Muy bien, ya estaba en esa casa, una casa que era mucho más grande que la suya. "¿Para qué tener semejante casa si vive sólo?" eso es lo que se preguntaba Argentina viendo todo a su alrededor. Había varias pinturas colgadas en las paredes –parecían muy costosas–, floreros, una alfombra roja, todo bien decorado e impecable, un aroma a cheto*. Si ya se sentía pobre dentro del auto de USA, ahora se siente peor.
—Welcome to my home, Arge (Bienvenido a mi casa, Arge)—. mencionó el inglés hablante con una sonrisa, mientras dejaba que las mucamas se llevaran las maletas a la habitación que le correspondería al latino.
—Alta casa diría yo—. murmuró para luego mirar al estadounidense. —Bueno, aclaremos un par de cositas—. respiró profundo. —No quiero apodos chotitos como el que me pone tu viejo porque te juro que te rompo el orto a patadas—. Estados Unidos asintió nervioso. —Nada de romperme las bolas a las cuatro de la tarde porque a esa hora estoy durmiendo, me levanto todos los días a las siete y media de la mañana, no antes ni después, a las siete y media ¿está claro?—.
—Yes, something else? (Sí, ¿algo mas?)—.
—Sí, estoy aquí por obligación de la ONU, así que no trates de hacerte el "amigo" conmigo—. resaltó aquella palabra haciendo que USA se sintiera un poco mal, como lo suponía, con el argentino iba a ser tan difícil poder hablar y crear una relación.
—It's okay (está bien)—.
—Ah cierto, otra cosa, ¿en dónde voy a dormir?—.
—Washington! Come here (Washington! Ven aquí)—. Argentina vió como llegaba un chico que resultó ser más alto que él. —Son, I present to you Argentina. Arge, I think you saw it a couple of times, was always by my side (Hijo, te presento a Argentina. Arge, creo que lo viste un par de veces. Siempre estaba a mi lado)—. Washington D.C. estrechó su mano con la del sudamericano.
—Ah sí, sí, sí. Vos sos el ex de mi hijo—. Argentina se dio cuenta de la boludez que acabó de decir, que le dieron unas ganas de que la tierra se lo trague.
Un silencio se formó en el ambiente. El mayor de los tres miró a su hijo buscando una explicación.
—Is seriously? (¿Es en serio?)—. Washington rió nervioso para después alejarse de su padre.
—Dad, if you want, I show Mr. Argentina the room where he will sleep (Papá, si quieres, le muestro al Sr. Argentina la habitación en dónde dormirá)—. habló con rapidez sujetando el brazo del argentino con delicadeza. —Please come with me Mr. Argentina (Por favor venga conmigo Sr. Argentina)—. el argentino soltó una risilla, comenzando a caminar junto con el estadounidense.
—Flaco, vos decime Arge, me hacés sentir re viejo con eso de señor—. los dos rieron mientras subían las escaleras.
USA frunció el ceño, molesto por dos motivos, uno; que Washington tuvo una relación con uno de los hijos de Argentina y él no le contó, y dos; su hijo ya le caía bien al latino. Pero no era momento para estar enfadado, ahora debía pensar en cómo podría hablar con el argentino sin que éste lo tome como un enemigo.
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30 Días no son nada; UsArg [Finalizado•Editado]
Fanfiction30 𝖽𝗂́𝖺𝗌 𝗇𝗈 𝗌𝗈𝗇 𝗇𝖺𝖽𝖺 • terminado EDITADO. ꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦꒷꒦ ┇por una decisión tendrán que ┇vivir juntos por 30 días. ┇Los une un pasado, lleno de ┇mentiras y secretos. ┇ 30 días no son nada.⁰⁰.♡ ☁️ Lee la c...