Y entonces, ¿Por qué? (Chile Countryhumans.)

número 25.

Estando en el parque, Camine lentamente, Con la mirada hacia el suelo.

─ Weón, Estoy arto, Por la chucha. ─

Estaba realmente enojado, Podría estar haciendo allí mismo una pataleta, Pero que sentido tendría hacerla. En eso chocó con alguien, Quien rápidamente pide disculpas.

─ Lo siento Lo siento, Oh, ¡Chile! ─

─ Alemania, Hola po' weón. ─

Le dedique una sonrisa, Falsa, Pero realista. Me devolvió la sonrisa, Bastante amplia, Se veía feliz.

─ No te había visto hace bastante rato Chile, ¿No te gustaría ir por un café? Yo invito, Aparte, Quiero hablar más contigo, Pero así, A solas, Sólo tú y yo. ─

─ Buena po', Esta bien, Vamo' po'. ─

No iba a decir que no, Pues aparte me podría distraer un rato de tanta wea, Así que accedí. Caminamos dirección a una cafetería que quedaba cerca, En el camino Alemania hablaba de ciertas cosas que si soy sincero, No logré comprender, Pero tal parece hablaba de su ¿trabajo?
Fue cosa de unos minutos, y ya nos encontrábamos allí. Entramos para dirigirnos hacia una mesa.

─ Oye weón, Que gran coincidencia que nos hayamos topao', Sospechosa la wea, Digo, ¿La Onu te mando o algo así? ─

─ Uhm, La verdad es que a ti no te puedo mentir, Y sí, ósea, me ofrecí. Pues yo estaba en el edificio, Y en cuanto te fuiste la Onu me llamo, Me dijo unas cosas, Y luego te nombró, contándome que te habías ido bastante mal... Por lo que decidí venir por ti, Al menos para que te puedas distraer, Lo necesitas. Espero que no te sientas incómodo con eso. ─

─ No No, Me parece linda la wea, Pues, Gracias weón, De verdad es muy lindo de tu parte. ─

Soltó una leve carcajada, Que weón, Era tan tierno. En eso llega el mesero quien nos hace nuestro pedido para luego retirarse.

─ En todo caso, Como te había dicho, Tenía ganas de poder estar solo contigo, Disfrutó estar junto a ti, Eres muy agradable. ─

─ Ya Weón, Para tu wea, Me voy a sonrojar si segui' así. ─

Tape mi rostro con una mano, Mirando hacia otro lado, Intentando esquivar su mirada.

─ Espero no sonar muy atrevido Chile, Pero, ¿Te han dicho alguna vez lo lindo que eres? ─

Me sorprendí ante lo dicho por su parte, Y mis mejillas sin previo aviso, Quedaron completamente rojas, Provocando una risa nerviosa, A lo que seguido de esto, Mordi mi labio inferior.

─ Ay weón, Que te poni' gay, anda a laar. ─

─ Lamento si te he incomodado, Pero tenía que decirlo. ─

En eso llega el mesero con nuestro pedido, a lo que rápidamente comencé a tomar del café que había pedido.
Nuestra conversación siguió fluyendo con normalidad, Aunque muchas veces al hacer contacto visual con Alemania, Nos poníamos bastante nerviosos. Al terminar me acompañó hasta la puerta de mi "casa", Y se despidió, Dejando un beso en mi frente.

─ Adiós Chile, Ten una buena tarde. ─

Me giño el ojo, Para luego irse alejando, Yo estaba congelado. A lo que eso escucho una voz atrás de mí, Que me saca de mis pensamientos.