𝙎𝙄 𝙉𝙊 𝙏𝙀 𝙃𝙐𝘽𝙄𝙀𝙎𝙀 𝘾𝙊𝙉𝙊𝘾𝙄𝘿𝙊

𝑺𝒊 𝒏𝒐 𝒕𝒆 𝒉𝒖𝒃𝒊𝒆𝒔𝒆 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒊𝒅𝒐.

Mi mundo se detiene al verla, la pequeña brisa de aire que choca contra mi rostro detiene todo a mi alrededor, es perfecta, mi corazón late al cien por hora al verla acercarse a mi, con ese vestido blanco, y esa sonrisa que la hace versa perfecta, me siento nervioso y emocionado como aquella vez que me acerque a ella por primera vez, un cosquilleo se abre paso en mi estómago y siento un calor inundar mi ser, mis mejillas también se sienten calientes, ¿me estoy sonrojando?, eso provoca ella en mi.

°°°

Omnisciente.

-Mi Oliver —Olivia sonríe observando los ojos del hombre de su vida frente a ella— aún recuerdo la noche en que te conocí, siempre recordaré el momento en que tus hermosos ojos verdes se cruzaron con los míos, hoy te abro mi corazón cómo lo he hecho siempre, hoy me uno a ti para hacerte más feliz cada día de nuestras vidas, prometo que seré el mejor apoyo que puedas tener, siempre seré tu fan número uno, prometo que estaré ahí cuidándote, amándote, alentandote a ser mejor, prometo que cuando caigas yo estaré ahí para sostenerte, que cuando llores yo estaré ahí para limpiar cada una de tus lágrimas y para curar tus heridas, quiero terminar de crecer y madurar a tu lado, por que sé que eres el hombre con el que quiero compartir mi vida, tú lo eres simplemente todo para mí, no veo una vida sin ti a mi lado, nunca me importará lo que digan los demás sobre lo nuestro por qué a pesar de los años de diferencia entre tú y yo, sé que este amor es real y único, tal cómo tú —suelta un pequeño suspiro para poder continuar, Oliver la observa fijamente escuchando con atención cada una de las dulces palabras que su hermosa chica le dedica— prometo estar ahí siempre que lo necesites, aunque estés lejos de mí, tus alegrías serán las mías, tus tristezas serán las mías, por que tú y yo somos una sola alma que enfrenta todo, miranos, hemos pasado mucho y ahora nos encontramos aquí, amándonos con la misma intensidad como cuando nos conocimos por primera vez, eres mi sueño hecho realidad, eres mi primer y mi gran único amor, eres perfecto, aun con cada una de tus imperfecciones, cada día que paso a tu lado solo me hace amarte aun más y no puedo estar más segura en que tú eres mi vida entera y en que quiero disfrutar cada día de mi vida contigo, hasta el último.

Ambos sonríen, todos se encuentran expectantes ante todo, para Oliver y Olivia es como si nada más existiera, solo ellos, solo su amor, solo su alma.

Oliver toma aire, los nervios lo hacen soltar una pequeña risa nerviosa que su bella dama le devuelve.

-Mi pequeña Olivia, tu llegada a mi vida me ha llenado de paz, amor, felicidad, y de muchas otras emociones inexplicables que me han hecho sentir el hombre más afortunado en esta vida, quiero cuidarte, quiero apoyarte cada día de nuestras vidas, quiero verte cumplir cada una de tus metas, y estar ahí para aplaudirte y felicitarte, prometo ser mejor para la hermosa familia que hemos comenzado a crear juntos, quiero pasar todas las tempestades a tu lado para cuidarte y protegerte, quiero ser tu protector en lo que me resta de vida, por que eso has sido tú para mi, me has hecho amar la vida, tú, mi dulce y pequeña alma, has hecho a este hombre ser tan feliz, quiero despertar cada mañana y ver tus hermosos ojos con aquella alegría, con aquella ternura y aquella luz que ilumina mi vida, quiero abrazarte a ti, a mi hijo y a los futuros hijos que tendremos —la pareja sonríe por esto dedicándole una pequeña mirada al pequeño que se encuentra en los brazos de su tío Till, ese pequeño es la luz de ambos y la prueba de un amor tan grande que nunca terminará— por muchos años, deseo con todo mi corazón hacerte feliz para que esa sonrisa nunca se vaya de tu rostro, por que es mi favorita, mira a este amante tuyo lo tienes rendido a tus pies amandote más que a su propia vida por que tú eres su vida entera, eres aquella que lo impulsa a hacer lo inimaginable, eres mi alma, mi sol, moriría por tus ojos, el simple hecho de que me sonrías me hace sentir miles de emociones, como el día en que te conocí, siempre me he preguntado cómo sería mi vida sino te hubiese conocido, ¿y sabes algo?, mi vida no sería vida sin ti, desde el día en que te conocí supe que jamás querría irme de tu lado, y así será, hasta el último día de mi vida, te amaré como lo he hecho desde un principio.

Ambos finalizan sus votos matrimoniales y les es inevitable llorar, su felicidad es tan grande, la ceremonia continúa; la bendición del Padre y los anillos para terminar con aquel beso en el que sellan su amor.

°°°

Tiempo después.

Unos nuevos ojos iluminan nuestra vida, y de nuevo, son del color de mis ojos, pero aquella mirada encantadora es del amor de mi vida, estos me miran fijamente y me siento el hombre más afortunado por tener a esta nueva mujer en mi vida.

-Ella es como tú —menciono mirando fijamente a mi Oli.
-Será un desastre entonces —rie acariciando los cabellos de Alexander que se encuentra dormido en su regazo.
-Claro que no —devuelvo la mirada hacia mí preciosa hija— ella es y será perfecta como su madre.

Mi hija me sonríe tiernamente y yo beso su frente sintiendo su dulce aroma llenar mi ser.

°°°

-Bien hijo, estás listo —menciono acomodando los últimos cabellos de mi hijo.
-¿Entonces ya podemos irnos? —pregunta emocionado saltando por todas partes.
-Claro que...
-¡Iré por Alba! —me interrumpe gritando de emoción mientras sale de la sala.

Mi pequeño Alexander ahora tiene seis años, mi pequeña y dulce Alba tiene cuatro años y mi vida, Olivia tiene veinticinco  lo que me convierte a mi en el viejo de la familia con más de cinco décadas de edad encima, mi vida, nuestra vida no puede ir mejor, mi hermosa esposa y yo nos amamos como el primer día en que nos conocimos, nuestro amor se mantiene joven y vivo, no perdemos ese encanto, aunque quien realmente no lo pierde es ella, y no es solo por su edad, aún sigue siendo mi pequeña de diecisiete años que conocí aquella noche en aquel bar, aquella que logró tomarse más Shots que yo, aquella con la que me columpie y me recosté en el pasto, siempre ha sido y será ella y yo siempre la amaré como el primer día.

Observo a mi bella Olivia acercarse a mi tomando a mis dos hijos de la mano, Alexander es sin duda una réplica de mi y Alba es una réplica de Olivia, aunque siendo sinceros los dos tienen mucho de ambos, tanto física como mental y espiritualmente.

Doy un beso en los labios de mi chica y sujeto a Alba de la mano, ella me mira con aquella ternura, sonriendome como lo hace su madre.

-Bien, vamos entonces.

Quisiera estar siempre para ellos, quisiera ser siempre su fortaleza, desearía estar ahí, desearía hacer el mundo mejor para mis hijos, si pudiese evitar que pasen por cualquier dolor en sus vidas, sin duda lo haría, pero es parte de crecer y madurar, lo único que puedo hacer es estar ahí, y por ahora solo puedo disfrutar su inocencia, su niñez, sus berrinches, sus risas y su alegría.

Y mi Oli, mi dulce Oli, debido a la edad que tengo sé que ella llegará en un punto en el que tendrá que seguir su vida sin mi, no será cómo muchos desean terminar su vida al lado de las personas que aman, no, por que al final de todo ella siempre será mi pequeña y yo seré ese hombre del que ella se enamoró.

-Danfel.