A Daisy, una chica de 16 años, le toca enfrentar con un gran cambio de su vida, se va a mudar a Los Angeles, debe abandonar su vida de Colombiana y aceptar que a pesar de que no le va a ir del todo bien, va a tener que acostumbrarse.
Nos dijeron que Juli ya se podía ir a su casa. Junto a su familia la ayudamos a llevar sus cosas hasta el auto y la acompañamos hasta su casa. Estuvimos toda la tarde allí y en la noche volvimos al hospital para ver a Valen.
Ya saliendo de la habitación de Valen vi a Toto sentado en la sala de espera, me pareció muy extraño que él estuviera ahí, me acerqué
Daisy: Qué haces aquí? Toto: Quería saber cómo estaba Valen Daisy: Hay mucho veneno dentro de su organismo, aún no sabemos qué va a suceder. Todo esto es culpa de tu novia Toto: Lo siento, por eso quise venir y preguntar por ella. Y por cierto, Mayra ya no es mi novia Daisy: Bien por ti, no tendrás que ir a la cárcel a visitarla. Y podrías haber escrito para preguntar por Valen, no hacía falta que vinieras Toto: Creí que era necesario
De repente Peter entró a la sala de espera
Peter: Qué hace él aquí? Daisy: Dice que vino a preguntar cómo estaba Valen. Vos qué haces acá? Peter: Tus papás me dijeron que estabas aquí, y se me ocurrió venir a buscarte para que no tuvieras que pedir un Uber Daisy: Ayy, gracias. Sos muy lindo
Peter me llevó a mi casa y apenas llegué me acosté porque era tarde y estaba cansada.
Me desperté porque mi alarma estaba sonando. Me di una ducha, me cambié y después de desayunar me cepillé los dientes. Mi papá me llevó al colegio. No fue una mañana muy interesante. Todos nos miraban, nos preguntaban si estábamos bien, si necesitábamos algo, etc.
Juli no fue al colegio porque aún no se sentía del todo animada para ir. A la salida del colegio Pi y yo fuimos al hospital. Valen estaba peor. Los doctores dijeron que ella seguía empeorando cada vez más. Fue duro escuchar eso. Volví a mi casa y en la tarde Peter me llevó helado para subirme el ánimo. Subí una historia a Instagram:
daisybenedetti 10 min
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Mi mamá vino y se sentó junto a mi
Sandra: Y Peter? Daisy: Se fue, tenía que hacer otras cosas Sandra: Okey. Llamó Patricia (la mamá de Valen) Daisy: Qué sucede? -comencé a preocuparme- Sandra: Valen está mucho peor. Fue al baño y no eliminó el veneno, los doctores están buscando otra manera de sacarlo, pero se está complicando Daisy: Llévame al hospital, quiero estar con ella Sandra: Vamos
Llegamos y fui corriendo a la habitación de Valen, Pi llegó unos minutos después de mi
Daisy: Cómo te sientes? Valen: Muy mal, mucho peor que antes Pi: Lamento tanto lo que te está pasando Valen: No es su culpa, además ya se hizo justicia. Esas tres locas ya están tras las rejas Daisy: Sí, pero tú estás aquí, y cada vez estás peor Valen: No lo sé, todo pasa por algo. Quizás yo estaba destinada a esto Daisy: No digas eso, te mereces cosas hermosas, y esto no es algo hermoso Valen: Las tengo a ustedes y a Juli, eso es más que suficiente para mí
Las tres no abrazamos muy fuerte y después llamamos a Juli para hacer videollamada. Hablamos un rato largo y después el doctor nos pidió si podíamos salir de la habitación porque tenían que hacerle un control a Valen. Fuimos a la sala de espera, había mucha gente, todos esperando noticias de sus doctores. Ya era tarde. Volví a mi casa y después de cenar me dormí.
Me desperté y después de prepararme fui al colegio caminando. Estaba en la mitad de la clase de historia cuando mi celular comenzó a sonar. Era mi mamá. La primera vez lo ignoré, pero a la segunda decidí contestar porque creí que era algo urgente
Daisy: Lo siento, voy a salir
Cerré rápido la puerta, pero mi mamá ya había cortado. Esperé que volviera a sonar
[Llamada entrante de Mamá💖]
Daisy: Hola? Sandra: Hola hija Daisy: Qué pasa? Estoy en clases Sandra: Creo que será mejor si vienes para el hospital, los doctores dijeron que tenían que hablar con nosotros. Patricia me llamó para avisarme Daisy: Voy para allá
[Llamada finalizada]
Busqué a Juli y a Pi y juntas pedimos un Uber hacia el hospital. Llegamos y subimos por el ascensor al segundo piso, corrimos a la sala de espera y ahí estaban mi mamá, y los papás de Valen.
El doctor salió de la habitación de Valen y se paró frente a nosotros
