Los caballeros dorados
Mu ya estaba dentro de la cabaña preparándose para salir en búsqueda de alguna dama del palacio Valhala que le informara sobre la situación en Asgard.
- ¿señor Mu a dónde va? - pregunto la chica en cuanto entro junto a Afrodita - voy al palacio Valhala – menciono mientras se ponía un abrigo que se había encontrado dentro de la cabaña – oh, es una buena idea, jeje no se me había ocurrido. Bueno los acompañare hasta el palacio pero antes... - lira salió llevándose una bolsa. Busco dentro de las cabañas aledañas y trajo algunas cosas consigo, tres pares de guantes y un abrigo gabardina que se encontró – ¿esto no es robo? – Pregunto afrodita mientras se ponía el abrigo gabardina – bueno si quiere se los dejamos puestos, aunque no creo que les dé más frio de lo que ya tienen – menciono mientras señalaba las estatuas de hielo, con las razones de Lira sobre la ropa ninguno dijo nada más hasta que salieron de la cabaña. Ambos caballeros al salir se quedaron por un momento viendo las estatuas - ¿Qué fue lo que exactamente paso aquí? – Mu se veía un poco en conflicto por las estatuas de hielo y que estas estuvieran tan bien talladas como si fueran personas de verdad, Lira se encogió de brazos y señalo hacia el bosque – fuimos atacados en la noche, todo el mundo estaba en una pequeña celebración y de un momento a otro las risas se convirtieron en gritos y en lamentos, las personas a mi alrededor empezaron a quedar petrificadas en hielo y otras alcanzaron a huir, nadie entendía absolutamente nada hasta que llegaron los dioses guerreros y se empezaron enfrentar a unos gigantes de hielo mientras otros desalojaban a las personas para llevarlas al palacio Valhala. Avance junto a los demás cuando mi padre me alcanzo y me entrego su zafiro de Odín, dejándome como única explicación un beso en la frente. Al llegar al palacio nos dimos cuenta que los dioses guerreros no venían detrás de nosotros, los otros dioses guerreros que venían liderando el camino decidieron volver pero al pasar las horas tampoco se supo de ellos. Yo baje en la mañana a buscar a mi padre, pero hasta el momento no he encontrado rastros de él – al terminar el relato Mu y Afrodita se miraron entre si y acordaron con sus miradas no mencionar nada más del asunto.
Lira los condujo por el camino más largo pero más seguro, el que pasaba por un segundo pueblo antes de llegar al palacio, era más conocido por los habitantes y además era el que tenía mejor cobertura desde el palacio, además los guardias del palacio pasaban cerca del lugar patrullando.
Afrodita y Mu se sorprendieron al ver que las casas de ese pueblo eran más equipadas que las del otro pueblo. Pasando por las calles del pueblo escucharon bullicio dentro de una taberna, ambos quisieron ir a investigar pero Lira los detuvo jalándoles de nuevo hacia el camino – no sabemos si sea algún otro dios guerrero zombi o gigantes de hielo – Afrodita se soltó y se encaró a la chica, ya estaba realmente molesto de los cuidados excesivos de Lira – si mal no recuerdo mencionaste por el camino que los guardias patrullan cerca de aquí, entonces esto debería estar muy seguro ¿no crees? – Lira asintió y los dejo seguir con su camino. Entraron a la taberna más conocida del poblado, sus intenciones eran las de requisar y combatir con lo que fuera que estuviera ahí, pero se encontraron con una sorpresa agradable, en el lugar estaban algunos de sus compañeros en lo que parecía ser la mitad de una reunión de ex compañeros, el maestro Dohko estaba en una mesa pidiendo más cerveza, por otro lado estaba Aldebarán haciendo de tabernero dándole a sus compañeros más cerveza cuando la pedían, estaban también, Milo, Shura y Death apostando algo y bebiendo en otra mesa.
- ¿Quiénes son? - Lira entro detrás de los dos caballeros y al ver la escena simplemente se quedó con una ceja alzada al verlos tan tranquilos - son nuestros compañeros - Afrodita se sintió relajado al verlos, se sentó junto a sus compañeros quienes apostaban, Mu tomo a Lira de la mano, la llevo a la barra y movió un taburete para que se sentara – por favor Aldebarán cuídala – el mencionado asintió mientras Mu iba con el maestro Dohko.
- ¿y bien que te sirvo? – pregunto el grandote ganándose una sonrisa de parte de Lira – bueno dame una jarra de cerveza – y con la petición de la chica su jarra de cerveza estuvo lista en dos minutos. Lira tomo su jarra y fue a chismear la conversación de ambos caballeros, por una parte Afrodita estaba apostando y bebiendo de un vaso pequeño algo más fuerte que cerveza, desinteresada le dio un sorbo a su jarra y se fue con el otro caballero. En la mesa de Mu Y Dohko la conversación se había tornado a las desventuras que estaba viviendo la tierra de Asgard – oh mira que bien – Dohko tomo la jarra de cerveza que llevaba Lira en sus manos y le agradeció como si fuera una mesera. Mu lo miro dudoso pues el estado del maestro no era el mejor, estaba muy ebrio como para saber que en ese lugar no había mesera que pudiera servirle.
En un momento en que estaban todos relajados algo golpeo la pared de maderos de la cantina, llevándose después a Lira a su paso. Las astillas del lugar volaron por todos lados haciendo imposible ver por unos segundos antes que se despejara, tardaron en darse cuenta que Lira no estaba entre los escombros de la cantina – Mu – aviso Afrodita señalando hacia la dirección donde había aterrizado Lira, fuera de la cantina la chica se tomaba el estómago donde había golpeado el objeto que la saco volando. Sintió una corriente de aire frio detrás suyo que la hizo poner asustada – ay no – se quejó y volteo, para su suerte no era el dios guerrero que esperaba encontrar, era un hombre de cabellos verdes agua, con vestimentas casi iguales a los de su pueblo.
- dame el Zafiro de Odín de inmediato - Thor al ver al sujeto detrás de Lira se apresuró para reclamar lo que los demás dioses no habían podido hacer. Cuando Thor, mando de nuevo su martillo el nuevo sujeto tomo una posición de lucha, elevo sus brazos al cielo y luego apunto a Thor. Mu al ver que Lira aún se encontraba en medio de los ataques se tele transporto y la saco del lugar, Thor recibo el ataque gélido pero por parte de su hacha esta tenía su objetivo y no pararía hasta encontrarla. Mu empezó a correr con Lira en brazos al ver que el hacha aún seguía tras de ella. Unas notas realmente dulces pero melancólicas se escucharon cuando corrían por sus vidas, en el momento unas cuerdas se apresuraron a Mu y lo atraparon como si de un pez se tratase –oh mierda, espere un momento – hablo Lira mientras trataba de ver de dónde venía el ataque, veía del bosque pero no parecía verse nadie dentro de este. Lira tomo su arpa y empezó a tocar una melodía disonante que logro que las cuerdas que amarraban a Mu se retorcieran y se aflojaran – extinción estelar – en cuanto su cuerpo estuvo algo ligero Mu lanzo su ataque liberándose de definitivamente de las cuerdas. Las cuerdas se devolvieron al bosque y Lira quiso ir tras ellas pero se detuvo en el límite del bosque al sentir que todo apestaba a trampa.
Thor mientras aguantaba los ataques de los caballeros lanzo su hacha al ver a Lira desprotegida de nuevo, Lira estaba algo atontada pensando en si era su padre o no el del ataque, lo más horrible para ella era que ni siquiera se lograba ver alguna ilusión o algo parecido a su padre, quiso volver hacia el caballero de Aries, pero se vio interrumpida por otra hacha que dio contra ella y la zambullo en el bosque, el hacha se devolvió a su portador en cuanto dio contra ella, en ese momento supo que tenía que correr a todo lo que dieran sus piernas. No ponía atención al camino delante de ella por lo que era inevitable que tropezara, todo pareció ir en cámara lenta cuando sus pies se enredaron en una raíz y cayó al suelo, en su mente pasaron lentamente las escenas de como caía y las hachas inevitablemente hacían lo que buscaba su dueño, pero no fue así, ante sus ojos unos cuervos volaron delante suyo deteniendo una de las hachas que había lanzado Thor, varios murieron dándole tiempo de nuevo a que corriera, volvió a tropezar como tonta y en ese momento se resignó a lo que pasaría, cerró los ojos y espero sentada en el frio suelo, unos segundos después de esperar y que el hacha no llegara a su cuello abrió los ojos y vio a un hombre delante suyo, alto, de un tono de cabello azul oscuro, había detenido el camino del hacha con su mana desnuda, Lira abrió los ojos impresionada y se quedó callada mientras seguía al hombre al epicentro de la batalla.
Cuando llegaron, vieron todo el desastre de caballeros y dioses luchando - ya vasta - se escuchó un grito femenino, todos miraron a Lira pero no era la dueña de la voz puesto que caminaba tranquila a un lado de Saga, todos miraron confundidos a su alrededor incluyendo Thor que estaba más herido que nunca, Hela hacía presencia junto a algunos gigantes de hielo, Thor fue como perro lastimado hacia ella, la diosa al hacer un simple ademan frente a Thor se le curaron inmediatamente todas sus heridas.
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Fanfic Mu de Aries
FanfictionMu de Aries uno de lo caballeros que salvó a Asgard, es normal que algunas mujeres lo amén y es que quien no.