21.

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Dereck:

"Desaparece de mi vida"

—No puedo creer que llevaras una prostituta a mi boda.—Oliver se queja mientras David está mirándome con un rostro decepcionado desde el mueble de mi oficina.

—¿Quieres concentrarte en el trabajo?

Oliver resopla.

—Tu espectáculo fue...

—Denigrante.—Le interrumpe David, quien ya se enteró de mi estúpida actuación en el bar.—Denigrante es lo que le hiciste sentir a esa mujer.

—Vamos, David... ¿Realmente crees que ese tipo de mujeres puede llegar a sentirse así? Están acostumbradas a escuchar que les digan eso todo el tiempo.

David ignora las palabras de Oliver.

—Prostituta o puta, da igual lo que fuera, no merecía que la humillen de esa manera.

Basta, ya sé que me pase.

—Que aburrido eres.—Oliver vuelve a hablar.

—¿Te sientes bien ahora?

Lo miro.

—Eso creí.

David sale de mi oficina después de llamarme la atención y no me queda más que avanzar con Oliver.

—Jodido David, nos dejó con todo el trabajo.—Maldice, peor enseguida cambia de actitud.—Hey, Dereck.. ¿No quieres que pasemos hoy por el prostíbulo?

Frunzo el ceño.—¿No habías jurado que la última vez era la noche de tu despedida?

Se encoje de hombros.—¿Las promesas para que están hechas?

Realmente es un imbécil.

—Para romperlas, Dereck.—Se acomoda en la silla.—Creo que voy a ir, puedes venir conmigo y me gustaría mucho probar a esa chica.

Esa chica.

—¿Estás de acuerdo?

¿Cómo se le ocurre preguntarme algo así?

Entonces las palabras de Hilary vuelven a mi mente y esa frase también: "Desaparece de mi vida"

Joder...

—¿Estás de acuerdo o no?

Con molestia, respondo.—Has lo que te dé la gana.





















Hilary:

—Pagaron 3 horas por ti, ve a atender a tu cliente.—Madam me ordena.

Esto ya no debe sorprenderme y todo es por Dereck, desde que me expuso frente a todos en el club, los clientes no han dejado de preguntar por mí y mi límite de hombres con los que dormía en una noche completo, fue superado.

Bajo las HeridasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora