Capítulo 6~

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Jesús se acercó aún más a mí, y pasó su mano por detrás de mí cuello. Eso me hacía tener menos frío. Le miré a los ojos y sonreí, él hizo lo mismo.

Nos sentamos debajo de un árbol, en el césped. Empecé a mirar el cielo. Había millones de estrellas. Me encanta mirar las estrellas. Jesús alzó la vista, y vi en sus ojos brillantes el reflejo del cielo. Brillaban, pero a la vez estaban tristes. A Jesús le pasaba algo.

-Jesús...

Este bajó la mirada y se paso la mano por los ojos, secándose lo que parecían ser lágrimas. Acto seguido me miró.

-¿Qué?

-A ti te pasa algo...

-¿A mí? Qué va.

-¿Por qué lloras?

-No lloro...

-Llorabas.

Jesús miró de nuevo al suelo, estallando entre lágrimas. Entonces me puse un poco nerviosa. Me acerqué a el y le toqué un hombro.

-Es... Es una tontería. Es por mi hermano... Nunca lo había visto así.

-Jesús, es un simple resfriado. Ya verás como se le pasa en... Menos de tres días. No, en dos. Bueno, esta noche. Alomejor ya está bien. -Jesús sonrió un poco-

-No sé... Mis padres no han ido a comprar, han ido al médico. A mirar no se qué de Dani. No quiero que le pase nada... No puedo vivir sin él.

-Bah, no es nada... He escuchado que te gusta cantar. Cántame algo, haber si se te pasa.

-No sé...

-Vengaa -Supliqué, haciendo un puchero-

-Venga, vale..."Amarte como te amo es complicado, pensar como te pienso es un pecado, mirar como te miro está prohibido, tocarte como quiero es un delito. Ya no sé que hacer para que estés bien, si apagara el sol para encender tu amanecer. Falar en portugués, aprender a hablar francés, oh, la luna está a tus pies. Yo sólo quiero darte un beso, y regalarte mis mañanas, cantar para calmar tus miedos, quiero que no te falte nada"...

-Ai dios. ¿Ganaste las audiciones? Las has tenido que ganar. ¿Te has escuchado? Cantas genial.

-Bueno... Eso dicen.

-¿Y tu hermano es como tú?

-Sí.

-Joder...

Jesús me miró a los ojos. Se abalanzó sobre mí y me dio un abrazo. Pude escuchar como me susurraba 'gracias'.

Al cabo de un tiempo, me tenía que despedir de Jesús. Eran las ocho y mis padres llegarían pronto.

-Jesuso -Pues le llamé Jesuso, sí- Tengo que irme, mis padres llegarán pronto a mi casa y además mañana tenemos instituto.

-Vale guapetona, pues te acompaño a tu casa.

-Si te hace ilusión...

Me acompañó a mi casa. Apenas hablábamos por el camino, no sé por qué. Cuando llegamos me despedí de él.

-Bueeeno...

-Pues nos vemos mañana en el instituto, ¿no?

-Sí, supongo.

-Te presentaré a mis amigos. Seguro que os lleváis bien. No creo que mañana Dani vaya al instituto...

-No te preocupes, iré con tigo... Y con María.

-Claro. Por cierto, ayer me parece Daniel te dio su número.

-¡Es verdad! Se sacó un papelito de la manga, como si fuese un mago jaja.

Jesús se acercó a mi y puso la mano cerca de mi oreja. Sonrió burlonamente y me enseñó otro papel.

-¡Tachaaaaan!

Empecé a reírme y agarré el papel. Entonces me guiñó un ojo y se fue.

♥Dos Para Una♥ {GEMELIERS}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora