, de modo que volvió a donde según sus cálculos había quedado su chica y su corazón se detuvo cuando no la encontró.

¡JJUL! – gritó con voz rota - ¡Juliana! – sin embargo, no hubo respuesta, comenzó a nadar en círculos esperando encontrarla cuando algo aterrizó a lado suyo, no supo precisar que era, pero luego de ver la dirección aproximada de donde provenía, logró ver a la chica y nadó hacia ella con desesperación.

Aquí – la oyó mascullar cuando llegó- no encon...traste nada – la chica negó al tiempo que tomaba su mano helada- sube...

¿Com...o? – Por toda respuesta Juliana se rodó hacia un extremo haciendo que la mesa se ladeara, Valentina la atrapo a tiempo de hacer contrapeso y captando la idea subió a ella como pudo, luego se rodó al centro mientras juliana hacía lo mismo.

¿Y... ahora? -

Esperar... - masculló la chica.

Esperar ... - repitió Juliana tomando su mano.