2.

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─Detesto esto ─Auron se quejó mientras descansamos en la sombra luego de tan solo poner veinte bloques. Samuel nos había encargado reparar un viejo edificio de Karmaland que comenzaba a deteriorarse y casualmente todos mis compañeros estaban ocupados, sí claro ─Vamos hombre, ¿no puede hacerlo otro? ─pateo una roca y logró romper algo. Ambos murmuramos groserías mientras seguíamos el sonido del cristal roto. Nos guió hasta el ayuntamiento y Auron se encaminó sin pensarlo dos veces.

Gracias a que tengo unos reflejos de oro y soy un experto en minas, logré evitar que Raúl activara un mecanismo que cantaba bastante para los atentos como yo.

─¿Que coño te pasa? ─me dijo enojado y safandose de mi agarre. Señalé el mecanismo que sobresalía entre los arbusto y suspiré cuando algunos detalles dejaban a la vista quien había sido, no le dije nada a Auron esperando que sea tonto y lo pase por alto ─Joder...esto es fuerte eh ─murmuró observando más de cerca.

─Sí lo es, volvamos ─dije nervioso y estirando de él para volver a lo que se nos había encargado. Raúl rodó los ojos.

─Ya, perro fiel de Samuel ─me dijo golpeando mi hombro, pero sí supiera que en realidad lo hacía para cubrirle las espaldas a mi hermano.

A Willy.

─¿Pero es que no es divertidísimo? ─Willy me sonreía de forma casi psicópata después de que le haya reclamado que casi asesina a Auron ─Empiezo a dudar de la maldad en tu corazón ─me miró fijamente y bastante serio, sentí como me recorría un escalofrío.

─Sabes que no es eso ─me defendí. Odiaba que después de casi tres meses siendo miembro de la Hermandad, Willy me intimide de tal forma que hasta pierdo la voz ─Auron no nos hizo nada, Willy. No hay razón ─murmuré y vi como rodaba los ojos.

─Uf chaval que me haces repetir las cosas, no era para el imbécil de Raúl pero si él se la come, ¿qué mas da? ─dijo con disgusto y yo fruncí el ceño. A veces no comprendía como Willy podía ser tan frío y desapegado, estando en su lugar, me hubiera sabido mal que Auron sufra consecuencias de algo que no debería.

Pero Willy era distinto, y sabía disimular muy bien aquella faceta de él cuando estaba frente a los demás, pero conmigo siempre se le "escapaba" o tal vez lo hacía a posta, pero confiaba más en la primera opción.

─Que esta mal Willy ─le dije, incapaz de mantener el juego de miradas baje mi vista a mis manos ─¿Qué pasa si me la hubiera comido yo? ─interrogué esperando que diga "Te pediría disculpas porque eres mi hermano".

─Pues te jodes, Rubius ─dijo con una sonrisa y lo miré mal de inmediato ─Es broma, ¿somos hermanos o no?
─preguntó cerca de mi rostro, mordí mi labio inferior sin levantar la vista de nuevo ─¿No vas a cubrir a tu hermano? Yo lo haría por ti ─susurró cerca de mi cuello, erizando mi piel ─Recuerda que tenemos un pacto ─dijo eso último y se fue, dejándome solo en la sala de reuniones donde todo comenzó.

Miré las paredes que tenía algunas fotos de los tres juntos, buenos momentos. La tabla donde teníamos anotado que cosas tomamos prestadas, que planes teníamos, todo estaba ahí. Sentí ganas de llorar. Porque empezaba a dudar de que esto me guste, de que me guste hacer el mal. Y no sé por qué, no me había importado en veces anteriores pero últimamente había un sentimiento de "justicia" en mí, algo que me pedía detener a Willy cuando era protagonista de algo malo, porque algo me decía que en algún momento sería imparable y estaba asustado, muy asustado.

Me sentí mareado al tener tantos pensamientos, por algún lugar debían tener algo de agua y una que otra pastilla para el dolor de cabeza. Comencé a buscar entre las cosas, totalmente confíado porque son mis hermanos, ¿verdad? Ellos nunca me ocultarían nada, ¿verdad?

Todo lo que teníamos en la Hermandad era compartido, solo había un cofre con contraseña donde guardamos cosas de valor y todos tenemos dicha clave. Sin querer, golpee lo que a simple vista parecía un cuadro de Willy junto a Fargan, junto a mí. Pero detrás de aquel "cuadro*" había una puerta que solo Willy podía utilizar, no me pareció extraño hasta que por la cerradura pude observar una pizarra igual a la que teníamos con nuestro plan, pero en vez de eso, una foto de Samuel junto a varias anotaciones fue lo que ví.

Aquel sentimiento o premonición, aún no lo sé, volvió a mí y sentí punzadas en mi cabeza como si me clavaran miles de cuchillos a la vez. Me aparte de la puerta cayendo al suelo y soltando quejidos, era un dolor insoportable y no parecía parar, varias manchas negras aparecieron en mi visión como si fuera niebla y sangre comenzó a brotar de mi nariz. Abrí los ojos asustado intentando moverme pero todo mi cuerpo pesaba más de la cuenta, obligándome a tumbarme en el suelo. Nadie podía escucharme aquí, si agonizaba, nadie se enteraría. La desesperación me invadió hasta que lo ví todo negro, pero estaba consciente, aún sentía el suelo de la Hermandad con mis manos pero no veía nada.

Hasta que, imágenes distorsionadas y voces se dejaron escuchar y ver.

= (esto representa visiones de Rubius)

─¡Willy, por favor! ─era mí voz ─Dime que no es verdad Willy, te lo ruego ─le pedí intentando que levante su mirada y que me confiese lo que había hecho, estaba cubierto de sangre en su rostro y manos. Sentí lágrimas en mis mejillas y un nudo en la garganta que me ahorcaba. Willy lloraba también, pero mantenía una sonrisa forzada.

─Lo siento, Rubén. Fue un accidente ─se encogió de hombros, intenté observar tras él y ví un cuerpo, cuando corrí para saber su identidad...

(fin de las visiones de Rubius)

─¡Rubius, despierta! ─la voz de Fargan y sus manos sacudiendo mi rostro me trajeron de vuelta a la realidad, deje de ver todo lo que estaba viendo antes pero el nudo en la garganta y las lágrimas eran muy reales, las sentía en mi rostro junto a la sangre brotando de mi nariz. El rostro de preocupación de Fargan me hizo querer llorar nuevamente, lo abracé desesperado y con mi corazón latiendo a mil por hora ─¿Qué pasa? ¿Que ha sucedido? ¡Háblame! Estas sangrando... ─dijo ayudándome a levantarme para que vuelva a la silla y así poder reponerme. Me sorprendió que el dolor de cabeza ya no estuviera ahí pero lo recordé todo y miré hacía el cuadro, mordí mi labio inferior, tal vez fue todo un mal sueño, no lo sé, pero prefería no decirle nada a Fargan. Mentir, tal y como aprendí de Willy.

─Gracias ─murmuré cuando me trajo agua y paró el sangrado con algodón.

─¿No vas a contarme? ─preguntó con su mirada de cachorrito perdido. Sonreí y asentí.

─Lo siento. Me empecé a sentir muy mal, un mareo muy fuerte. Mientras intentaba buscar algo me tropecé y me dí muy fuerte en la cabeza, supongo que por eso me sangraba la nariz ─me sabía mal la mentira pero aún no estaba seguro de que eran todos esos "flash" o "visiones" que tenía, prefería guardarlo para mí e investigar por mi cuenta.

─¿Y por qué lloras? ─Fargan, no preguntes más.

─No lo sé, ¿un sueño tal vez? o del dolor...─me hice el tonto y para mi buena suerte, mi compañero y hermano dejó el tema y nos mantuvimos en silencio hasta que me sentí mejor y decidí volver a mi hogar.

No sin antes mirar aquel cuadro una vez más.

¿Qué planeaba Willy?


* el cuadro que ve Rubius es como el que tiene Fargan en Karmaland para la entrada secreta de la Hermandad, es decir, que se puede como ¿atravesar? xd espero que se entienda uwu

Aclaración: aunque ya la hice en la narración todo lo que esta encerrado con = y ≠ representan las visiones de Rubén 👀👀

segundo capítulo :') un poco mas corto que el anterior pero espero que les guste <333

lo iba a subir más temprano pero cuando me tocaba corregir los errores Rubén empezó directo xd

espero que todo lo que esta pasando en la historia se entienda y sea claro, no quiero soltar toodo en los primeros capítulo pero solo esperen 👀

gracias a los que votaron y los comentarios🥺 se agradece mucho <3 abril.

[PAUSADA] brotherhood of evil ─ rubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora