Camille - Carl Grimes | Terminada |

"learn"

-¿Estás bien?- la voz de Carl me hizo volver a la realidad.
Las calles de Alexandria ahora estaban vacías, las camionetas ya no estaban, mi padre ya no estaba.

Lo miré y mis lágrimas salieron al instante que nuestros ojos chocaron.

-ella era mamá- dije mostrándole la foto arrugada y vieja que papá me había dado.

Carl la tomó y me dio una pequeña mirada antes centrar su completa atención en la foto.

-te pareces mucho a ella - dijo con una ligera sonrisa.

-me hubiera gustado conocer a mi madre, que Elyse nunca se hubiera hecho cargo de mi.

-lo siento, Camz.

Simplemente negué y respiré hondo, si quería estar aqui debía dejar todo el pasado donde pertenece, atrás.

Limpié las lágrimas de mi rostro y sonreí.

-gracias por sacarme de ahí Carl- ahora el chico sonrió.

-fue un placer para mí, por fin puedo tenerte aquí conmigo.

Siempre me hacía sentir mejor cuando estaba con el.

Cómo si nada más importara, solo el y yo y era extraño, no lo conocía desde hace tanto, pero me gustaba el sentimiento que me causaba.

Este sería un nuevo comienzo.

Lejos de los salvadores, lejos de Negan y toda la mierda que hacía.

-¿Qué quieres hacer ahora que eres libre?

-vivir.

En realidad si me sentía libre.

Guardé la foto de mi madre y tomé la mano de Carl.

-¿podemos solo ir con Beth?

Carl sonrió.

-lo que tu quieras.

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-he dicho que no Camille y no pienso cambiar de opinión.

-¡pero Maggie!- chillé como toda una niña pequeña haciendo suspirar a la morena.

-por favor Cami,no me hagas esto,no puedes ir por provisiones, tu misma lo has dicho, nunca lo has hecho, no sabes usar un arma, no puedes defenderte así que no te voy a arriesgar.

-estoy de acuerdo con Maggie- intervino Rick.

-¡ay por favor, Rick!

-no has matado ningún caminante...

-¡puedo aprender!

Ambos suspiraron, sabía que los estaba desesperando pero quería salir por provisiones, quería hacer algo útil con mi vida, habían pasado algunos meses de desde que Negan me dejó volver y ni había ayudado con absolutamente nada, viendo cómo los demás salen y se arriesgan por traer comida, no era justo, quería ayudar.

-déjala, yo me encargo de ella- y llegó mi salvador, aunque me hubiera gustado que fuera Carl.

-no estoy segura Glenn.

-¿acaso no confías en mi, amor?- el chico preguntó haciendo que Maggie sonriera.

- de acuerdo- dijeron Maggie y Rick al mismo tiempo.

-¡si!- exclamé con emoción y salí corriendo a casa de Carl, quería decirle que iba a salir.

-¡¿a dónde crees que vas?! ¡Nos vamos ahora!

Las palabras de Glenn me hicieron detenerme desilusionada, en serio quería decirle a Carl.

-pero...

-Carl se enterará, ahora vamos rubia, nos espera un largo día.