Otro día, otro encuentro con Mina. Lo peor fue en el desayuno, Mina no paraba de mirarme y Jiu lo noto. Me pregunto sobre Mina, y le conté casi todo. Solo omití la parte que fue mi novia ¿No es importante? Luego de eso, nos besamos terminamos en la cama, pero solo eso, porque Jiu me quiso llevar a un lugar y acepté. Me llevo al Río Sumida, bueno a comer en un lugar cerca, con una hermosa vista hacia el Río Sumida. Nos llevo varios minutos llegar pero valió la pena. Jiu parecía feliz y relajada.
—Aquí me traía mi madre adoptiva, me decía que mi madre me cuida siempre y que en las noche debo de estar segura porque no solo tengo a una mamá cuidándome, tengo dos madres para mí sola y tengo dos personas que me aman. —tome su mano.
—Ahora tienes a tres personas que te aman mucho. —Jiu me sonrió con lágrimas en sus ojos —No llores. —negó con su cabeza y la abracé —Te amo Jiu. —me acerqué a Jiu y le di un beso en los labios —Tengo que ir a estudiar. —asintió y se puso de pie —Yo pagaré, la próxima la pagas tú. —frunció sus cejas pero terminó asintiendo. Pague la cuenta y fuimos al auto.
—Yo también te amo. —antes de entrar al auto me lo dijo y quedé sonriendo —¿Entras o no? —entre al auto y vi a Jiu sonrojada —No digas nada, por favor. —asentí y no dije nada, tome mi mochila y saque mis apuntes —¿Te quedarás en un hotel de la universidad? —volví a mirar a Jiu.
—¿Quieres que me quedé? —solo encendió el auto —Jiu. —llame y me miro por un segundo.
—Trataré de buscar una casa cerca de la universidad. —sonreí, pero no.
—Jiu puedo ir a la universidad desde tu casa, puedo comprarme una motocicleta para ir. —mire a Jiu y la negar con su cabeza —No quiero molestarte. —freno el auto y negó con su cabeza.
—Nayeon yo quiero llevarte donde sea. —cuando paro el auto tome la mano de Jiu.
—Siempre quise una motocicleta. —dije sonriendo —Puedo tomar clases de conducir y solo conduciré cuando tenga el permiso. —Jiu me miro y solo asintió. No dijo nada más y volvió a arrancar el auto.
—Esta bien. —fue lo único que dijo. Luego de eso llegamos a la casa y al bajar vimos a todas afuera —¿Qué sucedió? —Jiu corrió hacia ellas y yo camine.
—Encontramos un araña, una muy grande... —dijo Sana.
—En la habitación. —dijo otra chica, creo que debimos presentarnos antes de todo.
—Iré yo. —Jiu tomo mi mano —Es una araña, no creo que me mate. —le di un beso en la frente y fui a la habitación donde se quedaban las chicas. Al entrar vi la araña sobre un cuadro.
—Dahyun debería hacerlo, pero salió... —yo tengo miedo, pero tengo más miedo a Mina, a lo que puede hacer conmigo. Es solo una araña. Agarre el cuadro y abrí la ventana para tirar al patio. Así lo hice y Jiu llego a mi lado.
—No iré al patio por un largo tiempo. —reí al escucharla, es tan linda.
Luego del ataque hacia las chicas de una araña, nos fuimos a la cocina y pedí que nos presentáramos. Al estar todas sentadas asintieron.
—Creo que todas conocemos a Jiu. —asintieron.
—Soy Park Jisoo, pero me dicen Jihyo. —hablo la chicas de ojos grandes y un buen cuerpo.
—Jeongyeon. —me sonrió levemente —Ellas son Tzuyu... —apunto a la chica más alta —Chaeyoung... —apunto a la más baja —Mina... —mire a Mina —Sana... —apunto a la otra japonesa —Y Momo. —mire a la otra japonesa, quien me miraba solo para tratar de matarme —Soy la mayor, de quinto año. —no la conozco —No trates de acordarte de mí, nunca llame la atención, las segundas no hacen nada Im. —todas nos quedamos serias. No conocía a ninguna, excepto al trió japones, solo a ellas, pero las otras estaban en la misma escuela y no logro reconocerlas, por lo menos debimos cruzarnos una vez, con Jeongyeon por lo menos. Pero no. Creo que ser hija de la gran señora Im me mantuvo lejos de todos.