A Través De Su Sonrisa

Capítulo 34

Amaranta.

Abrí mis ojos y lo primero que noté fue el costal que estaba al lado mío, sonreí al recordar a Yassir a mi lado, ayer fue una noche completamente fantástica, ¡era su novia!

Empecé a acariciar su barba creciente y abrió los ojos.

—Buenos días preciosa— me saludó.

—Buenos días—traté de que no se me notara el suspiro, pero fue imposible.

—Jamás pensé que nuestra primera noche como novio la pasaríamos con ropa— reí y me levanté un poco con el codo, no dejaba de observarlo.

—Yo menos mi amor—le di un beso corto, solo un roce.

—Deseo despertar así todos los días, me encanta que me digas "amor".

—Es porque eres mi amor— esto de verdad parecía increíble.

—¡Yassir!— gritaron abriendo la puerta sorprendiéndonos.—¡Oh, perdón!—dijo Nasra apenada.

—Nasra estamos vestidos, ¿No te enseñaron a tocar?— estaba molesto.

—Si, sí—estaba sudorosa y asustada.

—Es Stefany... ¡Ya viene el bebé!—apenas dijo eso me levanté de la cama como un resorte y empecé a dar vueltas como loca.

—Vamos Yassir... Vamos es Tefy—dije ansiosa.

—Lo sé, deja de dar vuelta—dijo exasperado.

—Si, si... ¿Dónde están?—ya venia en camino el bebé, mi pobre amiga debía sentirse sola.

—Hospital Santa María—respondió más tranquila.

Fue todo en cuestión de minutos que todos se enteraron y a las tres horas ya estábamos en la clínica esperando el nacimiento. Said estaba dando vuelta como loco, nervioso, estaba que sollozaba.

—Estaba llorando mucho Ami— dijo preocupado.

—Es normal, las contracciones son muy fuertes...—a los poco segundos salió un doctor obeso con una pequeña bola rosada en sus manos.

—¡Es niña!—dijo a Said, todos saltamos de felicidad.

—Esto es hermoso...—dijo Said cuando cargo a la niña con sus ojos llorosos, yo también hice esa mirada, la mirada del amor verdadero.

*****

Un mes desde el nacimiento de Amanda, nombre de mi amiga en honor a mí. Estábamos festejándolo con una torta.

Era maravilloso, los padres de Yassir estaban aquí,\ el padre me hacía malos gestos, pero podía con eso, quizás necesitaba que le hiciera latir el corazón como lo hice con su hijo, sabía que me amaría como él, fui a la cocina por un vaso con agua, el dulce solía darme sed.

—¿Puedes por favor dejar de menear tus caderas de esa forma?—me sobresalté al escuchar hablar a Yassir de mal humor.

—¡Oye! ¿Qué sucede contigo?— pregunté curiosa.

—Me tienes completamente excitado moviendo tu trasero, también te levantas mucho de la silla, ¿lo haces para provocarme verdad?—fingía molestia.

—No sabes cuánto lo disfruto...—mordí mi labio inferior.

—Sí, me di cuenta que disfrutas ponerme duro—me mordí el labio más fuerte y pasé por su lado rozado ligeramente su entrepierna mientras lo observaba—no juegues con...

—¡Ven, quémame!—lo provoque, me jalo del brazo antes de salir a la cocina y me plantó un salvaje beso, mordía mis labios suavemente, me ansiaba.. sabía que esto me dejaría los labios hinchados, pero... ¿Qué importaba? escuchamos a alguien venir y nos separamos agitados, ya no podía soportar estar sin que me tocara, era Tommy.