-Lo digo enserio —le dice Christoph a Olivia mientras estamos cenando.
-¿Enserio Oliver? —pregunta ella mirándome.
-Algo así —digo encogiendome de hombros, mirando mi plato.
-¡Miren, se ha sonrojado! —grita Paul.
-Esas reacciones causas en él Olivia —dice Christoph riéndose.
-Bueno si —digo riendo— la amo mucho —ella se sonroja por igual y me sonrie.Después de que nos calmamos, ella se cambió, se puso sus mismos pantalones y le dí una playera mía, invité a los chicos a cenar con nosotros, al parecer regresaron al hotel casi enseguida de nosotros.
Se están llevando bien con Olivia, eso me agrada, a ella la veo más tranquila y ese brillo en sus ojos regresó.
-Nos vamos —dice Christoph levantándose de la mesa.
-Es tarde y de seguro tienes muchas cosas de que hablar con Olivia —le sigue Paul.
-O muchas cosas que hacer —dice Christoph mientras nos guiña un ojo a ambos.
-No digan esas cosas —digo mirándolos seriamente.
-Cierto Christoph —menciona Paul mientras le da un codazo en el brazo— ella aún es menor de edad, aquí y en Alemania.
-Ya chicos —les digo riendo.Olivia por otro lado, ríe por igual, con la cara roja de la vergüenza.
-Ni modo Oliver tendrás que esperar —dice Christoph encogiendose de hombros.
Ambos salen de la habitación dejándonos a Olivia y a mi solos, ambos nos miramos a los ojos, me la pasaría todo el tiempo viendo esos hermosos luceros.
-Ven aquí —digo sonriendole, ella se levanta de su asiento y se acerca a mi sentándose en mi regazo— ¿te agradan?.
-Claro que me agradan, ¿Por qué no habrían de hacerlo?.
-Bueno, son algo raros —digo riendo.Ambos reímos mientras nos miramos el uno al otro, de pronto viene algo a mi mente, algo que me hace ponerme serio.
-¿Qué pasa? —me pregunta con el ceño fruncido.
-Nada —digo sonriendo de nuevo.Si pasa algo, Till, se supone que él ha hablado con Olivia durante todo este tiempo, pero no le preguntaré, al menos no por ahora.
-Oye, tengo sueño —dice dando un bostezo.
—yo rio, mirando lo tierna que se ve— vamos a dormir entonces.Nos levantamos de donde estamos sentados y nos dirigimos a la cama.
-Toma —digo sacando un Pans de mi mochila— es algo incómodo dormir con un pantalón de mezclilla.
—ella lo sujeta y me sonrie— gracias, ¿podrías...
-Oh claro —digo saliendo de la habitación con mi pijama en la mano.Me cambio afuera y vuelvo a entrar, está sentada en la cama, me acerco a ella y le sonrio, ambos nos acomodamos en la cama, trato de mantener distancia entre ella y yo, no quiero hacerla sentir incomoda, aunque ya dormimos juntos una vez.
-Olivia —digo mirando el techo.
-¿Qué pasa? —pregunta volteando a verme.
-Te diré algo y no aceptaré un no por respuesta, ahora que regresemos a Alemania, te llevaré conmigo —digo volteando a verla, no encuentro ninguna emoción en su rostro hasta que me sonríe.
-¿Estás seguro de que quieres lidiar con una persona como yo? —pregunta riendo.
-Por supuesto que si —digo sonriendo— estoy dispuesto a hacer lo que sea por ti, por verte feliz.
-Entonces... —dice haciendo una pausa— acepto ir contigo.
-¿Enserio? —pregunto emocionado.
-Ya no hay nada que me hate a seguir en México, reprobé la preparatoria por faltar un mes —dice riendo— además te prometí que si el destino volvía a juntarnos dejaría todo por ti.
-Por eso no te preocupes, seguirás tus estudios, yo te voy a apoyar —digo sonriendo, recordando lo que escribió en aquella foto que me dió.
-Pero me dejarás trabajar eh, no pienso estar de mantenida —dice riendo.
-No me agrada la idea —respondo frunciendo el ceño— pero si tu quieres.
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𝙎𝙄 𝙉𝙊 𝙏𝙀 𝙃𝙐𝘽𝙄𝙀𝙎𝙀 𝘾𝙊𝙉𝙊𝘾𝙄𝘿𝙊
Romance¿Soledad?, ¿vacío?. Oliver Riedel siente que su vida ya no tiene sentido y que él no merece vivir, una chica llegará para demostrarle lo contrario.