call me Leo [Jenlisa]

Capítulo 9

Jennie's POV

Entré a la tienda que estaba justo frente a la playa buscando algo para usar arriba de mi bikini. Miré por debajo de la estantería y rebusqué algunas prendas sin éxito alguno. No me quedó más opción que elegir una playera extra grande con la imagen de un señor con un tarro de cerveza.

–Está guay.–Rosé salió de los vestidores cargando una serie de vestidos en su brazo.

–¿Qué es guay?–Pregunté, últimamente el vocabulario de Rosé era una mezcla de inglés con expresiones españolas.

–Es como decir que algo está impresionante o como dicen acá, cool.

–Me llevaré esta de todas formas, es la única que hay.–Saqué mi tarjeta anexando a mis compras un bote de bloqueador solar de 50 SPF y salimos a la playa.

Las presentaciones en California habían concluido y me había tomado un día más para disfrutar del lugar antes de volver a Corea. La mitad de mi gira estaba casi completa, sólo quedaban unos cuantos países en la lista, estaría en Suecia en unos días y seguiría mi gira por Europa hasta concluir en Japón.

–¿Ya quieres ir al hotel?–Preguntó Rosé y negué.

–Siéntate aquí.–Saqué una manta de mi mochila tendiéndola en la arena.–Está por ponerse el sol.

–Has estado extraña estos días.–Dijo Rosé sentándose en la manta que le había tendido antes.–Como si te estuvieras guardando algo.

–No es nada, estaba pensando en los premios pasados.–Rosé se inclinó para escucharme mejor.

–¿Pasó algo cuando te fuiste al backstage?

–Leo me escuchó discutir con Donghae.–Dije recordando la escena.–Luego nos estuvimos sonriendo durante mi presentación.–Me encogí de hombros después de decir aquello para mostrar un desinterés inexistente.

Mi amiga hizo una ''O'' con sus labios y arrebató mi teléfono de mi mano el cual desbloqueó fácilmente.

–¿Pero qué mierda?, ¿cómo sabes cuál...

–Soy tu mejor amiga.–Rosé reviró los ojos y entró a instagram.–Mira, aquí.

Me acerqué al teléfono y me mostró el perfil en el que estaba, Leo_m leí, era el perfil de él, sólo tenía una foto y era una del que parecía su gato y él. Sonreí porque era muy tierna.

De prisa Rosé entró a la mensajería escribiéndole un mensaje a Leo.

–¡No! eso si que no.–Le dije tratando de tomar mi teléfono de vuelta.

Mi amiga comenzó a reír y traté de tomarlo de nuevo sin darme cuenta de que el mensaje ya había sido enviado.

–Mierda, ¡Rosé! acabas de enviarlo.–Me llevé la mano a la frente, quería que me tragara la tierra.

–Tranquila, sólo le pregunté por el gato.

–Ni siquiera responderá, ha de tener miles de...

El timbre de notificaciones de mi teléfono sonó, tomé mi teléfono y pude ver la notificación de Leo, me había respondido.

–Oh, por dios, si respondió.

–¿Qué dice?–Entré a mi mensajería leyendo lo que había escrito y le enseñé a mi amiga.

''Se llama Luigi, como en el videojuego''.–Escribió junto a un emoji de un gatito.