Cap21

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Narra Jai:

Me encontraba caminando por el patio principal de la universidad mientras cargaba la caja de libros que me habían perdido.

Ya me encontraba muy cansada y la caja pesaba demasiado, no pude aguantar aquel peso y la caja cayo golpeando el piso, esparciendo todo el contenido que este tenía.

Me sentía realmente furiosa, habia tratado de hablar con Arthit, pero no lo conseguí ya que nuestros compañeros se lo llevaron hacia la sala principal.

-Porque todas estas cosas me tienen que pasar a mi- comencé a hablar entre dientes, mientras recogía los libros que estaban tirados.

-Si sigues haciendo aquel gesto con la cara te saldrán arrugas- hablo el imbecil de mi primo.

-Sabes, me vendría muy bien un poco de tu ayuda- hable irónicamente a lo que el asintió y me ayudo a recoger los libros.

Estuvimos caminando hasta llegar al salón en donde dejaría aquella caja, luego caminamos en silencio, cada uno con sus propios pensamientos.

-M quiero que me ayudes a recuperar a Arthit- hable de repente a lo que rl volteo a verme deteniendo su caminar.

-Que es lo que dijiste- hablo seriamente haciendo que mi paciencia se desvaneciera.

-Lo que oíste primito, quiero recuperar a Arthit nuevamente, pero no podre hacerlo sola, te necesito a ti- trate de convencerlo haciendo un pequeño puchero, pero el solo rodo los ojos.

-Pensé que habías aprendido tu lección, sabes que nunca conseguirás salir con el y aun así te empeñas en meterte en su relación con Kongpob- hablo de forma neutra.

No pude contenerme debido a que una carcajada se escapo de mis labios- acaso tu no quieres lo mismo que yo, se que deseas tener a Kongpob solo para ti, pero eres tan cobarde que no eres capaz de hacerlo, se que me necesitas como yo a ti- hable viendo como su rostro cambiaba de expresión.

-Talvez sea verdad que aun quiero a Kongpob, pero entendí que aquella forma no es la correcta, no quiero que el me odio aun más- dijo mientras bajaba su rostro observando el piso.

-Hay primito eres un imbecil, si no lo quieres hacer conmigo deberé hacerlo sola, ya los deje demasiado tiempo tranquilos y ya es hora de que yo intervenga en sus vidas nuevamente- hable tratando de pensar que era lo que iba a hacer para recuperar a Arthit.

-Si te atreves a hacer algo contra ellos, juro que le dire a mis tíos todo lo que has echo y sabes como reaccionaran si se enteran- comenzó a amenazarme, mientras me señalaba irrespetuosamente  con su dedo.

-Si tu hablas sabes que también caerás conmigo, no querrás que tu linda mami sepa la clase de persona que eres, ya que tu no eres mucho mejor que yo primito, ambos estamos en la misma situacion- conteste sabiendo que el no lo haría por lo cobarde que era.

-Aun no me conoces- hablo para luego sacar su teléfono y hacer una llamada.

-Espera, no te atrevas- grite tratando de arrebatarle el celular.

-Mamá, debo de confesar que hice algo muy malo, lastime mucho a una persona, llegando al punto de tratar de violarlo más de una vez y estropear la relación que el tenía con su pareja, lo siento por decepcionarte- luego de decir aquello colgó dejándome helada.

-Pero, como fuiste capaz de hacer aquello- hable sorprendida y preocupada.

-Si fui capaz de decirle aquello a mi propia madre, crees no podre decirle todo lo que hicimos a mi tío, si quieres que me quede callado, no vuelvas a acercarte a Arthit ni a Kongpob nunca más en tu asquerosa vida- luego de decir aquello, se fue dejándome atónita.

No sabia que hacer, pero tenía miedo de que el abriera la boca y arruinará la relación estable que tenía con mi padre. 

Narra M:

Luego de decir aquello me sentía mucho mejor, sabia que había arruinado por mucho tiempo la vida de Kongpob y ahora trataría de que nadie estropeara su felicidad, para tratar de enmendar mi error.

Fui caminando hacia mi casa esperando a que mi madre no me odiara debido a lo que le había confesado.

Trate de entrar lo más sigilosamente que pude, pero ella ya se encontraba esperandome detrás de la puerta.

-¿Que fue todo eso que me dijiste por teléfono?- pregunto un poco molesta, lo único que me quedo fue darle un abrazo y luego caminar hacia la sala para poder contarle todo lo que había echo.

Luego de que termine de hablar ella me miro seriamente, sin decir ninguna palabra se paro dirigiéndose a su habitación.

Me sentía la peor basura por decepcionar a mi madre, pero era necesario que ella supiera la verdad y todo el daño que había echo.

Me quede unos minutos más sentados y luego subí a mi habitación, tratando de olvidar todas las cosas que comenzaban a sucederme.

Narra Kongpob:

Desperté con el cuerpo de Arthit pegado al mío, sentía su respiración tranquila dándome mucha paz interior.

Comencé a subir mi mano acariciando su rostro, gravando en mi memoria cada rastro suyo.

Su piel se encontraba muy suave y sus mejillas estaba de color carmesí debido al viento que corría por la ventana.

Trate de pararme para cerrarla pero la mano de Arthit me lo impidió haciéndome caer sobre el.

-No quiero que te levantes aun, quiero disfrutar este momento un poco mas- hablo aun con los ojos cerrados.

Yo involuntariamente sonreí para luego volverme acurrucarme en su pecho y disfrutar con el esta dulce mañana.

Narra Arthit:

En todas las calles ya se sentía el espíritu navideño, en cada tienda que me acercaba siempre escuchaba las típicas canciones que traían las decoraciones.

No sabia muy bien que regalarle a Kongpob, estábamos a días de la navidad y aun no había comprado su regalo.

Me asome a una tienda que contenía de todo, entre y comencé a dar un pequeño recorrido dentro para poder elegir un obsequio.

-Que es lo que piensa escoger- hablo una anciana que se encontraba a lado mío.

-Aun no estoy muy seguro- conteste mientras seguía mirando un pequeño obsequio pensando que talvez le gustaría.

-¿Es para su novio?- pregunto a lo que yo solo asentí con una sonrisa algo sonrojado.
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