- Yo... Creo que no podría decir que no porque uno nunca sabe de quien se enamora y...- Justin miraba al presentador del programa y de repente miro hacia el público, no sé si pareceré una creída pero yo juro que me estaba mirando directamente a donde yo estaba mientras continuaba hablando- yo pienso que uno se enamora de una persona, da igual que sea una famosa como yo o no, es una persona y no creo que haya que poner etiquetas.
- Entonces, no descartas la posibilidad de enamorarte de una fan.
- No.
- Aunque, suena un poco complicado, porque tú ves a muchas chicas que no conoces...
- Siempre hay una que destaca y yo creo que eso lo sabes y luego es cuestión de conocerla mejor.
- ¿No sería muy raro?
- Sí la chica estuviera todo el rato diciendo eres Justin Bieber o haciendo cosas que no quiere porque soy yo el que se lo dice, pues en ese caso sí. Yo quiero una chica que sepa decirme que no-.
- Esa chica será muy afortunada contigo, bueno vamos a otra cosa- el presentador siguió hablando y haciéndole preguntas.
La entrevista terminó y yo salí de allí para reunirme con Justin.
- ¿Te gustó?
- Sí, estuvo muy bien.
- Vamos, ¿quieres ir a dar una vuelta?
- Claro pero ¿no les dijiste a los chicos que volveríamos por la tarde?
- Sí pero lo entenderán, no pasa nada.
- Ok, entonces digo que sí.
- Chicos yo me voy, chao, me voy con ____- dijo Justin a la gente con la que habíamos venido pero sobre todo a Kenny que ya venía hacia nosotros para ejercer de guardaespaldas.
- Justin ¿a dónde vamos?-
- Te voy a llevar a que me veas haciendo skate.
- ¿En serio?-
- Solo un poco, no nos tenemos que quedar toda la tarde si no quieres.
- Vale.
Al llegar nos bajamos del coche y Justin sacó un skate del maletero del coche. Estábamos en un parque muy bonito y había como una zona de skate.
- Ven- dijo agarrándome la mano.
Yo me senté en un banco a mirar y Justin se adentró en la pista. Empezó a hacer piruetas increíbles, lo hacía muy bien, lo había visto alguna vez en youtube y me encantaba como lo hacía pero en persona aún era mejor. Al cabo de un rato salió y empezó a dar vueltas y saltos con el skate alrededor del banco.
- Justin, ten cuidado, no sé cómo no te caes.
- No pasa nada es cuestión de práctica.
- Ya… Pero aun así, no sé…
- ¿Quieres probar?- dijo parándose delante de mí y levantando el skate para poder agarrarlo con una mano.
- No gracias.
- Venga, solo aquí en línea recta, yo te enseño.
- No.
- Venga por mí.
- Hasta dónde yo recuerdo, hace un rato dijiste que te gustaban las chicas que también sabían decirte que no y que no hacían las cosas solo porque tú se lo pidieras- dije sonriendo
- Ehhh... eso fue un golpe bajo.
- Me lo pusiste a tiro.
- Tú no necesitas gustarme...
- Y ¿eso qué quiere decir?
- Nada, olvídalo- agachó la cabeza.
- Dame eso y que conste que es porque quiero, no porque Justin Bieber me lo pida- me puse de pie y le quite el skate de la mano.
- Ok, ten cuidado- se rio.
Puse el skate en el suelo y subí un pie mientras con el otro empecé a impulsar. Cogí bastante impulso y subí el otro pie al skate, creo que iba muy rápido y no sabía girar así intenté moverlo dando un saltito.
- ¡No _______ cuidado!- gritó Justin justo cuando el skate se torció y yo me caí al suelo.
- ¡Ay!
- _____ ¿estás bien?- Justin se acercó corriendo y se agachó.
- Sí pero me hice daño- me miré la pierna, tenía la piel un poco levantada por el roce y un poquito de sangre.
- Es por tu culpa- dije mirándome la pierna
- Tú fuiste la que dijo que si lo hacía era porque tu querías, no porque te lo dijera Justin Bieber.
- Eso fue un golpe bajo.
- Me lo pusiste a tiro- se rio más.
- No me copies las frases- me enfadé y me cruce de brazos.
- No te enfades anda, vamos ¿puedes caminar?
- Claro- dije aun enfadada, pero me dolía un poco la pierna. Me puse de pie y me empezó a escocer, me dolía la rodilla que era justo donde doblaba para caminar.
- Así no llegamos al coche en la vida- dijo Justin poniéndose de pie. Agarró el skate con una mano y me cogió en brazos.
- Justin, bájame ahora mismo-.
- No- contestó mientras seguía caminando.
- Justin quiero que me sueltes, te lo digo en serio.
- ¿Quieres ir a tomar un helado?
- Sí me bajas, sí.
- Cuando lleguemos al coche te bajo, te echas agua en la herida y vamos a por un helado.
- Yo quiero que me bajes- seguí insistiendo.
- Ya casi llegamos.
- Justin, puedo caminar.
No me hacía caso así que, no insistí más, al llegar al coche me sentó en el maletero y me pasó una botella de agua para echármela por la herida.
- ¿Te la echó?
- Me duele la pierna, no las manos.
- Está bien.
- ¿Tienes un pañuelo para secármela?
- Sí espera.
Cuando sacó la cabeza y se acercó a mí para dármelo, levanté la botella de agua y le eché bastante agua por la cabeza y se le mojo toda la camiseta y el pelo.
- Ah... así que lo que quieres es guerra- dijo mientras sacudía la cabeza con el pelo empapado.
- Te la debía por no soltarme y copiarme las frases- dije riendo y secándome la herida de la pierna.
- ¿Con que sí?- se rio y me intentó sacar la botella de agua de las manos pero la agarré muy fuerte. Como no me la conseguía quitar empezó a zarandearla hacia mí hasta que le dio la vuelta y se derramó toda el agua por encima de mi ropa.
- ¡JUSTIN!
- Tú te reíste, yo también quería- se empezó a reír y se llevó las manos al estómago de la risa.
- No me hace gracia- me puse de pie para sacudirme un poco el agua.
- A mí antes tampoco me hacía.
- Pues te voy a mojar el coche porque yo quiero mi helado- le dije yendo hacia el asiento del copiloto.
- Vale, ya se secará.
- Y vas tú a por los helados, yo así mojada no voy a salir del coche- dije poniéndome el cinturón.
- Yo también estoy mojado.
- Me da igual.
- Esta bien, pero si me persiguen un montón de chicas porque aparezco por una heladería con una camiseta empapada, luego no me digas nada.
- Mejor, no te contestó a eso.