Cartas a Hyung - myg & pjm

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Jeon miraba fijamente a JiMin, retándolo en silencio, el pelirosa no se quedaba atrás, no apartó la vista en ningún momento.

Sus manos se entrelazaron colocando los codos sobre la mesa y su mentón sobre estas, el menor lo imitó casi de inmediato.

—Hyung, ¿sabes lo que sucederá si pierdes el juego, verdad? —El contrario asintió, atento a los movimientos del castaño—. Pues prepárate para una derrota inminente.

—No me rendiré tan fácilmente, golden maknae, verás que yo también tengo unos trucos bajo la manga.

Se enderezó mirando las dos cartas en su poder, solo él sabía cuál era la correcta y cuál no. Sonrió cuando el más alto dirigió sus manos al joker, dándole la esperanza que tanto quería, la cual se desvaneció en cuanto le arrebataron la otra carta.

JungKook lanzó un gritó triunfante mientras que JiMin se tiraba sobre la mesa, quejándose frustrado.

—¡Gané! —chilló victorioso, levantando los brazos al momento que bailaba divertido.

—¡No es juuuusto! Hiciste trampa.

—¡Claro que no! Eres muy evidente.

—¡Aaaaah!

—¿Qué pasó? —TaeHyung hizo aparición con una sonrisa cuadrada en el rostro— Uhh, jugaron y perdiste otra vez, ¿no es así, Minnie?

—Calla.

—Hyung, ¡baila conmigo!

El peliazul asintió posicionándose al lado del menor.

—Yolo, Yolo, Yolo ¡Yo! Yolo Yolo ¡Yo!...

—Tangjinjaem, Tangjinjaem, Tangjinjaem...

—Odio mi vida. —gruñó tapando sus oídos ante el coro.

—¡No te amargues, ChimChim! ¡Baila con nosotros!

JiMin los observó unos segundos en silencio antes de levantarse y colocarse al lado de sus amigos, moviéndose mientras cantaba.

—Yolo, Yolo, Yolo ¡Yo! Where my money? ¡Yeh!

—¡Eso, Minnie! —lo animó TaeHyung, mientras el castaño se quejaba en voz baja diciendo que esa era su parte, pero no estaba molesto, sino que una sonrisa adornaba su rostro— ¡Tangjinjaem, Tangjinjaem, Tangjin...!

—¡Chicos!

Se detuvieron ante esa voz tan conocida, volteándose para presenciar a un joven que respiraba agitado.

—¿Hobi hyung? —JiMin fue el primero en acercarse al mayor, extrañado de verlo en su sala a esas horas— ¿Qué hace aquí? Falta poco para el toque de timbre.

—¿Vino a jugar con nosotros?

—No seas tonto, Tae, hyung ha de tener cosas más importantes que hacer. —El peliazul hizo un puchero en protesta.

—Lo siento, TaeTae, será para la próxima. Por ahora tengo algo que preguntarles —Los menores se preocuparon ante el tono medianamente serio de Hoseok—, ¿quién de ustedes está interesado en YoonGi hyung?

En ese preciso instante el piso bajo los maknaes se movió ligeramente, pero bajo JiMin, él sintió un terremoto.