Moonchild | NamMin

24🌙

años después

N a m j o o n

Revisé la hora en mi reloj antes de salir del edificio de la Universidad, era la tercera vez que lo hacía como si el tiempo no pasara lo suficientemente rápido. Saqué las llaves de mi bolsillo y entré a mi auto dejando el maletín en el asiento de alado, puse mis manos en el volante y suspiré profundamente como si la mañana apenas estuviera empezando. Me mantuve así, como si hace unos segundos no había tenido prisa. Bajé el espejo esperando que mi rostro no luciera cansado y en eso una foto cayó a mi regazo.

La tomé y con mi pulgar acaricie las mejillas del sonriente rubio.

-Solo espérame un poco más, Jimin.

Volvi a guardar la foto donde antes estaba y puse en marcha su auto.

T a e h y u n g

Mordí mi labio indeciso sobre qué debía ponerme, fue cuando mi salvación llegó, Jungkook abrió la puerta de la habitación y me miro sonriendo con burla y los brazos cruzados.

-¿Qué haces, cariño?

-No se qué ponerme.

Jungkook rió, se acercó a la cama donde tenía varios conjuntos de ropa, apartó para mí unos pantalones holgados de color negro, un pulober blanco, fue hasta mi armario tomo mi tapado beige que me quedaba enorme, mis nuevos zapatos y una bufanda negra de algodón.

-¿Con eso estás bien?

Lo miré sonriente y asentí.

-Por ahora basta.

-Que chico tan exigente.

Reí y le di la espalda para volver a guardar el resto de la ropa.

-Bien, deberás darte prisa o llegarás tarde.

Abrí mis ojos a la par y me giré a ver el reloj de mi mesita de luz, Jungkook tenía razón, había pasado mucho tiempo eligiendo un atuendo. Me vestí a casi tropiezos, me coloque mi bufanda, saqué del cajón mi cubrebocas blanco y mi boina.

-Ya me voy, Jungkook ¡deseame suerte!

-¡Suerte, te amo! ¡Cierra la puerta al salir!

-¡También yo! -le grité y salí corriendo.

Salí a la calle a toda velocidad, frene un taxi y me subí inmediatamente dándole las indicaciones de ir a la estación del tren. Después me avergonce por ir con las manos vacías así que pare rápido en una florería y compre un ramo de rosas porque eran muy bonitas. Bajé en la estación del tren y corrí como condenado, era imposible llegar con tantas personas y casi me pierdo.

Entonces un tren se detuvo y tuvo la impresión de que era el lugar correcto. Fui directo allí, estaba impaciente.

Todo valió la pena cuando lo vi bajar del tren, lucia terriblemente apuesto en su uniforme militar, era más hermoso y maduro de lo que lo recordaba. Nuestras miradas se encontraron y corrimos hacia el otro, el momento fue tan único y mágico como sacado de una novela romántica.

Lo abracé cruzando mis brazos tras su cuello con cuidado de no marchitar las flores, nos alejamos un poco para mirarnos una vez más.

Él sonreía mucho y yo estaba seguro de que no podría ser más feliz.

Entonces nuestros labios se encontraron por medio del mejor beso que había sentido.

Nos reímos, él limpió una de mis lágrimas que no sabía que había bajado, le di un fugas beso y le entregué el ramo, él también me entregó uno y volvimos a reír al darnos cuentas que habíamos comprado las mismas flores.

-Bienvenido, teniente Kim Seokjin.

Le dirigí un saludo militar con mucha gracia que él correspondió al instante y con la seriedad que todas sus medallas demostraban.

-¿Nos vamos?

Tomamos nuestras manos y salimos de allí sin importarnos nada mas.

Como iríamos por Yongsun, Seokjin quiso comprarle unos chocolates y yo no perdí la oportunidad de recomendarle un excelente lugar.

Le mostré la vidriera y hasta yo me sorprendí de ver tantos dulces y golosinas, todo se veía delicioso y se sentía como un verdadero mundo mágico.

S e o k J i n

-Anda, entremos.

Taehyung entró a la dulceria antes que yo, miré el cartel sobre mi cabeza y en eso algo llamo mi atención, aún lado de la tienda había una joyería y tenían en exhibición un elegante anillo de oro blanco.

Entré a la tienda al escuchar la risa de Taehyung, allí dentro él pláticaba a gusto con un rubio. Lo recordaba como Jimin, uno de mis alumnos.

-Asombroso ¿este es tu negocio, Jimin?

-Ojalá, solo trabajo aquí, profesor Jin.

Asentí con una sonrisa y antes de que el pudiera platicarme sobre la variedad de golosinas el timbre de la tienda suena dejando entrar a alguien más.

-¡Nam!

Jimin sale de detrás del mostrador, veo a Namjoon limpiar la poca nieve que ha quedado en su cabello castaño y abrigo, luego sonríe cuando Jimin lo abraza, después nos encontramos y abre su boca impresionado.

-Seokjin, ¿cuándo te dieron de baja? ¡Bienvenido!

-Hola, Namjoon. Es bueno verte.

H o s e o k

Apoyo mi espalda contra la pared y mirando hacia el techo sacudo mi cabello, alzo mi mano hacia la luz y veo brillar a mi anillo de compromiso. Las horas extras en mi residencia me estaba matando, el primer año nunca es fácil, además de que pasó tanto tiempo dentro que ya no puedo ver a Yoongi. Pero todo valdría la pena hoy, tenía una nueva exhibición y me ha platicado sobre ella, pero no estaba seguro de poder asistir. Ha sido sólo una mentira, quería darle una buena sorpresa.

Bese mi anillo y sonreí antes de ponerme a trabajar.

Y o o n g i

-¿Dónde quiere que movamos este cuadro, señor Min?

-Pongan ese en la pared dos, el cuadro principal es el grande de fondo azul, ese irá en el centro de la exhibición y asegurense de taparlo con las cortinas rojas.

-Así será.

Asiento y meto las manos a mi bolsillo para ir a revisar el resto de los cuadros, quería que todo saliera bien para esta noche, sería mi tercera exhibición de arte y aún me emocionaba aunque estaría más feliz con Hoseok a mi lado.

-Yoongi.

Me giró hacia hacia la voz que resuena en mi cabeza, lo veo allí impecable como siempre, en su traje negro a rayas, su cabello perfectamente peinado con el flequillo a la mitad dejando ver sus enormes ojos. Todo mi interior se retuerce al verlo de esa forma y quiero golpearme tras el efecto que causa en mí.

-Es el día de tu exhibición, podrías mostrarte más feliz.

-Irradio felicidad -dije sarcasticamente.

Él se ríe.

-Todo saldrá bien, aún eres mi artista favorito.

-Es tu trabajo decirlo, Jungkook.

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Me fui un poco a la nada? Tal vez, pero no me culpen a mí sino a mi yo del 2018 yo solo estoy resubiendo con leves ajustes :b

Peeeero que lo vean todo tranquilo y rosa no quiere decir que ya estamos en el final feliz, todavía falta no se preocupen~ amen la tranquilidad mientras la tengan.