Corpse Party: Blood Drained

Capítulo 8: Recuerdo Funesto

2da Ala - Sala de Maestros

- Como mencioné antes, debido a que tu provienes de un antiguo linaje de brujas, tu madre también lo hizo, varias sectas practicantes de magia negra quieren obtener lo que tales linajes poderosos poseen, y en tu caso, tu madre poseía un objeto de alto poder, un objeto que otorga un poder inimaginable comparado al libro de las sombras, un objeto que en estos momentos está en tu interior - dijo Naho mientras apuntaba a mi estomago. 

- Oye, oye, ¿A qué te refieres?

- Desde hace tiempo sentí alguna anomalía separada de tu alto nivel espiritual, intenté investigarte y resultó que tal objeto se encontraba en tu interior, si lo sacas, podrás usarlo.

- Bien, ¿Y cómo lo saco de mí?

- Está dentro de ti, y es un objeto que a pasado de generación en generación entre brujas del mismo linaje, lo mismo pasa con el libro de las sombras, ambos probablemente adoran el dolor.

Al principio no tuve idea de a que se refería, hasta que después de pensarlo por un tiempo, todo cobró sentido; la idea era descabellada, y no tenía deseo de hacerlo.

- Tal objeto podría ayudarlos a ti y a Akira a salir de aquí.

Akira... si ese es el caso, debo de hacerlo.

Revisé uno de los cajones que había revisado antes, este contenía unas tijeras, las cuales utilizaré en este momento para extraer el objeto mágico de mi interior.

- No estoy segura de que pueda pasar, pero si sobrevives, te enviaré a un espacio cerrado diferente para intentar encontrarte con tus amigos.

- ¿Por qué me ayudas? - dije dudosa.

- Por mi investigación.

Tras escuchar las pocas palabras que Naho dijo, tomé con fuerza las tijeras y lentamente las acerqué a mi estomago, poco a poco las alejé para poder tomar un impulso certero, si fallaba, sería más doloroso de lo que será atinarle.

- Esto dolerá - me dije a mi misma.

Tomé impulso e intenté apuñalarme con toda mi fuerza en el estomago, para mi lástima dudé y me detuve antes de entrar en contacto.

- No puedo hacer esto... no puedo...

En un acto de pánico y terror, boté las tijeras al suelo, lamentándome por saber que para mí era imposible pasar por tal sensación de dolor a propósito solo para obtener un objeto de alto nivel de magia.

Mientras observaba lo imposible que era para mí hacer lo que pensaba hacer, una especie de recuerdos comenzaron a brotar en mi mente, eran recuerdos de mi infancia.

=====

Sucedió cuando tenía 8 años, mientras esperaba a mis padres para que me trajeran mi pastel y regalo de cumpleaños, me senté tranquilamente a jugar en mi casa, yo no era como las niñas "normales" que jugaban con muñecas y las vestían, a mí, me encantaban los juguetes de vehículos, especialmente los que eran motos, yo tenía una inmensa colección de pequeñas motos y hasta una pista para correrlos, simplemente, era genial poder divertirme de esta forma; a pesar de que las niñas de mi escuela me veían raro por tales gustos.

Ya habían pasado de las 8 de la noche y aún no llegaban, lo que para mí era raro, ya que ellos salieron a las 5; ya era momento para que regresaran, no podía quedarme despierta cuidando la casa toda la noche, ni tampoco perderme mi propio cumpleaños solo porque no me habían traído el pastel.

Me había aburrido un poco de esperar, por lo que opté por ver la televisión, a ver si había algo interesante. Al prenderla, lo primero que apareció era una especie de show de concursos extraño, algo que le gustaba a mí papá y decidí de cambiar de canal, hasta que apareciera algo interesante, pero durante mi búsqueda, repentinamente alguien comenzó a tocar la puerta.