ᴄᴏɴᴛʀᴀᴄᴛ ࿐ ᵖⁱⁿᵉˢᶜᵒⁿᵉ [ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ]

₍₁₀₎ ʙʀᴏᴋᴇɴ ɪᴄᴇ

   Bipper

Aquel joven con los ojos sorprendentemente de un tono rojizo, se desplazaba con agilidad entre todo aquel bosque, tratando de atrapar con inercia aquello que anteriormente se le había escapado de las manos.

Esa cosa estaba a punto de desaparecer de su panorama, pero de igual manera, iba a ser fácil encontrarlo gracias al rastro gélido que dejaba por donde iba. O al menos eso era lo que pensaba.

Bipper era quien tenía la delantera entre él y Beast... este simplemente dejaba todo en sus manos mientras que lo perseguía por detrás.

Lamentablemente aquella persecución se vio interrumpida por un ancho lago que había de por medio... el contrincante de ambos amigos lo había pasado por encima, dejando casi sin opciones a los otros dos.

El de ojos ámbar se detuvo en la orilla de aquel lugar mientras observaba con detenimiento el camino que nuevamente había dejado aquel extraño.

Cerró por unos segundos los ojos y cuando sintió la presencia de Beast llegar, los abrió repentinamente mientras que aquel rojizo tono se tornaba azulado.

—Síguelo —ordenó con voz hostil y casi inmediatamente Wirt lo entendió, desapareciendo convertido en oscuridad, aprovechando el hecho de que el sol aún no se mostraba en su frontera —.No dejes que ese maldito escape con el diario

Eso fue lo último que susurró para comenzar a esperar el regreso de su compañero con aquel oponente en manos.

[Horas antes]

Bipper, en su mano derecha hizo aparecer una cálida bola de fuego azulado con las intenciones de iluminar el oscuro lugar.

Por unos instantes, se fijaron en las paredes de la cueva... constantemente tenía extraños símbolos incrustados en sus rincones, pero ninguno se parecían a las runas del tiempo.

Y tras estar caminando por unos minutos hacia abajo, se encontraron con que el camino se dividía en tres... cada uno tenía un dibujo en sus paredes que no se podía definir muy bien que eran.

—Aquí está —señaló Bipper, tomando el libro y abriéndolo justo en la página marcada —.Cada uno de los caminos representan los tres tiempos, pasado, presente y futuro... pero no siempre están en el mismo orden

—¿Y cómo nos daremos cuenta por cual debemos ir y cuál es cuál? —cuestionó el más alto, sin apartar la vista de aquellos tres caminos.

—Debemos ir por el presente... amenos que quieras arriesgarte y entrar por el camino del futuro, ver fecha y causa de tu fin... ver las malas decisiones que tomarás y los errores que cometerás, las posibles futuras humillaciones y momentos vergonzosos —explicaba con una sonrisa maliciosa mientras lo fulminaba con la mirada —.O, si quieres podemos tomar el camino del pasado, donde te remarcarán todo lo malo que sucedió y todo lo malo que hiciste. Eso es algo mucho más tormentoso, ¿Verdad?

El más bajo le dio unos cuantos codazos al otro, esperando respuesta alguna que no obtuvo... este simplemente se quedó callado, sin dejar de analizar el lugar.

—Los dibujos mal formados que tienen cada uno, son los símbolos del tiempo pero desarmados... hay que armarlos y--

—Es aquella —Lo interrumpió el chico de astas sin importarle lo que vaya a decir el otro.. señalado con su mano derecha el camino que se encontraba a la izquierda.

—¿Qu--qué? —dijo sorprendido —,¿Cómo estás tan seguro?

—Puedo escuchar el llanto de mi hermano menor en la entrada del centro, la voz de la bestia en la otra y en esta... oigo tu risa —terminó de explicar con la cabeza agachada, dejando que la oscuridad evitase ver su expresión.