𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭, 𝐓𝐰𝐨 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 © ♕𝐘𝐎𝐎𝐍𝐉𝐈𝐍♕

Mᴜʟᴛᴀ ꙆꙆ/ꙆꙆ

Maldita sea todo, ahora si SeokJin estaba harto de NamJoon, su EX novio, quien seguía golpeando la puerta de su pequeño departamento insistiendo en que su relación aún tiene futuro.

No, ya no hay nada, que le cuesta entender que cuando engañas ya se acaba todo aúnque lo consideres un "error" eso sigue siendo una infidelidad por lo tanto la relación termina.

—NAMJOON YA VETE O LLAMO A LA Policía —gritó SeokJin mientras miraba desde la mirilla de su puerta y veía a NamJoon maldecir.

—Amor solo quiero hablar, no te haré nada.

—No me digas amor NamJoon, lo nuestro ya terminó ¿ok? —diciendo eso abrió la puerta y ahí estaba, el castaño mirándolo muy raro, entre tristeza y enojo —¿Qué te pasa? ¿Porqué me miras así?

Ese chico parece estar loco, porque empezó a reír fuertemente y agarro a los brazos a SeokJin, lo empujó a la pared y se acercó a su oído.

—Eres mío SeokJin —lamió su lóbulo —No lo puedes negar.

—Ja, claro que puedo —Una mirada de confusión se formó en NamJoon —No somos nada y por ende puedo coger con quien quiera, cuando quiera y el día que me pusiste los cuernos y yo también lo hice, no sabes lo magnífico que fue —dijo burlandose para soltarse del agarre de su ex y meterse a su departamento.

Lo último que se escucho fue un golpe en la pared y pisadas alejándose, maldición ahora todas las historias de wattpad que leía tenían sentido, el típico ex que está obsesionado, pero no importa, no no, porque ahora tenía a una persona especial.

Min YoonGi, el chico, oficial, con el cuál se veía desde hace unas semanas o meses, pues desde esa noche en donde follaron se siguieron viendo cada día después de ese y vaya encuentros los que se llevaban, no sólo fue sexo, también fue el conocerse y comprender que se querían, si talvez son semanas que se conocen, pero en la vida se toma riesgos y así puedes vivir de verdad, eso lo hacen SeokJin y YoonGi al enamorarse a primera vista.

SeokJin había llamado a YoonGi minutos después de este extraño momento que su ex le hizo pasar, y necesitaba tener a su hombre consigo. Nunca le había ocultado nada y esto no sería la excepción, porque YoonGi sabía del acoso de NamJoon y estaba a nada de partirle la cara y el cuerpo, pero no podía. SeokJin le dijo que no quería que se meta en problemas o lo acusen, no por su ex sino por él.

SeokJin se preocupa mucho por YoonGi.

El sonido de las llaves se escucho en su puerta y entró el hombre que estos días lo volvió loco de amor y pendejo. Si, YoonGi estaba en su departamento, ya tenía las llaves de su departamento, porque no, si ya son pareja y se tienen mucha confianza no hay porque ser cerrados.

—Jinnie, vino otra vez ¿Verdad? —dijo mientras caminaba hasta abrazarlo de la cintura y darle un beso en su cuello, en su mejilla y esos belfos tan jugosos y grandes.

—Si, otra vez vino —suspiro por sus besos —Amor no dejas que me concentre con tus besos —le regaño.

El oficial hizo un puchero y lo cargo para llevarlo a su habitación y tenerlo encima de él.

—Ahora sí cuéntame todo.

———

Luego de saber lo que NamJoon había hecho, otra vez, ambos tuvieron un plan para que deje de joder.

SeokJin fue por un café de vainilla al día siguiente, como siempre en su tienda favorita de cafés y como siempre estaba su ex esperando afuera, con su cara de maníaco, algo que asusto a SeokJin por un momento. Pensó otra vez en el plano y siguió con lo suyo, avanzando e ignorando a ese chico para adentrarse a la tienda y pedir su café.