I-Ilusión
Pegada al cristal de la ventana de su habitación, veía como caían lentamente los copos de nieve. Era la primera nevada en su nuevo hogar, el primer invierno como dueña de su propia casa, y aunque estaba muy cerca de Longbourn, se sentía dichosa por tener un hogar con su amado. La única cosa que no le gustaba era no tener a Lizzy cerca.
Ambas se habían desposado con unos hombres maravillosos, que además eran grandes amigos, pero Lizzy vivía muy lejos de allí, y nunca la distancia le había parecido tan grande como en esos momentos.
-¿Qué te preocupa?- Le preguntó su marido mientras la abrazaba por la espalda.
-Te parecerá una tontería, pero pensaba que estas van a ser las primeras navidades sin tener a mi hermana a mi lado- Le confesó- Estoy feliz de pasarlas contigo, pero no puedo evitar pensar en lo lejos que estamos la una de la otra.
-No creo que seas tonta por ello- Le aseguró- Sé lo unidas que estáis y es lógico que la eches de menos- Besó sus cabellos con ternura.
-¿Sabes? Cuando éramos niñas, soñábamos con vivir cerca la una de la otra una vez que nos hubiéramos casado, fantaseábamos con que nuestros esposos serían unos hermanos gemelos que no podrían vivir separados y por ello decidían coger casas vecinas- Soltó una pequeña lagrimilla- Absurdo, ¿verdad?
-Bueno, Darcy yo no somos gemelos, y tampoco hermanos de sangre, pero nos conocemos y apreciamos como si lo fuéramos, y a efectos prácticos, lo somos- Le sonrió- Somos cuñados, así que a ojos de la ley somos hermanos.
-Lo sé, no me hagas caso, estoy un poco melancólica, y eso eran los sueños de unas niñas.
-Claro que te hago caso- La giró hacia él- Quiero hacer todos tus sueños realidad, por absurdos que estos puedan parecer.
-Charles, no es necesario, tan solo es nostalgia.
-¿Entonces le escribo a Darcy y le digo que no vengan?- Preguntó divertido, viendo la cara de sorpresa de su mujer.
-¿Que no vengan? ¿Qué quieres decir?
-Al parecer, tu hermana Elizabeth se siente como tú, y hace un rato he recibido una carta de nuestro cuñado Fitzwilliam comunicándome que mañana partían hacía aquí para pasar las navidades con nosotros.
-¿Lo dices en serio?- Él asintió- ¿A pesar de la nieve?
-Por lo que me decía en la carta, la necesidad que tiene Elizabeth de verte es tanta que ni un tornado les impediría llegar.
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De la A a la Z y de la Z a la A
FanficSerie de viñetas de Orgullo y Prejuicio, sin un orden concreto en el tiempo, pero siguiendo el abecedario, y después a la inversa