Narra Nayeon
El día de ayer fue uno de locos. Sufrí un accidente, me informaron que mi madre esta preparando la boda con el chico Kim, Mina será mi esposa y me casaré el mismo día que mi cumpleaños. Aún faltan dos días, pero debo hacerlo todo perfecto para que Mina lo disfrute mucho.
La vi a mi lado durmiendo, se veía incomoda. Tome mi celular y llame a mi tía. Le dije que viniera con revistas de vestidos de novia y que traiga unos diseñadores, de los mejores, para que nos tomen las medidas y que nos hagan el vestido en dos días.
—Nayeon estas más loca que tu madre. —dijo mi tía al abrir la puerta de mi habitación en el hospital, colgué la llamada —Pero eres mi sobrina bonita y la única que conserva el apellido Im. —sonrió.
—Hola. —saludé y veo que miro de reojo a Mina.
—La señorita Myoui, me hubiera gustado mucho tenerla en la cama. —tome un almohada y se lo tire en la cara, para que dejará de mirar a Mina.
—¿Conseguiste los diseñadores? —mi tía se sentó en un sofá cerca de mí.
—Si y tienes buena puntería. —me volvió a acomodar la almohada en la cama.
—Ayer estuve practicando. —me miro raro y solo negué con mi cabeza —Tenemos que preparar los vestidos... —empezamos a mirar las revistas. Mina aún dormía y parece que los gritos de mi tía no la despertaron.
Luego de unos veinte minutos o más mirando las revistas, veo que llegaron las chicas. Mina ya despertó y fue a lavarse la cara en el baño. Yo solo elegí un vestido para mí y dejaré que Mina elija el que le guste. Las chicas entraron y mi tía les ofreció una revistas de vestidos de damas de honor. Todas miraron la revista juntas...
—Nosotras tenemos vestidos y queremos que te concentres en tu vestido y en el vestido de Mina, eso es importante y nosotras nos arreglamos. —no me parecía buena la idea.
—Esta bien. —dije sin más, sabía que no iba a poder hacer que cambien de opinión.
—Hola. —saludo Mina aún algo dormida.
—Ahora nos iremos. —dijo Jeongyeon arrastrando a todas las chicas y hasta a mi tía. Ahora nos quedamos solas.
—Ven Mina. —juntas empezamos a mirar los vestidos y vi que Mina se quedo viendo un vestido —¿Te gusta? —asintió —¿Quieres ese vestido? —volvió a asentir.
El vestido que eligió fue...
—¿Podremos tenerlos en dos días? —eso era complicado de responder, Mina hizo una pregunta muy difícil. Porque no sé si llegaran a terminarlos, espero que si.