Sweet Escape 📚 Eto Yoshimura

📚 Thirty-three

[Depto. de Tn, Distrito 20]

Furuta había ingresado al departamento de manera ilícita, para investigar a la joven como le había ordenado su superior. Revisó todo, pero no encontró nada fuera de lo normal, lo único llamativo que vio fue una caja fuerte oculta en un rincón del armario, tras varias cajas y cosas; intentó abrirla y, aunque le llevó muchos minutos, logró hacerlo.

– ¿Hm? –ladeó la cabeza.

Creyó que vería dinero y objetos de valor, sin embargo, dentro encontró la máscara que la chica usaba en Aogiri, un diario con el nombre "Ukina" y dos álbumes de fotos, uno de ellos era de fotos de ella y su familia y el otro de fotos de ella junto a Eto. El pelinegro frunció el ceño, molestándose más y más a cada fotografía que veía de aquella hermosa castaña junto a esa mujer que tanto le desagradaba.

– Esa perra loca... –gruñó.

Su teléfono comenzó a sonar y, al ver que era su superior, contestó.

– Furuta, ¿Cómo vas con el departamento? –preguntó Sasaki.

– Estoy regresando todo a la normalidad.

– ¿Encontraste algo?

– ...Nada. Tiene muchos libros, entre ellos todos los de Takatsuki.

– ¿Revisaste la cocina?

– Sí, no encontré nada extraño. Parece que le gustan las galletas rellena –rió.

– Ya veo... –chasqueó la lengua.– Bien. Termina ahí y regresa.

– Jefe, ¿Sabe que si esto sale a la luz...tendrá problemas? No sólo por entrar a un departamento sin una orden, sino porque...la familia Yamazaki es muy poderosa, podrían hundirlo.

– Mientras no llames la atención y nadie se entere, no pasará nada. Termina ahí y sigue investigando a esa chica.

– Entendido.

La llamada finalizó. Furuta guardó de nuevo los álbumes de fotos y cerró la caja fuerte, ordenó todo a como estaba antes y salió del departamento.

[Más tarde]

Tn llegó a casa, colgó su abrigo y se quitó sus zapatos, se dirigió al living, arrojó su bolso sobre la mesa de café y se dejó caer en el sofá; estaba exhausta del trabajo. Cerró los ojos, tratando de descansar, pero de pronto sintió un aroma particular; abrió los ojos, levantó una ceja y se incorporó.

– Ese aroma... –olió de nuevo.– Es el...perfume de Souta... –murmuró.

«¿Por qué...huele al perfume de Souta aquí...?», pensó confusa.

[Corniculum, Distrito 12]

Eto y Furuta estaban sentados frente a frente, con el cristal de la celda de la ghoul separándolos.

– Mi dios –exclamó él.– Veo que el cabello corto le queda bien, Takatsuki Sen-sei –dijo sonriendo.

– Silencio, maldito payaso de Kanou –contestó ella, sonriendo.

– "Maldito payaso de Kanou", eh. Tú de verdad sabes todo, ¿No es así? Comienzo a ver el por qué los de arriba están a tus pies. Estoy completamente consciente de cuándo, dónde y con quién los miembros del Aogiri toman el té.

– Tú eres el que se unió y comenzó a hacer travesuras, ¿No? Como coleccionar conejillos de indias para experimentos de ghoulificación, o decirnos a Aogiri vía Kanou el lugar exacto donde iban los vehículos que transportaban los cadáveres, o quizás... ¿Dejar caer vigas de acero sobre personas? En cómo se conecta todo eso con V, bueno, debo admitir que no lo sé. Dime, ¿Quieres?