Sweet Escape 📚 Eto Yoshimura

📚 Fourteen

[HySy ArtMask Studio]

Tn entró a la tienda de máscaras.

– ¿Uta-san?

– Aquí.

Ella se acercó al chico. Uta estaba en su mesa de trabajo, terminando una máscara.

– Oh, estabas trabajando.

– No te preocupes, ya termino –terminó de pintar la máscara y la dejó en el maniquí que tenía a un lado.

– Te quedó genial.

– Gracias –la miró.– Entonces... ¿Pelearon?

– Sí, yo...no quiero hablar de eso ahora –se sentó sobre la mesa.– Hablemos de otra cosa. ¿Cómo has estado? ¿Qué tal todo?

– Todo bien –sonrió.– ¿Quieres un bocadillo?

– Claro.

Uta tomó el tazón donde tenía varios ojos, extendiéndolo a la chica; la castaña tomó unos y comenzó a comer; él también tomó uno y lo lamió.

– Aunque...creo que me vendría mejor algo de alcohol –comió.

– ...Conozco un lugar, un buen lugar, ¿Qué opinas?

– ¿Tú dices?

– Las personas de ahí las conozco bien, son amigos.

– ...Vamos entonces –sonrió.– Necesito despejarme.

– Genial –se levantó.– Acomodo esto y nos vamos.

– Okay –sonrió.

[Helter Skelter]

– "Helter Skelter" –leyó.– Que nombre tan...llamativo –rió.

– No te preocupes, todos ahí son amigos míos.

– De acuerdo, confiaré en ti –sonrió.

– Genial –sonrió.– Entremos.

Ella asintió. Ambos entraron al bar.

[Días después]

Tn estaba en el sofá, leyendo un libro. De pronto, la puerta se abrió, dando paso a una peliverde de lentes; ella sonrió y corrió hacia la menor.

– ¡Tn! –gritó, abalanzándose sobre ella.

– ¡Ah!

El libro cayó al suelo, mientras Tn caía sobre el sofá con aquella chica encima, abrazándola.

– Ngh. Eto –se quejó.– Dame espacio.

– ¿Ah? –se separó y se incorporó.

La castaña se incorporó también y suspiró.

– ¿Aún estás enfadada? –preguntó la mayor.

– ¿Qué te parece? –dijo fría.

La castaña tomó su libro del suelo y se acomodó para volver a leer. La peliverde rió.

– Oh, vamos. Es una tontería.

– ¿Nuestra relación es una tontería para ti?

– Claro que no, me refiero a tu enojo.

– Es tú culpa –se encogió de hombros.– Yo dejé toda mi antigua vida por ti, y tú no has hecho nada por mí más que encerrarme en esta casa.

– Exageras.

– No –la miró.– No he salido de aquí desde que vivo contigo, a penas si voy a la base de Aogiri. Las veces que salí fue para ir a la universidad...y el otro día que me fui con Uta.