†8. Química en el laboratorio

10.1K 1K 649
                                    

Feliz viernes (◕ᴗ◕✿)

Jihye

No dejaban de mirarme, y mastiqué la manzana para menguar los nervios. Despareció antes de que fuese otro mordisco.

-¿Está todo bien? -sonreí nerviosa cuando recobré la consciencia de lo cerca que estábamos los tres-. Me siento exactamente igual, ¿ha cambiado algo?

Taehyung me quitó el cuaderno de las manos temblorosas para entrelazar los dedos, y una calma extraordinaria acalló las inquietudes que tenía.

-Irás descubriendo muchas cosas en las próximas semanas. Espero que confíes en mí para guiarte por el buen camino -caí rendida a sus ojos, y el aura pura de Taehyung parecía haber sido sustituida por una seductora y encantadora.

Secretamente me quise poner de rodillas; y no para rezar

-Con los pensamientos que está teniendo, lo dudo mucho -Jungkook se hizo un hueco en la follada visual, y carraspeé para recobrar la compostura sin tener que soltar la mano de mi crush.

-No es verdad -me hice la digna bajo la mirada del pelinegro, y alzó las cejas con incredulidad. No me esperaba que sus labios se extendieran con tanta sensualidad a centímetros de mi cara, y me sonrojé un poco por su cara angulosa-. Esto se llama invasión del espacio personal, ¡acabad con la telenovela que mañana hay clase!

-Y bien que te está gustando la telenovela, nena -algo puntiagudo trazó una línea ascendente en la parte trasera de mi muslo, y pegué un salto cuando me pinchó una nalga-. Ups.

Enrolló la cola en mi rodilla y ahí la dejó, como una correa.

-¡Jungkook, eres un gil... -antes de que le escupiera en la cara por imbécil, Taehyung intervino.

-No hables mal, Jihye -tiró hacia atrás de nuestras manos cogidas, y le miré en busca de aprobación cuando dejé que me apoyara la cara en su pecho-; las palabras feas arrebatan la belleza a flores como tú.

No me consideraba una persona cursi; de hecho, me daban vergüenza ajena ese tipo de comentarios. Pero que Kim Taehyung te lo susurrara contra el pelo hacía a cualquiera pensar muy distinto.

-V-Vale, perdón oppa -durante unos segundos infinitos no pude dejar de mirar sus ojos, los cuales ahora no se parecían al castaño; sino al gris profundo de un cielo encapotado.

¿A él también le cambiaban los ojos de color?

Taehyung intuyó mi duda y sonrió, y como si hubiera apretado un botón, se me encendieron las mejillas con obscenidad. Me gustaría que Taehyung apretara el botón.

-Voy a vomitar con tanto azúcar -el sarcasmo personificado me sacó de mi mundo rosa, y Jungkook también optó por cogerme la mano; mano, no garras-. Jihye, ¿qué dijiste el otro día cuando estabas bebida en mi habitación?

Sentí su respiración en mi frente y su pelo rozar mi sien. Taehyung seguía abrazándome la cintura, y no despegaría la cara de su pecho ni aunque me pagaran.

Volvía a estar en el sándwich sexual, y sonreí para mis adentros

-¿No me acuerdo? -le miré con condescendencia, y el pelinegro chasqueó la lengua.

-¿No dijiste algo como que tu daddy era demasiado sexy como para ser cristiano? -frunció el ceño con falsedad, sonriendo por su agudeza.

-No...yo nunca he dicho eso -alcé el mentón para mirar a Tae, quién tenía una ceja alzada-, ¡te lo juro por D...-

-¿No sabes que mentir es pecado, Jihye? -forzó a que apoyara la coronilla en su pecho, yo dándole la cara a Jungkook. Fui a abrir los labios para defenderme, pero noté algo cálido en el labio; el pulgar de Taehyung mandándome callar. Oh joder, qué bonita forma de guardar silencio-. Y hacerlo en nombre de Dios todavía es más castigable.

Sarang Note ; kth, jjk [+18] CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora