Apenas termino la clase, corro a mi habitación, como un par de sandwiches de la cafetería y me preparo para ir a la fogata. Me pongo unos jeans negros y un sueter holgado que me regaló la abuela hace un par de años, es de corea.
Estoy entuciasmada, pero algo me dice que las cosas no están bien... es como ese sexto sentido que no me deja tranquila en ningún momento y me dice: cuidado.
Cuando pienso en Peter, siento una punzada en el estómago, pero ¿Qué otra opcióm tengo? No dejaré toda mi vida en pausa esperando a que él se decida en llamarme, es más, ni siquiera se si a estas alturas me gustaría que lo hiciera...
Me trenzo el pelo, que me ha crecido mucho en estos últimos meses, así que puedo hacer con él casi lo que se me ocurra. Me pongo unos converse negros, por aquello de la tierra o el lodo que pueda haber alrededor de la fogata, y finalemente, me rocío con algo de perfume, es un perfume que me dio Margot una vez en mi cumpleaños y que solo uso en ocasiones en que siento que debo resolver cosas, me ayuda a concentrarme y el aroma me recuerda que hay algo que aún no queda claro.
Se que suena como una locura, pero para mi funciona.
Al cabo de unos minutos, alguien llama a la puerta. Abro y saludo a Kara, que está lista también para ir a la fogata. Eliot no la ha invitado oficialmente, pero no creo que renigue de que ella me acompañe.
-¿Estas lista?-. Me pregunta con su típica sonrisa de siempre, esa sonrisa que anima y te contagia.
-Lo estoy-. Digo tomando el celular, que estaba encima de la cama. Lo miro y veo que no tengo ningún mensaje...-Vayamos afuera a esperar a Eliot-.
-Claro-. Responde Kara, y ambas salimos de la habitación. Lissa no ha llegado, así que cierro con llave y, me encamino con Kara hacia la salida del edificio.-Estás diferente, Lara Jean-. Me dice y siento como si me hubiera lanzado un balde de agua helada.
-¿En qué aspecto?-. Pregunto sin mirarla.
-No lo se, pero te siento distinta-. Me dice y siento que un remolino me enreda y revuelve.
-¿Porqué lo dices?-. Me gustaría saber como me percibe, pero lo cierto es que yo también estoy algo extraña.
-Sabes, tal vez solo sea una idea mía. Solo te pido que tengas cuidado con Eliot, ¿de acuerdo?-.
-Vale-. Digo y sonrío en cuanto veo a Eliot de pie, en la entrada del edificio, listo para que nos vayamos.
Me abraza para saludarme y me da un beso en la mejilla y no puedo evitar pensar en Peter... siento mi cara ponerse rígida y Kara lo nota, pero no dice nada.
-Kara puede venir, ¿cierto?-. Digo rodeando a Kara con el brazo, y Eliot asiente.
-Por supuesto-. Responde y empezamos a caminar hacia el estacionamiento.
-¿Dónde será la fogata?-. Pregunta Kara con extrañeza.
-Es en casa de un amigo, a un par de minutos de aquí-. Explica y Kara asiente.
Subimos a su auto, él en el asiento del conductor, yo en el del acompañante y Kara atrás.
Eliot arranca el auto y comienza a conducir, salimos del campus y avanzamos por la calle a una velocidad considerable.
Miro de reojo a Eliot, es realmente guapo y fuerte. Es sin duda un chico muy lindo y aparte de eso, es atento. Sin embargo una pequeña gota de decepción se derrama en mi interior, acompañando al mar de dudas que de por sí ya existe.
No entiendo bien cual es mi decepción, pero si se que el corazón sabe lo que es mejor para una misma.
Abro la ventanilla y me quedo mirando hacia afuera, con el viento soplandome en la cara y alborotandome un poco el pelo. Miro mi expresión en el retrovisor, es un rostro que nunca antes había visto, luzco cansada y ojerosa.
Entonces miro una orilla del espejo y veo a Kara, que me mira con preocupación y sonríe ligeramente cuando nuestras miradas se encuentran. Una lágrima se me escapa y me apresuro a secarla fingiendo que algo se me ha metido al ojo.
-Pueden elegir la canción que quieran, chicas-. Dice Eliot dándome su celular.
Busco en su playlist, tecleo Lovers, de Anna of the north, pero no aparece. Otra pizca de decepción se suma a la anterior. Busco en youtube la canción y la pongo.
Kara comienza a menearse y bailar mientras suena, yo canto en voz baja, mientras que Eliot sigue conduciendo en silencio, pero sonriendo.
Y yo, por un momento, me siento la chica de la canción... siento que estoy en la oscuridad, no puedo ver ni sentir nada, necesito una señal, necesito que alguien me señale la luz para hallar las respuestas... una sensación de calma me inunda al momento en que me siento en sintonía con la canción.
Seguimos avanzando y, finalmente Eliot aparca el auto en una residencia inmensa.-Es aqui-. Dice mientras apaga el auto.
-Genial-. Respondo mirando el inmenso tamaño de la casa. Bajo del auto, y otros chicos tambien han bajado de los suyos aparcados todos justo frente a la casa.
-Entremos-. Dice Eliot, que me rodea con el brazo. Su abrazo es cálido y fuerte, pero de nuevo la decepción crece.
-Vamos, Kara-. Digo tendiendole una mano para que la tome, y lo hace.
Cruzamos el jardín delantero llegamos a la puerta, otros chicos nos alcanzan para cuando tocamos el timbre.
Una chica rubia alta abre la puerta y nos saluda. Con una sonrisa.
-Pasen-. Dice y nos deja entrar.
-Nora, ella es Lara Jean, Lara Jean, ella es Nora-. Dice Eliot presentandonos.
-¡Lara Jean! ¿Quién lo diría?-. Comenta Nora, y luce un poco falsa... toda ella es algo falsa, pero sonrío.- finalmente nos conocemos, Eliot diario habla de ti-. Dice de nuevo y yo sonrío lo mas natural que puedo.
Otra gota de decepción se suma a mi interior cuando entramos a la casa y me percato de que Eliot no ha presentado a Kara, que esta de pie junto a mi, se le ve incómoda. Y a decir verdad, no la culpo; yo también lo estaría en su lugar.
Cruzamos la estancia y llegamos a un inmenso patio trasero, repleto de cesped y rodeado por árboles, justo en el centro hay una rueda de piedra y troncos alrededor. Ya hay algunos chicos sentados y otros hechando leña al fuego.
Se escucha el sonido de una cascada, proveniente de alguna parte oculta del jardín, que parece extenderse algunos kilómetros.
-Nora es mi mejor amiga-. Explica Eliot con una sonrisa, y yo asiento. Me siento junto a Kara en uno de los troncos mientras Eliot va a saludar a sus amigos, algunas veces me señala y ellos voltean hacia mi, me saludan con la mano o alzan sus vasos a modo de brindis.
Yo solo asiento, y percibo como poco a poco esas gotas de decepción que se derraman dentro de mi han formado ya la suficiente cantidad para tratarse de un vaso.
Espero poder hallar el origen de eso esta noche, porque el sabor amargo de la boca me incomoda bastante.
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Cuando ya no funcionemos. (Fanfic 2: "soy Lara Jean en casa").
FanfictionCONTINUACIÓN DE Soy Lara Jean en casa. ¿Qué pasaría si de pronto Peter no me quisiera? ¿Qué sucedería si de un momento a otro descubro que ya no lo amo tanto? ¿Realmente sería malo solo tener un novio en toda mi vida? ¿La pareja perfecta existe? S...