Catarsis enemigas

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—¿Cómo te fue? —Minho ayudó a desvestir al castaño, quien solo se dejó desnudar al pie de la bañera.

—Agotador, ya cumplí lo necesario, llevar a Kim Jonghyun a la gubernatura. —Suspiró estirando los brazos hacia atrás para despojarse de la camisa blanca.

Minho sonrió y asintió, dobló la ropa del ajeno y la colocó sobre la cesta de mimbre que guardaba su novio bajo el lavamanos, hecho eso retornó su atención al más bajo y le abrazó.

—Estoy orgulloso de ti —besó la coronilla de su cabeza estrujándolo con suavidad, ganándose a cambio una corta risa que rejuvenecía su alma—, ¿qué harás ahora? ¿Dejarás de ser Nam Key?

—Sí, es momento de decirle adiós a ese nombre, tal vez mañana vaya a recoger mis cosas de la casa de Jonghyun —soltó relajando los hombros, aunque sus planes eran otros no podía expresarle la verdad a Choi o todo se vendría abajo—, volveré antes del mediodía, después iré a renunciar a Creative think en esta misma semana para comenzar a desaparecerme. —La última confesión era tan falsa como la primera pues acudiría con Jonghyun para despedirse de él como secretario.

Minho asintió dejando un beso al hombro desnudo, ahora tenía vía libre para poder dispararle al ahora gobernador en un lapso de dos meses, la fecha ya estaba impuesta, incluso el arma y la bala. Alejar a su novio era lo primordial, ahora solo podía concluir su misión con éxito para recoger su merecida medalla de honor.

Con aquellos pensamientos en mente logró alejar la enemistad laboral con el ser que amaba para concentrarse en su cuerpo, en sus labios y su mirada profunda.

El baño fue relajante debido a que Choi se encargó de masajear la espalda tensa que desde hace semanas suplicaba un poco de alivio. Aquella noche durmieron abrazados, cada uno con diferentes planes en mente, cada uno con el objetivo de alcanzar el éxito para despedirse de sus trabajos dignamente, tan contrarios y a la vez tan unidos que sin saberlo se volvieron de nuevo enemigos.

Al día siguiente, Kibum logró despedirse del moreno con un beso y un abrazo, jugaron un poco mientras hacían el desayuno y compartieron su última sonrisa ya que el secretario se marchó a su misión mientras que Minho tomó camino hacia la base militar para saber acerca de su baja anunciando así a su novio que posiblemente no llegaría a casa esa noche ya que necesitaba hablar con Changmin para limar asperezas que él mismo creó y así mismo mentirle acerca de las balas fallidas.

Cada uno se fue por diferente camino, sonrientes y positivos aunque lentamente salieron a relucir sus verdaderos planes; o al menos eso aplicaba para Kibum quien aún se aferraba a la mentira para proteger su noviazgo.

Woo Hyungsoo aguardaba silencioso sobre el colchón, masajeó con nerviosismo sus nudillos y resopló, estaba decidido a golpear y defenderse con tal de salir de aquella prisión que aquel joven había creado para él, no tenía idea de donde yacía o qué...

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Woo Hyungsoo aguardaba silencioso sobre el colchón, masajeó con nerviosismo sus nudillos y resopló, estaba decidido a golpear y defenderse con tal de salir de aquella prisión que aquel joven había creado para él, no tenía idea de donde yacía o qué tan lejos se encontraba de la ciudad pero haría su mayor esfuerzo por correr tanto como se lo permitieran sus piernas.

The sniper «MinKey»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora