Capitulo 18.

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Wonho se sentía pesado y soñoliento al parecer todas las desvelándolas que había tenido las noches anteriores le estaban pasando factura. Paso la mañana durmiendo, solo se despertó un rato cuando sintió a Jooheon escabullirse como la rata que era, no olvidaba que lo había dejando solo cuando más lo necesitaba. Sabía muy bien a dónde y ver quién iba Jooheon por lo qué no se molesto en preguntarle y siguió durmiendo. El menor regreso al medio día. Con la ropa completa empapa por la lluvia. Wonho le pareció extraño que volviera en tal estado, cuando la lluvia que había caído apenas era un poco más fuerte que un roció.

— ¿Hyunwoo regresará hoy? —preguntó Jooheon. Ambos estaban viendo televisión, cuando terminaron de comer Jooheon había insistido en ver una película de terror, al principio Wonho se negó, porque sabía muy bien que en la noche Jooheon le pediría poder quedarse con él. Debido a lo miedoso que era.

—Probablemente si—respondió Wonho, con la mirada fija en la televisión. Hyunwoo había salido debido a que el señor Seo, le había llamado para que se reunieran.

— ¿Por qué sigue buscando la ayuda de la manada de Seo? —Preguntó Jooheon—. Los Yoo, han demostrado ser buenos hasta el momento.

—Hyunwoo cree que con la llegada de los Yoo al pueblo, otros vampiros pueden venir. Aunque los cuatros vampiros se han mostrado inofensivos. No sabemos si otros decidan venir y complicar las cosas.

—Lo dudo—dijo Jooheon, apartando la mirada del televisor—. Changkyun me dijo qué ellos no están ligados a ningún Clan.

Wonho alzó una ceja, Jooheon rodó los ojos, al parecer él y él vampiro tenían una excelente relación. Pero recordaba que Hyunwoo le había dicho que la jerarquía que manejaban los vampiros era muy diferente a la de ellos. Los vampiros no se regían por una manadas, se regían bajo el mando de un Clan.

— ¿Así? —inquirió Wonho—. ¿Ellos cuatro forman un Clan?

—No lo sé, la veces que hemos hablado Changkyun siempre se refiere a los otros dos como su familia.

—Ya veo.

El sonido de alguien llamando a la puerta, los sobresalto. Se mirando mutuamente Wonho entendió claramente la mirada del menor, él no se levantaría a ver quién era. Bufando Wonho se levantó y bajo a la sala. Antes de que su mano tocara la manecilla, sintió una corriente eléctrica recorrerle todo su cuerpo, acompañada de un familiar cosquilleo. Abrió la puerta y sus ojos se encontraron con unos fríos y hermosos ojos marrones. La sensación se intensificó mucho más al verlo. Hyungwon vestía un abrigo negro, llevaba un paraguas del mismo color en su mano derecha. Ambos se miraron por unos largos segundos.

—Hola—Dijo Wonho, sin ocultar su entusiasmo al ver al castaño.

—No pareces sorprendido al verme—Dijo Hyungwon, entre cerrando los ojos.

—Lo estoy—Aseguró Wonho, dejando salir una risita nerviosa—. Pero la emoción de verte es mayor.

—Nos vimos hace unas horas—Le recordó Hyungwon.

—Si, pero no es igual.

— ¿No lo es? —Cuestionó Hyungwon, frunció levemente el ceño.

—No, hace unas horas fui yo quien te buscó, ahora eres tú quien lo hace.

—Mencionaste que si no venia, irías de nuevo a mi casa—dijo Hyungwon—. A Minhyuk no le caes bien y lo que me menos quiero es verlos peleando de nuevo como gatos y perros.

— ¿Te estas refiriendo a mí cómo un perro? —Preguntó Wonho en forma divertida.

—¿Eso sería algo malo? —Preguntó el castaño fingiendo confusión

Blood [HyungWonho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora