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La oscuridad acecha, las gotas parecen golpearme y no siento su frialdad, porque estoy muerto, porque estoy abstraído.

El día parece gris, parece desgastado, tanto como mi corazón.

Los ojos tristes sobre mi... Los ignoro, no necesito mas compasión, necesito olvidar.

Ojalá hasta mi propio nombre...

Si las paredes cambiaron no me di cuenta, de un momento a otro ya no son blancas, de un segundo a otro es mi cuarto y aquellos ojos tristes tratan de animarme, pero no logro escuchar lo que dices, mis oídos están sordos, mis ojos están cegados, mi alma esta destrozada.

Abrazo mi almohada tratando de encontrar el calor que perdí...

Eras mi pedestal, mi cimiento y el hogar cálido en el cual me he criado, me has dejado... Te fuiste sin antes decirme adiós.

Abuela... me siento pequeño y solitario, extraño tu voz, quiero respirar nuevamente tu perfume.

El sentimiento es tan pesado, me impide levantarme, comer y hasta dormir.

Cada ciertos momentos lloro, aveces olvidando el por qué.

Siento que he perdido mucho y que he olvidado el por que sigo aquí.

- Debes comer algo

Ignore tu voz suave y me giré sobre la cama dándote la espalda

(omnisciente)

- Ya han pasado tres días y solo has tomado agua, tienes que alimentarte TaeHyung...- quería sonar duro y darle una orden seria al omega, comprendía su dolor. Pero no solo él estaba sufriendo.

- Hoy han llegado nuestros hijos...

TaeHyung cerró con fuerzas sus ojos.

- Ellos necesitan verte, sentir tu calor, tu aroma... Necesitan de ti

Un sollozo adolorido hizo a TaeHyung temblar abrazando con mas fuerza la almohada.

- Ellos no me necesitan, no quiero... N-no quiero v-verlos.

No dijo nada mas y el corazón de HoSeok se rompió, salió inmediatamente de allí, la ira comenzaba a llenar su cabeza de palabras que no deseaba soltar.

Llego a su habitación y allí estaba JiSoo, su madre y esos dos pequeños bebés.

Los dejaron sobre su cama.

Él los observó y se olvidó de todo, ellos eran unos puros y lindos lobitos, necesitaban tanto de él, se sentía un alfa valiente y capaz de darles todo aquello que TaeHyung aún no podía.

- Pueden retirarse, quiero estar a solas con ellos.

Las mujeres se miraron entre si y se retiraron confiando en que HoSeok cuidaría de ellos por un momento.

Se arrodilló a los pies de la cama cerca de ambos bebés, habían nacido un mes antes y por ello estaban con un peso menor al que deberían.

Sus dedos indices viajaron hasta las pequeñas manitos blancas de sus cachorros y ellos inmediatamente presionaron, sintió un cosquilleo en su vientre, la sensación era indescriptible.

Ambos estaban tranquilos, no lloraban y eso en parte era un alivio, aún no sabía como calmarlos si eso sucedía.

- Los amo pequeños, son toda mi vida, ustedes y su papi...- hablaba con ellos, si bien tal vez no le entendían, HoSeok deseaba que si lo hicieran- Hablando de él... Les manda muchos besitos, él los ama bebés, solo está un poco enfermo, pronto papi vendrá, les dará mimos y todos los besitos del mundo.

El Omega De Jung || HopeV Donde viven las historias. Descúbrelo ahora