30 Días no son nada; UsArg [Finalizado•Editado]

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|Día 13 de 15 aproximadamente las 4:00 a.m|Casa Rosada.

Aún faltaba unas cuantas horas para que amanezca, todos los que permanecían en la casa seguían durmiendo. Argentina descansaba tranquilamente en su cama, Estados Unidos no estaba a su lado ya que éste se encontraba haciendo ejercicio. Desde que estuvo en el ejército y luego unos años en fuerzas especiales había adquirido la rutina de entrenar a esa hora, no descuidaba su aspecto físico por nada.

El sudamericano sintió un poco de sed y se despertó para ir a la cocina por un vaso con agua. Se fijó la hora en su celular y también había notado que USA no se encontraba allí, supuso que estaba entrenando. Cuando tocó los 15 días viviendo juntos en su casa, el norteamericano le pidió permiso para usar el gimnasio y también correr libremente alrededor del jardín.

Desde que dormían en la misma cama, era muy difícil controlarse estando tan cerca de alguien atractivo como USA (mentiría si dijera que no había tenido varias fantasías con él).

Estando en la cocina, se dispuso a pensar en todo lo que estuvo pasando en tan solo un mes. Fueron los días más interesantes de su vida y lo habían agotado mucho. Podía estar tranquilo ahora pero alerta, Turquía seguía allí y no necesitaba ser un genio para adivinar a qué vino. Aunque le sorprende que no haya hecho un escándalo como siempre lo hace, ella era tan difícil de comprender y le provocaba dolores de cabeza.

—Creo que ahora entiendo a Rusia—. Murmuró dejando a un lado el vaso de vidrio, ahora que lo pensaba mejor, ¿Cómo estará Rusia? Seguramente se estaba haciendo cargo de China. Turquía debió dejarlo bajo el cuidado del euro-asiatico, aquellos tres se llevaban tan mal que igual seguían juntos, cosa que Argentina nunca entendió y tampoco tenía ganas de entender. China no soporta a Turquía y viceversa, Rusia no aguanta a ninguno y ellos tampoco a él, eran tan raros.

Pero en algo si están de acuerdo, deben mantener la sociedad que existía entre los tres con Argentina. Son compañeros desde hace mucho tiempo y seguían unidos a pesar de que no todos se lleven de la mejor manera.

De repente el celular de Argentina sonó lo cuál le pareció extraño ya que para empezar ¿Quién lo llamaría a esa hora?. Contestó la llamada y escuchó la voz de CABA, eso le alegraba porque le daba la seguridad de que su pequeña ciudad estaba bien.

—¿Has visto la hora qué es?—. Preguntó con gracia y seguidamente bebió del vaso con agua.

—[Hola CABA ¿Todo bien por ahí? Sisi todo piola, ah qué bueno]—. Habló la ciudad autónoma imitando la voz del país.

—Bueno che...¿Y qué onda? ¿Novedades?—. Sinceramente no sé esperaba nada nuevo, además de que recién se levantó y más o menos estaba despierto.

—[Adivina quién se va a casar...]—. Mencionó el porteño, se podía notar la emoción contenida. Argentina escupió y se ahogó a la vez con el agua, estuvo un rato tosiendo y continuó hablando.