Amame (Katsuki Bakugou X Oc)

33

Ya habían pasado varias semanas. Okuri tenía que ir con su tía, no le agradaba la idea de ninguna forma.

Estaba en la estación del tren, acompañada de su padre, Bakugou, Mina, Tsuyu y Uraraka.

— Aaaaaw! Okuri-chan, ¿Por qué vas a dejarnos? ¡Tenía muchas cosas planeadas para las vacaciones! — Mina la abrazaba con fuerza.

— Vas a hacernos mucha falta todo este tiempo, Kero — Tsuyu puso su mano en el hombro de la pelinegra. — Te esperaremos de regreso en clases, kero.

— Okuri-chan, llévate esto, así tendrás un recuerdo de todos nosotros estás vacaciones — Ochako le entrego con ambas manos una foto enmarcada de todos en el aula 1-A.

— Uraraka-san, esto es muy lindo, te lo agradezco — igual con ambas manos acepto la foto y la guardo en la mochila. — Sería imposible para mí olvidar los en tan poco tiempo.

Vio a su padre y le sonrió tristemente. Se acercó y lo abrazo.

— No quiero ir papá, me necesitas, ¿Quien va a ayudarte a cocinar? ¿O quién te ayudará a limpiar la casa los fines de semana? — se aferró con fuerza a la camisa de su padre.

— Puedo hacer esas cosas solo, pero aún así voy a extrañarte, pequeño mounstro — también me abrazo.

Finalmente mire a Katsuki, el se veía desanimado. Tomé su mano y lo ví a los ojos.

— ¿Porque Bakugou está aquí? — pregunto confundida Uraraka.

— Shhh, no digas nada, déjame ver — Mina le tapó la boca.

— Oye, rubio — llamo su atención — No estés triste, yo volveré. — alzó las cejas animada y le dió un pequeño golpe en el hombro.

— ¡No estoy triste! ¡Obviamente debes volver! — se sonrojo y simplemente la abrazo por la cintura. — Es solo que quería salir contigo en vacaciones, tch.

Susurro. Okuri sonrió y correspondió el abrazo.

— Cuando vuelva podremos salir las veces que quieras — Katsuki se separó y saco algo de su bolsillo.

— Está es la tuya — Mostró una pulsera, de esas que eran compartidas — Está es mía.

Mostró la otra, la suya tenía un tipo de llave que podía extenderse, la que ella usaria tenía un pequeño candado.

Tomo el brazo de su novia y abrió la pulsera, se la puso y la cerró. Okuri hizo lo mismo con la del rubio.

— ¿Y se supone que no mela puedo quitar sin la llave? — pregunto sabiendo la respuesta.

— Exacto, solo yo puedo abrirla — sonrió orgulloso.

— Oye, Okuri... Tu tren ya está aquí... — interrumpió Aizawa.

Okuri en un movimiento rápido le dió un beso en los labios a Katsuki. Abrazo a su padre y a sus amigas, tomo sus maletas y salió corriendo mientras se despedía.

— ¡Los quiero mucho a todos! — entro a la cabina del tres y los miro por la ventana, movía su mano despidiéndose, se fijó en el rubio.

Sonreía y mantenía un rubor suave en las mejillas.

( 💣 )

El viaje era tranquilo, escuchaba música y leía un libro, pero no podía dejar de morar la pulsera que le regaló Katsuki.

Saco de su bolso la fotografía de la clase A y sonrió, realmente estaba dispuesta a crear muy buenos recuerdos para contarles a todos al volver.

Pero... Alzó la mirada al escuchar ruido. Una explosión se hizo paso en el vagón y las llamas se encendieron rápidamente lo único que veía era sangre y fuego, escuchaba gritos y llanto.

En cuanto se levantó para ayudar, recibió un fuerte golpe en la cabeza y un dardo se implantó en su abdomen.

El golpe que recibió la dejo desorientada y sentís la sangre salir de su cabeza.

— ¿Q-que... Que pasa? — confundida cayó al suelo, estaba segura de que sería consumida por el fuego del vagón antes de que los héroes o autoridades llegarán a su rescate.

— Por favor... Ayuda — fue lo único que pudo decir antes de quedar inconsciente.