DNYL Club - NCT

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NARRA JISUNG:

Desde que empecé en el DNYL Club estaba mucho mejor que antes. Hace un tiempo estaba triste y recordando a HeeSook todo el día. Mis días se basaban en llamarla. Pero mis nuevos amigos del club hacen que olvide a HeeSook, de lo cual estoy muy feliz.

Claramente me seguía doliendo que no estuviera aquí conmigo, pero tampoco me quedaba mucho a pensarlo. Realmente haber entrado en el club fue la mejor idea que tuve, además conseguí conocer a Chenle, que era el que mejor me caía con diferencia. Él y yo como que nos entendíamos muy bien y estaba muy cómodo con él, éramos como mejores amigos.

Al llegar a la uni fui a mi clase de psicología. Hoy tuvimos una clase bastante interesante en la que dimos distintos trastornos mentales. Después de las clases, fui al baño a refrescarme con agua y al pasar al lado de los cubículos del baño, volví a escuchar unos llantos que parecieron ser de Chenle.

—¿Chenle?—pregunté.

—¿Jisung?—preguntó con la voz temblorosa.

—¿Qué pasa?—pregunté acercándome a la puerta.

—Nada...— Chenle abrió la puerta y fue a lavarse la cara evitando mirarme.

Yo le seguí e intenté que me mirara pero salió al pasillo casi corriendo. Le paré agarrándolo de la muñeca y me miró.

—Cuéntame qué ha pasado—dije.

—Es solo que... otra vez se han reido de que estoy en el club... incluso después de usar tu técnica...—dijo llorando un poco—Puede que te parezca ridículo llorar por esto... pero Hye está en clase y no quiero que piense que soy un pringado por no olvidarla...—dijo Chenle.

Le quité las lágrimas con los dedos pulgares y le miré.

—Chenle, nada tiene que importarte, son solo comentarios estúpidos de la gente. No tienen que importarte nada en absoluto—dije.

—El suyo me da igual... pero el de Hye y Seung sí... Quiero que ellos me vean como alguien guay...—dijo Chenle—Quiero estar a su altura—

—Tu ya eres mucho más guay que esos dos—dije sonriendo—Ves dragones que echan fuego por la boca en las nubes, ¿no eso guay? Los demás de DNYL veían flores y cosas rancias—dije intentando sacarle una sonrisa.

Chenle sonrió pero no se le vió muy convencido.

—Hey, ¿te apetece otro ramen hoy?—pregunté.

—Estoy lleno—dijo sonriendo.

—Pues entonces vamos a dar una vuelta—dije.

Chenle parecía más triste que antes.

—Hoy... ¿sabes que habrá un partido bastante importante de baloncesto, no?—preguntó Chenle.

—Sí, algo he oído—

—Pues... Seung no va a ir... y creo que Hye no se va a molestar a ver a su patético ex—dijo Chenle—Soy tan incapaz de superar la ruptura...—

—Es normal, pero todos juntos lo superaremos—dije—Algún día encontrarás a alguien que te ame por todo y que te cuide como nunca nadie lo hizo. Y sé que ese día serás feliz, pero por ahora no puedes hacer nada—dije.

—Siento que soy incapaz de gustar a nadie—dijo Chenle—Hace mucho que no sé ser yo mismo y siento como que por miedo he empezado a ocultar parte de mi forma de ser, para ser más aceptado por los demás...—dijo Chenle.

—Si yo fuera gay, estoy seguro de que me gustarías—dije.

Chenle me miró con una sonrisa de vergüenza.