I'm Fallin' For You- Ross Lynch

Capítulo 22

[Parte 1]

Dos días después...

No había visto a Ross en estos días, lo que en cierta parte es bueno para mí porque tengo tiempo para pensar en lo sucedido.
Solo había visto a sus amigos y estos eran igual o peor que él en ser discretos.

Ese mismo día tuve que contarle a Caleb lo sucedido, digamos que mi sonrisa de oreja a oreja me delató. Él que se puso demasiado serio respecto a eso, pero me entendió.
Grace ya sabe de la existencia de Ross y está feliz de que por fin me haya decidido a intentar algo con un chico.
Mi madre y mi padre se encontraban igual que Grace, estaban feliz por mi (aunque no haya pasado la gran cosa aún).
Jack sabía que algún día íbamos a toparnos de la forma en que lo hicimos, y Ava igual me apoya.

Hoy Scarlet tenía junta con su tutora y habíamos quedado que la iba a esperar para irnos a comer juntas, aunque siéndoles sincera mi estómago está comenzando a rugir de hambre.

Scarlet no se enojaría conmigo si como una pequeña galleta con chispas de chocolate blanco, ¿verdad?

Caminé hacia uno de los carritos que venden golosinas y me compré mi preciada galleta. Después de eso, decidí dar un recorrido por la universidad mientras esperaba a que Scarlet saliera. Justo iba dando vuelta por donde se encuentran algunos salones y al otro lado del pasillo se encuentran los baños. Pues cierto rubio iba saliendo del baño acomodándose su cabello, cuando los dos nos miramos directamente a los ojos.

Yo iba comiendo mi preciada galleta, es más, aún la tenía cerca de mi boca. Rápidamente quité mi vista de la de él y comencé a caminar lejos de ahí.

¡Qué vergüenza! No puedo creer que me lo encontrara de esa forma.

Solo me pasan este tipo de cosas a mi.

-¿Violet?- una voz a mis espaldas hizo que detuviera mi paso.

Los nervios llegaron a mi.

Iba hacerle la estúpida pregunta de cómo sabía mi nombre, pero me la ahorré para no arruinar el momento.

-¿Si?- sonreí un poco cuando él se puso frente a mi.

-Yo...- se quedó callado rascándose la nuca con nerviosismo. Bueno, al menos no era la única que se encontraba nerviosa- soy Ross- suspiró- aunque eso ya lo sabes- murmuró más para él, pero lo escuché.

Sé a lo que se refiere.

-Hola, Ross- sonreí fingiendo no haber escuchado lo que dijo.