Una Familia Mexicana Alv

The type of... (Sur)

Sur es el tipo de tío buena onda que te habla de la infancia de tus padres y te aconseja cuando la cagas.

Nuevo León estaba sentado en la entrada de la casa de los hermanos México, con las manos en los bolsillos de su sudadera moviéndolas de forma nerviosa en lo que esperaba a su padre.

—¿Leo? —El menor levantó su mirada solo para poder ver a Sur con algunas bolsas del mandado. — ¿Qué haces aquí chamaco? A esta hora salen los marihuanos.

Le tendió la mano para que se pudiera levantar, éste accedió y le ayudo con las bolsas.

Una vez dentro de la casa Nuevo León se sentó delante de su tío el cual le pedía explicaciones con la mirada.

—Quería hablar con Norte. —A pesar de que siempre lo llamó por su nombre ahora le daba un mal sabor de boca.

—No está. —Respondió Centro bajando desde las escaleras. — Se fue a un bar y por tu cara se que tuviste que ver con eso.

—Aquí está todo lo que me pediste. —Sur le señaló las bolsas, para luego señalar a Nuevo León. — Y tu, te quedaras a cenar y nos explicaras que pasó.

Mientras Centro estaba haciendo la cena, el segundo explicaba la situación a la vez que acomodaba la mesa, Sur escuchaba sentado desde la barra de la cocina.

—Y se fue. Eso pasó.

—Estás medio pendejo mijo. —Contestó la mujer mientras se sacudía las manos. — Tu padre también es pendejo, pero los quiere un chingo.

—Nunca lo demuestra. —Susurró melancólico.

—Porque nunca le enseñaron como hacerlo. —Habló por primera vez el sureño.

Centro se retiró con la excusa de ir a buscar romero al jardín, dejando a solas a ambos hombres.

Le hizo unas señas dándole a entender que se sentara a su lado. Así lo hizo. —Escucha hijo. Desde siempre todo el mundo a tenido altas expectativas de tu padre, por ello siempre le han exigido más.
Tu abuelo tenia una forma rara de mostrarme su cariño, pero con Norte directamente nunca le mostró nada. Al ser mayor que yo fue el heredero por lógica, desde muy chico fue mandado a luchar, debía ser fuerte. Por eso cualquier muestra de cariño era innecesaria. —Sur suspiró pesadamente mientras jugaba con la orilla de un vaso vacío. — Fue obligado a sacrificar a sus amigos porque preferían morir a ser esclavizados.

Nuevo León sintió su sangre congelarse y su piel erizarse.

—Sólo... —Dio una pausa buscando las palabras correctas. — Norte es una persona que no sabe demostrar cuanto te quiere a ti y a tus hermanos. Siempre vela por ustedes e intenta que el gobierno los apoye. Por eso casi siempre está en su oficina en su tiempo libre. —Eso último lo susurró mas bien para si mismo.

Nuevo León miró a su tío con curiosidad. Se acomodó mejor en su asiento. — ¿Qué mas pasó?

—Bueno, también vio con sus propios ojos como nuestra familia era asesinada por nuestro padrastro. —Giró para ver si su hermana todavía seguía afuera. Para luego susurrarle. — Él fue incluso peor con mi hermano, al ser el heredero del Imperio Azteca paso a ser el hijo estrella de España. ¿Alguna vez te preguntaste de que eran las cicatrices en su cuello y muñecas?.

El contrario negó.

—Supongo que tampoco has visto las de su espalda. —Susurró. — Bueno esas so-

—Son cicatrices de las cadenas que me ponían cada vez que no cumplía con las órdenes de España.

Ambos dieron un respingo al oír la ronca voz de Norte.