Promise You.《Muke Clemmings》

8.4

[Michael P.O.V.]

Nora se había ido hace unos treinta minutos, mientras yo solo veía Bob Esponja y comía un trozo de pizza. Realmente, no quería pensar en esos momentos, no iba a preparar un discurso y repetirlo cuarenta veces para decírselo a Luke; solo había pensado en que podría decirle, no quería arruinarlo por sexta vez, joder, vaya que lo arruinaba mucho. No era lo que quería para Luke, o lo que esperaba, simplemente las cosas no estaban muy a mi favor, y yo no hacía nada para cambiarlo.

-¿Michael? -Preguntó Luke y yo solo di un salto en el sofá. - ¿Estas bien? Llevo tres minutos aquí y ni siquiera parpadeabas.

-Eh, si, yo, si... Necesito hablar contigo- Murmuré y él sólo se sentó a mi lado. -Estoy cansado de la ridícula situación en la que estamos. Quiero decir, tú recibes el odio de mi padre, algo que no mereces, y yo lo dejo pasar nada más. Luke, quiero que esto funcione, haré que funcione.

-Quisiera que eso fuera mucho más que palabras.

-Luke...

-Estoy cansado, Michael, desafortunadamente pasan tantas cosas que no hay tiempo para un nosotros, y no podemos hacer nada para evitarlo. Supongo y no es nuestro mejor momento.

- ¿Quieres decir... Que no deberíamos estar juntos?

-No lo dije, Michael.

-Lo hiciste.

-Escucha, nos daremos un tiempo para pensar. Como sabes, tengo que ir a Alemania con mi padre, negocios y publicidad, bah. Quiero que, durante esos días, pienses bien todo, analices la situación y yo estaré de acuerdo con la decisión que tomes.

-¿Simplemente te adaptas?

-Simplemente, yo ya analicé. -Dijo acariciando mi mejilla- Entre tanto enredo, me di un tiempo para mi, pensé y analicé y... Y tú eres lo que quiero, sin importar nada, Mikey. Por eso, estaré de acuerdo con la decisión que tomes, no importa cual sea. -Murmuró y se acercó para presionar sus labios contra los míos. Antes de que pudiera corresponder, él se alejó y acarició mi mejilla- Mi vuelo sale mañana.

-¿Cuantos días serán?

-Dos semanas.

-¿Puedo dormir contigo hoy?

-Vamos.

Tomó mi mano y ambos arrastramos nuestros pies hasta su habitación, la cuál siempre amé porque él la mantenía ordenada. En su escritorio tenía una foto de nosotros en una cena de navidad, él era un niño bastante agradable, casi mi mejor amigo entonces, y ahora era mi novio. Me sorprendía como cambiaron las cosas, cuando éramos pequeños nos odiabamos, a muerte, no lo quería ni ver; después, él era muy cariñoso conmigo, y comencé a quererlo. Años después fuimos mejores amigos. Y ahora era mi novio, mi perfecto y único novio.

Lo abracé fuertemente una vez que me acosté a su lado, no quería que se fuera, no lo quería lejos, él era mi todo. Pero había algo, había algo dentro de mi que no creía que ese sentimiento era lo bastante fuerte.