DNYL Club - NCT

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AVISO IMPORTANTE!!! LEMON! EXPLICITO!!! Y de ahora en adelante cada vez que aparezca lemon será explícito XDD

P.D. si no os gusta el lemon podéis saltarlo, no tiene nada que ver con la historia, o sea, no vais a perderos nada importante XDD

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NARRA RENJUN

Cuando desperté me di cuenta de que el brazo de Jaemin rodeaba mi cintura y con el otro mi cuello con suavidad. Recordé todo lo de aquella noche y solo podía sentirme mal... Mal por varias cosas... la primera obviamente por lo de Jeno... porque pensaba que le importaba un poco al menos, o sea lo suficiente como para no dejarme solo a la noche... Por otro lado me sentía mal al estar entre los brazos de Jaemin. Me recordaba viejos tiempos, épocas en las que todo era genial.

ME moví un poco y hundí mi cara en el brazo de Jaemin. Su olor me traía demasiados recuerdos. Anhelaba aquellos momentos sin preocupaciones, rayadas o tristeza. Éramos Jaemin y yo, los mejores amigos felices del mundo. Pero supongo que todo tenía que tener un final...

Una lágrima empezó a caer por mi mejilla y llegó al brazo de Jaemin. Sentí su cuerpo moverse y me di cuenta de que estaba mirándome.

—¿Qué pasa?—preguntó.

Negué con la cabeza intentando ocultar que estaba mal, pero no hubo manera. Quería quitar a Jaemin de mi vida, borrarlo para siempre... pero cada vez que veía las sonrisas que me regalaba y su preocupación por mí me hacía las cosas imposibles.

Hace unos días le dije que me cambiaría de universidad después del viaje a República Dominicana y no había cambiado de opinión al respecto. Iba a bloquear el número de Jaemin, y mejor aún, iba a borrarlo.

—¿Quieres que vayamos a hablar con Jeno?—preguntó preocupado.

Me lo pensé. Necesitaba hablar con Jeno... necesitaba explicaciones... y no me vendría mal estar con Jaemin... Asentí con la cabeza. Jaemin me sonrió con su típica sonrisa grande.

—Hoy si quieres te preparo las tortitas que tanto te gustan—dijo Jaemin.

Sonreí sonrojado y asentí. A veces tenía demasiadas ganas de besar a Jaemin, pero sabía que no debía intentarlo, sobre todo después de ver lo que pasó el día de nuestro primer beso.

Nunca había sentido nada igual cuando había besado a otras personas, aquel beso fue increíble, daría lo que fuera por repetirlo...

Cuando Jaemin se sentó conmigo a desayunar no pude evitar mirar a abajo y sentir cómo las lágrimas caían por mis mejillas. Aparté la mirada hacia el suelo de la cocina mientras lloraba más.

—Tranquilo, dentro de poco hablaremos con Jeno—dijo Jaemin abrazándome.

Cada abrazo suyo me dolía... quería ser la persona que él ama... pero era imposible... ¿cómo podría gustarle alguien como yo?

A veces quería alejarme de él pero a la hora de la verdad, siempre era incapaz de hacerlo. Le dije a Jaemin que estaba bien y que siguiera comiendo y cuando se sentó en su sitio, seguí comiendo. No me sentía con fuerzas de mirarle a los ojos.

Después de comer, fuimos a la universidad y al llegar buscamos a Jeno juntos. Por suerte lo encontramos en el gimnasio sentado.

Miré a Jaemin y le dije que se quedara al margen mientras hablaba con Jeno.