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Primer libro: Regreso al Pasado.

Capítulo 5.



La vida de Feng Ming como el príncipe heredero comenzó oficialmente. Él debía cumplir con muchos rituales como el príncipe heredero, sin embargo, no recibía ningún respeto o adulación por ello. Al contrario, era tratado más como un prisionero importante que como el príncipe de la corona.

De lo que Feng Ming podía captar de los chismes que circulaban por el palacio, el viejo príncipe era una persona muy patética, un completo inútil, además de beber lo único que hacía era jugar, temblaba y temía ante cualquiera con algo de poder, además de sucumbir completamente ante el rey regente. Aunque Wang Rong había violado al príncipe y se suponía que era un secreto, en realidad era conocido abiertamente en la corte, Feng Ming, por supuesto, fue el primero que había experimentado esto. Sin embargo, nadie parecía sentir simpatía por él.

—Qué bastado.. argh —Feng Ming susurró, aburrido hasta el cansancio mientras se sentaba en el salón del príncipe. Miró hacia arriba y suspiró.

Chiu Lan que permanecía al lado de Feng Ming, miró a su maestro con una expresión de confusión.

—Chiu Lan, ¿No dijiste que Rong Wang estaría aquí hoy?

—Sobre este asunto...  del paradero de Rong Wang, su humilde sierva no se atreve a especular. —Ella respondió obedientemente.

—¡Humph! —Gimió. Insatisfecho, se apartó de ella. Todas las criadas trataban a Wang Rong con respeto y temor, comparando con su actitud frente a Feng Ming a menudo terminaban en desacuerdo. —Ese Cao Cao, ¿Qué hay de bueno acerca de él? La mayoría de los canallas de la historia son siempre manipuladores como ese tipo.

De repente se levantó, salió hacia la puerta rápidamente. Chiu Lan lo interceptó a toda prisa.

—¡Príncipe! —Ella gritó —¿Adónde quiere ir el Príncipe?

—¡Estoy aburrido hasta la muerte! —Feng Ming alzó la voz gritando, el fuerte sonido fue transportado hacia el espacio abierto, el patio. Luego salió corriendo, sin embargo, tres segundos más tarde, los guardias del palacio se apresuraron a sus puertas y respetuosamente le pidieron volver dentro del cuarto del príncipe.

Era imposible escapar con los guardias que estaban afuera, no importaba cuántos cientos de miles de veces lo intentara, al tratar de huir lo detenían y saludaban pidiéndole volver a su habitación.

—Por favor, perdóname Príncipe, Wang Rong ordenó que permaneciera aquí. Recientemente hay rumores de que muchos espías han sido puestos en Xi-Rei, por la seguridad de su Alteza, sin el permiso de su Gracia, al Príncipe no se le permite dejar el cuarto.

—No soy un prisionero. —Feng Ming gritó en voz alta, los soldados no le hicieron caso, se inclinaron y luego se dieron vuelta y salieron de la habitación. Además, aseguraron la puerta del cuarto para que no pudiera escapar nuevamente.

Día tras día, los mismos hechos se repetían constantemente. Feng Ming se sentía muy aburrido; de hecho, el antiguo palacio poseía una impresionante decoración, pero si se mantenía mirándola todos los días, se convertiría en un inútil.

Se suponía que el palacio tendría muchas cosas divertidas para jugar y explorar, pero nadie se atrevió a ofrecer algunos de los entretenimientos al príncipe. ¿Por qué deberían cuando el príncipe no tenía poder? Incluso aunque intentó utilizar su título, simplemente fue ignorado.

Feng Yu Jiu Tian [ESPAÑOL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora