Jimin sólo tiene 18 años, como es tradición en Busan ha sido comprometido a quién ha logrado pagar el precio de su mano, el problema es que las apariencias engañan y la realidad dista mucho de las ilusiones que el joven omega se hizo.
El encuentro c...
La herida de Min Yoongi finalmente había sanado casi en su totalidad, el leve fantasma de una cicatriz se percibía en su hombro, pero la extremidad ya había recuperado su movilidad. Tras el "incidente" con Jimin, dos días atrás a las atenciones del menor se le había agregado el aseo del alfa, y terminaba de la misma manera. Ese día el médico finalmente lo había dado de alta, lo que significaba que iba a poder dejar su estado convaleciente y hacer por sí mismo todas sus actividades, incluido su desfogue sexual.
-¿Jimin podemos hablar?- Caminó a su despacho, había finalmente regresado a sus pendientes laborales, por lo que quería aclarar el asunto que lo llenaba de culpa y le impedía concentrarse.
-Dime Hyung, ¿que sucede?- Jimin se sentó en la silla frente a su escritorio, repentinamente el mayor estaba perdiendo todo el valor.
-Con respecto a lo que ha estado ocurriendo estos días, ahora que mi brazo está completamente recuperado, supongo que ya no será necesario que me ayudes a la hora del baño- el rojo en sus mejillas hacía parecer una persona adorable y absolutamente amable. -No fue tu culpa lo que ocurrió, no debes sentirte culpable Jiminie- el omega comenzó a sonreír.
-Hyung, no lo hice por culpa, ¿pretexto tal vez? No sé realmente porque lo hice, mi lobo me exigió que lo hiciera y se aprovechó de la situación, tras la droga me he sentido un poco extraño, como si momentáneamente mi omega tomara el control e hiciera lo que desea, pero no es que no hubiera querido hacerlo también- agregó rápidamente y se avergonzó, sujetaba ambas manos moviéndolas nervioso.
-¿Cómo te has sentido con la terapia?- cambió de tema abruptamente tranquilizando al omega tras su declaración.
-Mejor, hay cosas moviéndose en mi interior para bien. Sé que no fue mi culpa lo que me ocurrió, soy un omega pero no por eso debería ser quien cocina, cuida la casa, y de las necesidades de un alfa. Al menos no como mi obligación. Un alfa no debería ser capaz de hacer lo que quiera conmigo, porque soy mi dueño. Aun hay cosas que me dan miedo, no sé como me sentiría de ver a Sooman, o qué sucederá si en algún momento decido tener relaciones sexuales- se calló al darse cuenta de toda la información que estaba dando. -Lo siento, ha sido demasiada información.- se disculpó pero recibió la negativa del mayor.
-No lo sientas, me alegra que me tengas la suficiente confianza para mencionarlo. Puedes acercarte a mi siempre que quieras hablar. - el omega asintió, se sentía regañado. -¿Has sabido algo de No Minwoo?- preguntó el mayor.
-No y no creo que lo haga, no habíamos tenido ningún contacto desde que se fue a Japón, no creo que eso vaya a cambiar, mucho menos ahora que Hoseok hyung lo está buscando-
-Si se comunica o lo intenta, por favor informarme o a Hoseok, no quiero que vaya a intentar nada nuevamente, no sé si su intención es recuperarte o usarte pero no me quedaré sentado esperando a que actué o ataque- se despidieron después de la pequeña platica, uno sintiéndose triste y otro sintiéndose culpable.
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