Payaso Kook [KookV]

Jungkook

Su amigo estaba loco, definitivamente loco.

—Jimin. Te das cuenta que prácticamente vendiste mi alma a un desconocido con peluca

Habla el castaño, alzando sus brazos al aire y caminando en círculos. El rubio suspira por décimo cuarta vez en el día y trata de tranquilizar a su amigo.

—Taehyung, ya te lo dije —frota su frente, irritado—. ¿Qué mejor forma de superar tu miedo a los payasos con ayuda de un payaso?

Taehyung para en seco y voltea a verlo rápidamente, casi como en la película del exorcista.

—¡¿Te estás escuchando?!

Jimin rueda los ojos y vuelve a hablar. Su amigo era tan exagerado.

—Además no es un desconocido, es tu compañero de clases

—¿Quién es? —pregunta, acercándose rápidamente a su amigo.

—Je-... ah, olvidalo —murmura mirando a otro lado, molestando.

Taehyung lo mira con una ceja alzada y hace un mohín.

—Dímelo —exige—. Seguirá siendo un desconocido para mí si no me dices quién es

El más bajo sonríe divertido. Una idea realmente loca pasó por su cabezita rubia. Hará que Taehyung descubra quién es el chico, y seguido a eso superará su miedo a los payasos.

Se auto-felicita y se palmea el hombro, con la mirada confundida de Taehyung sobre él.

—Tendrás que descubrirlo por ti mismo —señala al chico con peluca, quien ya estaba yéndose del lugar.

—¿Crees que haré tremenda estúpidez?

—Eres Taehyung, contigo todo es posible

Se encoge de hombros y el castaño lo mira indignado antes de darle un golpe en la cabeza.

—Definitivamente no lo haré

Murmura Taehyug para sí mismo, caminando por los pasillos del instituto y sosteniendo las correas de su mochila con algo de fuerza.

—Ese Jimin... Si cree que voy a hacer tremenda locura está realmente... —calla abruptamente al chocar con un fornido pecho y seguido a eso terminar en el suelo.

Ha quedado de espaldas al piso, y para empeorar su situación su mochila estaba algo llena ese día. Lo que hacía que le dificultara levantarse y pareciera una tortuga estando boca arriba.

—Mierda, lo que me faltaba —patalea intentando incorporarse y maldice una vez más al escuchar la risa de alguien—. ¿Y bien? ¿Vas a quedarte ahí parado o vas a ayudarme de una puta vez?

Un chico de cabello azabache lo mira desde arriba, sonriendo divertido antes de hablar.

—Ese vocabulario, tortuguita

—¿Tortuguita? —lo fulmina con la mirada—. En cuanto me ponga de pie esta tortuguita te dará una buena paliza —patalea otra vez, haciendo que el chico soltara una fuerte carcajada.

—Tan lindo —niega con la cabeza antes de extender su mano al castaño—. Déjame ayudarte

Taehyung explota.—¡Eso lo tenías que decir desde un principio!

Toma su mano y el azabache lo levanta de un suave pero fuerte tirón. Taehyung suspira una vez está de pie y arregla su uniforme, murmurando palabras inentendibles a oídos del pelinegro.

—Sigo esperando un gracias —escucha decir al chico.

Taehyung se atreve a mirarlo a los ojos y las palabras que quería dejar salir se quedaron estancadas en su garganta.

El pelinegro se agacha a su altura y mueve su mano frente al rostro del castaño, haciendo una mueca, confundido por el repentino silencio de parte del más bajo.

Taehyung reacciona y se sonroja fuertemente, moviendo la cabeza.

—¡Y yo sigo esperando una disculpa!

El chico sonríe y sacude sus cabellos castaños.

—Discúlpame, tortuguita

—Disculpa aceptada. Y gracias —murmura avergonzado, ajustando las correas de su mochila.

—Jungkook, ¿Por qué sigues afuera? —habla un pelimenta acercándose al nombrado—. ¡Hace media hora que tenías que entrar a clases!

Jungkook abre sus ojos desmesuradamente y comienza a correr, despidiéndose con la mano de Taehyung.

—¡Nos vemos en clase, Tortuguita!

—¡No me llames tortuguita!

Grita Taehyung, observando a ambos chicos correr en dirección opuesta, uno yendo a la izquierda y otro a la derecha.

Esperen... Jungkook fue a la derecha.

¡Nos vemos en clase, Tortuguita!

—¡Llego tarde!

Y empieza a correr él también.