Stefanie Carver había sido el peor de los errores de Thomas.
La había conocido cuando era joven. Era una niña mimada y consentida que creía que podía obtener todo en la vida haciendo berrinches.
Pasados los años, Thomas comenzó una nueva relación con una joven y guapa modelo primeriza llamada Lisa Trade. Pero desafortunadamente, dos años después terminaron su noviazgo en el momento que se dieron cuenta que sus vidas no iban por el mismo camino.
Sin embargo, meses antes de que Thomas y Lisa terminaran, Stefanie había intentado interponerse entre ellos y separarlos.
Pero cuando acabaron su relación definitivamente, ella se aprovechó de eso y convenció a Thomas de salir en algunas ocasiones, lo cual resultó desastroso.
Stefanie se había convertido en una sombra que lo seguía a todas partes. Thomas había llegado a su límite y se armó de valor para mandarla a volar. Ella había jurado que él se arrepentiría de haberla tratado de esa forma. Y al parecer estaba tomando la venganza que una vez había pronunciado.
Thomas había pasado la noche en su antiguo departamento. Cada vez que trataba de cerrar los ojos y poder dormir, los recuerdos lo atacaban.
Había sido inevitable pensar en todo aquello que Karianna y él habían vivido alguna vez ahí. Se negaba a creer que todo fuera una mentira.
Pero al mismo tiempo las dudas lo acechaban. ¿Y si Karianna era una farsante? Si resultase ser cierto no tenía idea de que es lo que iba a hacer.
Se levantó de la cama y comenzó a rondar la habitación. Todo en ella lo hacía recordarla.
Sobre uno de los burós se encontraba un cuadro con una foto de ellos. Lo tomó y miró la gran sonrisa de Karianna. Un arranque de coraje y lo invadió y la partió en dos. Pero se arrepintió de inmediato cuando le vino a la mente la historia de esa imagen…
Karianna había tenido un día terrible en la universidad. Tan terrible que, ni siquiera quería regresar a su casa y estar sola, por lo que decidió ir al departamento de Thomas.
Entró con la llave que le había dado y se encontró con él en la sala.
—Kari, ¿qué haces aquí? No te esperaba —Dijo Thomas sorprendido.
—Mi día estuvo desastroso y no he querido pasar la noche sola, ¿puedo quedarme? —Preguntó inocentemente.
—Claro que sí, sabes que me encanta tu compañía —Le sonrió mientras la tomaba de la mano.
Habían pedido pizza para cenar mientras veían una película, y cuando terminó, decidieron sentarse abrazados uno del otro.
Karianna había tomado el celular de Thomas y comenzó a tomar fotos con la cámara frontal.
—Enderézate, quiero una foto de nosotros dos —Dijo ella mientras se acomodaba el cabello.
—Kari, tenemos cientos de fotografías juntos, ¿para qué una más?
—Quiero una en donde estemos así, informales, no como siempre, vestidos como si fuéramos a una fiesta.
Thomas accedió y sonrió naturalmente al igual que ella.
—Salimos muy bien —Dijo Karianna observando la foto en la pantalla.
—Claro que no, me veo mal.
—Ni yo que soy mujer digo que salí mal, nos vemos muy bien.
—La tomaste de mi lado incorrecto.
—¡Para mí es perfecta! Es más, la imprimiré y la pondré en un cuadro para que la tengas en tu habitación.
—¿Por qué no imprimes alguna otra? Debe haber una en donde salgamos mejor.
—No, esta es ideal, nos muestra tal y como somos —Le dijo sonriéndole.
—¿Tal y como somos? —Preguntó curioso.
—Sí, aquí eres el verdadero Thomas, y no el que sale a dar entrevistas frente a una cámara o asiste a eventos forzadamente vestido de gala. A mí no me importa quién eres, cuánto dinero tengas, a qué te dediques o tu fama. Sólo me importas tú y estar a tu lado escuchando siempre los latidos de tu corazón.
Era sincera. Siempre lo había sido. Cuando nadie sabía de su relación, ella siempre había estado ahí para él, levantándole el ánimo, diciéndole cuanto le encantaba verlo sonreír aunque a él no le gustara su sonrisa, apoyándolo cuando había perdido un partido o fallado un disparo a la portería.
Se sentía la peor persona al haberla estado tratando como una basura todo ese tiempo.
Karianna jamás le había mentido con respecto a sus sentimientos. Ella siempre le había sido fiel sin importar cuanto estuviera pasando. Karianna era la mujer de su vida y la estaba perdiendo por las intrigas inventadas por Stefanie. Todo era parte de una falacia creada por ella. Las palabras, las pruebas, todo era falso.
La noche anterior Karianna se veía totalmente destrozada y todo era por culpa de él.
Se sentía como un completo estúpido dudando de ella. Necesitaba pedirle perdón, reparar sus errores. La necesitaba más que nunca.
Salió del departamento, entró al ascensor y apretó el botón de la planta baja.
Miró la recepción vacía. Sintió un nudo en la garganta de tan solo pensar que ahí había comenzado a vivir, pues antes de eso nunca lo había hecho.
Condujo hasta su casa entre el tráfico de Munich. Parecía que había elegido el peor día para decirle a su esposa cuánto la amaba y que necesitaba su perdón.
Finalmente arribó a su destino. Tragó duro y salió del auto. Buscaba sus llaves para abrir la puerta cuando escuchó un grito pidiendo ayuda.
Era Karianna.
<<Karianna>>
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Hola chicas :)
Quise subirles capítulo ayer pero tuve que ir al doctor y después de eso el tiempo se me fue volando, pero aquí está finalmente, que pasen un buen viernes. xx
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They Don't Know About Us (Thomas Müller)
FanfictionPodría ser una figura pública, pero las personas no sabían nada de la vida privada de Thomas. Ellos no sabían cuanto amaba a Karianna.