"Mini skirts & diamonds" •DKi // Yoonmin•

🍵¹⁸🥗

Ese día, Kitty investigó todo el día cómo alguien conseguiría su verdadero nombre. De por sí, no tenía sentido, pues había alterado su huella digital y su tarjeta de identidad no llevaba foto. No tenía cuentas en redes sociales con su nombre ni habían artículos en los cuales este se mencionara. Los únicos que conocían quién era eran Gucci Gang, quien en realidad se llama Taehyung, y su hermano, pero el vivía en las colinas, en paz, alejado del mundo.

Buscó de todas formas posibles y hasta imposibles, pero no hallaba nada. Siguió hasta que dieron la una de la tarde, cuando el hambre ya no podía ser controlada. Iba a llamar a Gucci, mas su celular sonó; era Jeon, de seguro deseaba salir a almorzar con él.

—Holis, señor Jeon —contestó con animosidad.

—¿Quieres ir conmigo a almorzar? Ya abrió el nuevo restaurante en Gangman, al que me dijiste que querías ir.

—Oh, sí —dijo antes de reír coquetamente—. Llego en quince minutos.

Ambos se encontraron en ese exclusivo local, el cual destacaba por sus colores cálidos y relajados. Cuando llegó Kitty, ambos sintieron que su día se animó, ya que, a pesar de que el pelirrosa no amaba a Jeon, se tenían mucha confianza y existía un vínculo entre ellos. Se preguntaron lo cotidiano, mientras el mozo les servía el té verde de cortesía. Luego pidieron una ensalada de hongos y bistec coreano.

—Entonces, ¿él descubrió tu nombre? Wow... Eso no me lo esperaba —comentó Jeon.

—Nunca lo esperé, pero, bueno, si descubro el suyo, esto dejará de ser un peligro —agregó con una gran sonrisa en su rostro.

—Algo me dice que estás cerca a conseguirlo.

—Pues mientras investigaba cómo halló mi nombre, noté ciertos documentos de él. Creo que si los rastreo bien, llegaré a su nombre.

Siguieron discutiendo sobre el mismo tema y de algunos logros empresariales de ambos. De hecho, gastaron un gran parte de su tiempo en presumir lo exitosos que eran. Sin embargo, ninguno se sintió inferior o cohibido, pues les iba de maravilla.

—¿Te gustaría venir está noche a mi casa? —le preguntó Jeon.

—Con gusto, cariño —contestó Kitty antes de besar la comisura de sus labios y retirarse en su Mercedes.