Swinger... 2º

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Mi mente toma consciencia, no está. ¿Dónde está? Juraría que acabo de verle frente a mí, causando mi clímax. Pero no había nadie ahora.

- ¿No decías que me iba a costar? –me susurra acercándose a mis labios.

Que le den a los ojos verdes, voy a comerle el coño a esta. La sujete sobre las caderas, mientras me tumbaba en la cama, obligándola a ponerse sobre mí. Su coño quedo a la altura de mi boca, justo donde lo quería. Aparte las bragas que me impedían tocar su piel y sin pensar empecé a lamerla. Tenía el coño depilado al cero, cosa que me encantaba y me enfusque con su clítoris en su causa.

- Hola chicos... - habló con voz afónica.

Siento unas manos acariciando mis caderas.

- ¿Me extrañaste? –habló una voz que reconocí, era el novio de A.

- Mucho. –habló sofocada, mordí suavemente su clítoris provocándole un gemido caótico.

Pero sí J está ahí, ¿Dónde está G? En cuanto lo pensé sentí una lengua acariciando mi vagina. Gemí sobre los labios de ella, cosa que ella me hizo saber que le encanto con una risa traviesa.

- ¿Por qué no jugáis con ella un rato...? –le ofrece a su novio.

- Encantado. –dice sonriente. – G, ¿me ayudas? –le dice con voz ronca.

Es entonces cuando siento que dejan de lamerme, suelto un quejido.

- P, cariño... Prometo volver enseguida a subirme. –me dice cortando su contacto, intento impedirle que se levante, pero siento que me mueven. Me colocan en mi misma posición sobre el cuerpo de alguien.

- ¿Me extrañaste, amor? –escucho la voz de G al mismo tiempo que siento como su polla entra en mi culo.

Suelto un gemido por ello, al sentir la embestida. G entra a la perfección, lubricado incluido ya. Siento como empieza a moverse dentro de mí. Busco a mi pelirroja, y la encuentro desnudándose a mi lado.

- Ya voy, toma lo que quieres. –me dice como gata, volviéndose a colocar sobre mi cara.

Sin pensar, vuelvo a comer de ella, lamiendo cada parte que me permito alcanzar. Siento como alguien se coloca entre mis piernas y las de G, es entonces cuando siento la estocada en mi vagina. No puedo reprimir el gemido al sentir como J y G entran de mí, entrando uno mientras el otro sale. A un ritmo perfecto, que me deshace bajo el sexo de A. Intentaron cambiar de postura pero yo no me deje. Me resistía cada vez que intentaban cambiar la postura. Quería las dos pollas dentro de mí y el coño de la chica en mi boca masturbándola con mi lengua. Suspiros muy profundos de los cuatro, especialmente de ellos en el momento de correrse. Ella apretaba muy fuertemente mi cabeza contra su coño. En cuanto escuche su gemido y sentí sobre mis dedos como su clímax llegaba, se levantó y se colocó a mi lado.

Una vez tumbada, G puso a A de culo y a la empezó a lamer como yo antes había hecho, en espera de una nueva erección. Mientras J, se puso a jugar con mi coño entre sus dedos y lengua. De vez en cuando los sacaba, para acercármelos a la boca y yo los chupeteaba al igual que un caramelo. Al rato de su jueguecito, pude sentir como entraba nuevamente en mí. Los gemidos eran intensificando, mientras el ritmo solo hacía más que subir. Me aferraba a su espalda, clavando mis uñas en él. Cuando sintió que su nuevo orgasmo llegaba, salió de mí para comenzar a masturbarse a horcajadas de mí. Vertió su semen sobre mis tetas y A no dejo ni gota de ellos. Lamio el semen arrastrando su lengua por mis pezones y aureolas, estremeciéndome de puro placer.

- ¿Le has enseñado ya como te corres, nena? –escuche la voz de G, quien había dejado de penetrar a A, para dejar que me lamiera.

A sonrió satisfecha.

- Es una squirt, cariño. –le dijo a su compañero más que contenta.

J abrió los ojos del asombro.

- Pues conmigo no se ha corrido... -se quejó.

-Es que es especial... -dijo con tono posesivo G, apresando mis caderas hacia él, colocándome a cuatro patas en el borde de la cama.

Me pega embiste muy muy agresivos, pero no soy capaz de decir no, puesto que me encanta cuando se pone así conmigo.

- No pares... -le suplico cuando siento el orgasmo comenzar a crecer en mi interior.

Escucho la risa de A y la busco, esta tumbada bocaarriba, a mi lado, siendo penetrada por su novio. Acerca su rostro al mío y nodudo en besarla, me importa todo ahora mismo poco, deseo besarla. Gimo en suboca, ella atrapa mis gemidos con gustos, mientras siento como me corro sobreG, soltando aquel chorro de flujos. 

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