No nos perdamos

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"No importa dónde me encuentre, no importa a dónde vaya, tu corazón es mi luz del norte, siempre encontraré el camino a casa."

Michael Kilby


POV: Emma Swan

Para mí uno de los placeres de la vida es abrir mis ojos a un nuevo día y ver entre mis brazos aún dormida al sol de mi vida. Sí, verla a ella, sentir olor, tocar su piel. Saber que está conmigo me indica que tengo que levantarme a enfrentar el mundo, a tentar al destino haciendo planes a futuro juntas. Beso su frente suavemente, con delicadeza salgo de la cama, acomodo su cobija y bajo a prepararle el desayuno. Me encanta consentirla de vez en cuando, porque ella y la vida me enseñaron a retribuir siempre el amor, las alegrías, todos los buenos gestos que tienen conmigo las personas que amo. Si se trata de mi amada esposa, ella merece hasta el cielo si pudiera dárselo.

En nuestro habitual encuentro con nuestra nieta no puedo evitar emocionarme al escuchar que ya tiene un importante avance de su libro. Me froto las manos nerviosa, me causa tanta emoción saber que pronto leeré mi historia con mi esposa contada por mi nieta. Aunque admito que lo que más me inquieta de todo esto es saber que Regina leerá todas las cartas que he escrito para ella toda mi vida. Mi morena me inspira tanto que teniéndola cerca le escribí, teniéndola lejos también, estando en lo mejor de nuestra relación igual lo hice, incluso en los momentos de debilidad me motivó. Porque mi amor por ella jamás ha disminuido, crecido si, a diario, pero nunca he dudado de lo que siento por mi bella esposa.

— Abuela Emma, debo admitir que me sorprendió mucho tu decisión de dejar a tu esposa y tus hijos, luego de distancias que no habías deseado en el pasado.

— No los dejé, jamás lo haría — refuto al instante — estuve pendiente de mis amores cada día de mi vida. Es una cuestión de crecimiento personal y como familia — aclaro — amar, tener una familia no es como resfriado, que cuando se va lo olvidas y sigues tu vida como si nunca pasó — Regina asiente orgullosa a mis palabras — al contrario cada día me enamoraba más de tu abuela por su infinita confianza en mí. Además mis hijos iban a crecer, necesitábamos ofrecerles lo mejor. Gina había dejado su trabajo para estar más tiempo por ellos, y yo ¿que había hecho? — suspiro mientras me encojo de hombros.

— Sus hijos ya tenían 5 años, eran muy listos, ¿cómo tomaron estar solo eventualmente con una de sus madres?

Regina posa su mirada en mi nieta y toma la palabra — cuando me preguntan que es lo mejor que le di a mis hijos, contesto orgullosa educación y amor a la familia — resalta pensativa — siempre les expliqué que su madre nos amaba. Que quería lo mejor para nosotros — sostiene con franqueza.

Estando lejos de ellos y conociendo algunas situaciones que estaban pasando con la familia de Regina, me preocupé. Era un futuro que yo no quería para mi relación. Estaba sola, obligada a pensar demasiado, analicé mi situación y me di cuenta que era suficiente. Ya había hecho algo humanitario que les contaría a mis hijos con orgullo. También tenía más recursos para ofrecerles un mejor futuro. Sin embargo no me gustaba la mujer en la que me estaba convirtiendo, en la que veía mi familia, en la que veían mis hijos, me vi al espejo y dije hasta aquí. Yo tengo un hogar, yo pertenezco a alguien, yo soy una mujer que cumple sus promesas, ¿Por qué no darle a Henry la oportunidad de tener con quién hablar de ciencia? ¿Por qué no ver a mi pequeña soñadora crecer? ¿Por qué envidiar a todas las personas que tenían la dicha de ver sonreír a diario a mi esposa? si yo conocía el camino a casa.

Fin de POV

Storybrooke 2017

— Mamá está leyendo un libro que dice que en octubre un planeta desconocido chocará con la tierra — parloteaba sorprendido Henry sentándose a desayunar junto a su hermana y su madre morena.

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