Sentimientos

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Narra Meliodas :

Al sentir la boca de Zeldris, senti mi cuerpo estremeserse, mientras que a mi hermano se sentia tieso, sus ojos asombrados y sus manos temblaban.


-Alejate de mí idiota! -reacciona y se aparta de mi lado un poco sonrojado.

-Se ve bien que te gusto mi beso Zeldoris no te hagas. -le sonrei pícaro.

-No me digas Asi! Sabes que? me largo de aquí! -Se va volando a vuelo veloz.

Veia como mi pelinegro se largaba aquel lugar con el sabor de mis labios en los suyos.

Cuando note que estaba en el bosque por la cantidad de arboles que me rodeaban , escuché ciertas voces que me llamaban.

-Capitán! -escuche a lo lejos una voz femenina.

-he? -Reaccione- ah! Estoy aqui! , no se preocupen! -grite a una dirección.

-Donde "aqui" capitán?! -grita el peliazul.

-La cosa es que estoy en bosque , pero no se como volver. -Doy una risa.

-No se preocupe señor meliodas! Ahora vamos a buscarlo! -Grito la albina.

-Sí sí aquí los estare esperando! -Grite fingiendo.

La verdad esque quiero ver a mi hermano , porque ese beso no me dejo tranquilo , asi que fingi haberme extraviado para aprovechar en ir a verlo.

Narra Zeldris:

Mientras estaba regresando al castillo , no dejaba de pensar en ese beso que me dio meliodas , pero quien se cree que es ese infeliz! , aparte me llamo Zeldoris y eso fue la gota que derramo el vaso , ya al llegar al castillo me encontre con mi hermano , Estarossa , estaba junto con los mandamientos entrenando.

-Oye Zel vas a entrenar con nosotros hoy ? -Dice el peliplateado.

-No tengo ganas de entrenar ahora. -Dije desinteresado.

-Como quieras , me avisas cualquier cosa. -Finaliza mi hermano.

Pase por los pasillos hasta llegar a una habitacion la cual era la mia. Cerre con fuerza por aquella razón que me tenia confundido con meliodas.

Dejé de pensar en esas tonterías y fui hacia mi armario y comenze a buscar entre mis cosas algo más cómodo que ponerme.

Narra Meliodas:

Como dije antes. Fui tras mi hermano por que no me quedaria con las ganas de saborear sus labios y tal vez tener algo mas experimentado con el.

Al a ver llegado al lugar donde antes era mi hogar, pense entrar y pasar normal y llegar a la habitación, pero habría algo que me impediría entrar, el cuál era la misma puerta por que estaba cerrada. Entonces decidí rodear el castillo y localizar la habitación de Zeldris. Felizmente la encontre.
Me pose en su ventana y comencé a ver sus acciones, al parecer estaba poniendose su chaqueta que siempre usa, el color rojo resalta su cabello y ojos escondidos con el demonio que lleva dentro.

Abri la ventana desde el punto en el que estaba y entre silenciosamente, mientras él estaba volteado aproveche para abrazarlo por detrás.

-Te encontre! -rodie mis manos en su cintura y lo apegue hacia mi.

-Me-meliodas! Tu ue rayos haces aqu... -Le tape la boca para que no nos escucharan.

-Shhh , cállate o nos escucharan- lo mire fijo a sus ojos y luego di una sonrisa- te digo algo -acaricio su mejilla- extraños tus lindos ojos verdes esmeralda.

-Pues yo aborrezco esos ojos -se suelta de mi agarre.

-Porque? -Arquee una ceja mientras veía como Zeldris se miraba en el espejo.

-Porque cada vez que me miro al espejo y veo mis ojos ... Me recuerdan a ti. -Desvia la mirada.

¿Recordale a mi? Eso me llego al corazón, lo dijo tan tiernamente que me ruborise y me acerque a él para darle un beso.

Al principio se contuvo pero al final cedio , comenzó con un beso lento pero luego comenzó a ser un beso lleno de deseo y pasión.

No me resisti y me dispuse a tirarlo a su cama.

¡¡*🍋*!!

Apreto sus sabanas con fuerza y se puso rojo ,un rojo que no sabía si era de sonrojarse de la vergüenza o por el enojo que tenía.

-

Idiota .. que piensas hacer. -dice recostado en la cama mientras me miraba con el Ceño fruncido.

-Eres mio en estos momentos, dejate llevar... -susurre en su oido a lo que Zeldris se estremeció.

Narra la narradora cochinota :

El rubio comenzó a besar al azabache en los labios y en todo el rostro que tambien incluye a su cuello. El pelinegro daba unos jadeos nerviosos y se ponia cada vez más tenso.

-Me-meliod-ahs! -da un gemido ahogado.

-Me gusta que hagas eso -muerde su oreja.

-Bas-ta ah deja de hacer eso. -dice con las piernas inquietas.

Narra Zeldris:

No se porque, pero no podia hacer nada, ni moverme ni gritar ,me sentía débil. O es que no queria? El que meliodas demuestre sus sentimientos hacia mi es lo que me habría gustado, pero rara mente no lo hacía.

Queria mas. Me sentia tenso y nervioso, el lo sintió y comenzó a sobarme la entrepierna derecha, podia sentir mi pierna cosquilluda y la delicadeza de sus dedos pasar sobre ellos.

-Meliodas amm... -Mordiendome el labio inferior.

Sabia que el queria algo más que solo besos y caricias, al igual que yo , ya que yo también tenía sentimientos hacia el.

Sentimientos de dos demoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora