He pasado mala noche, a pesar de la hospitalidad en casa de Lara Jean, de la leche tibia y galletas que Kitty me ha dado y de la atención especial para dormir en cama de mi amiga, he pasado una noche dificil.
Para empezar, me he levantado y ni siquiera recordaba en donde estaba, miré a un lado de la cama y me tranquilizó ver a Lara Jean ahí, entonces recordé todo y me sentí mucho más tranquila. Sin embargo estuve soñando demasiadas cosas, como que viajaba en una carretera, pero lo hacía de pie en el techo de un auto en ropa interior... y vaya que fue algo incómodo, no es tan agradable sentir el aire en todo el cuerpo a esa velocidad.
Pues bien, para colmo, Lara Jean ha balbuceado cosas toda la noche. Verla ahora tan tranquila recostada al pie de la cama y tapada con las cobijas hasta el cuello, me hace dudar de que semejante chica pudiera decir tantas cosas y a la vez nada mientras duerme... Sólo había algo que se le entendía con claridad: Peter Kavinsky...
Tomo el celular que dejé junto a mí y lo desbloqueo. Tengo un mensaje de mamá deseándome buenas noches y diciéndome que recuerde que debo volver acá para ir a clase el lunes.
Ya lo sé, ma.
Que tengas bonito día, no te preocupes por mí. El padre de Lara Jean nos llevará de vuelta y su esposa conducirá el auto. Descuida.
Cuando termino de escribir esto lo envío y sonrío. Adoro a mi mamá, siempre se preocupa por mí y siempre lo hará.
Me enderezo en la cama y, desgraciadamente, tengo ganas de ir a orinar... de nuevo. Salgo de las cobijas y me levanto; camino a la primera puerta que encuentro en busca del baño.
La abro y descubro detrás un vestidor, repleto de luces y series navideñas que brillan y le dan una pinta agradable al lugar. Hay algunas prendas colgadas, y al fondo y sola en un estante, hay una sombrerera...
Pasa por mi cabeza un vago recuerdo de que Lara Jean mencionó en algún momento esa sombrerera, también dijo que tuvo una etapa caótica y vergonzosa... entonces recuerdo las cartas que escribió y que su hermana Kitty las envió todas. Miro atrás para cerciorarme de que Lara Jean siga dormida y pueda hurgar en la sombrerera sin que se de cuenta, y lo está.
Me meto en el vestidor y abro la sombrerera... tiene algunas cartas y, cuando tomo una de ellas, doy un brinco y me sobresalto.
-Deja esa sombrerera ahí-. Escucho la voz de Lara Jean, que habla en tono serio. Me encorvo un poco y, avergonzada, me giro hacia ella y le tiendo la sombrerera y las cartas.
-Estaba buscando el baño-. Le explico y ella niega con la cabeza, me pasa de largo y devuelve la sombrerera a su lugar.
-Ajá-. Dice.
-Es enserio-.
-Tú siempre quieres ir al baño-.Me espeta, pero parece divertida. Sonríe y suelta una risa por lo bajo.
-Lo siento-. Digo y finjo un puchero.
-Es en el pasillo, al fondo a la derecha-. Me indica abriendo la puerta de su habitación y señalando el pasillo.
-Gracias, eres muy amable-. Le digo y ella se aparta para dejarme pasar; me siento avergonzada pero a la vez estoy contenta de haber tenido entre mis manos la famosa sombrerera y las cartas prohibidas de Lara Jean. Abro la puerta del baño después de comprobar que está vacío y... el resto no tengo porqué contarlo...
...
-Y bien, ¿Cuál es el plan?-. Pregunta el señor Covey, mientras todos terminamos de desayunar. Miro a Lara Jean, que está terminando su bocado y luego dice:
-Darle a Peter muchos motivos para saber que no está solo-. Explica y yo asiento apoyándola cuando Kitty nos mira.
-¿Y tú porqué viniste?-. Me pregunta Kitty... vaya que es directa...
-Porque ella es mi secuaz-. Le dice Lara Jean antes de que yo pueda abrir la boca siquiera. Así que, de nuevo me limito a asentir.
-Pues, que bueno que Lara Jean tenga una amiga tan buena, te agradezco que la cuides-. Me dice el señor Covey, yo abro la boca para responder, pero Trina añade:
-Yo apuesto a que Lara Jean puede cuidarse sola, más bien deberías agradecerle que le haga compañía-.
-Si, yo puedo cuidarme sola, ¿no es cierto Kara?-. Añade Lara Jean y, cuando estoy a nada de responder, Kitty suelta otro comentario, impidiéndome hablar por enésima ocasión, y dejándome con la boca abierta.
-Ni tu te lo crees, Lara Jean-. Dice Kitty, yo solo me limito a mirar mi plato y seguir comiendo. Me termino los hotcakes y tomo otro de la pila del centro.
-¿Kara es así de callada?-. Pregunta de nuevo Kitty, mirándome y a Lara Jean.
-¿Todo está bien?-. me pregunta el señor Covey con expresión tranquila... yo tengo ganas de gritarles algo, pero es la primera vez que hablo con su familia, así que solo asiento y digo:
-Solo estoy disfrutando los deliciosos Hot Cakes-. Sonrío y todos los demás igual, salvo Lara Jean, que nota que mi sonrisa no es del todo natural...
El resto del desayuno transcurre en silencio, salvo por alguno que otro comentario.
ESTÁS LEYENDO
Cuando ya no funcionemos. (Fanfic 2: "soy Lara Jean en casa").
FanfictionCONTINUACIÓN DE Soy Lara Jean en casa. ¿Qué pasaría si de pronto Peter no me quisiera? ¿Qué sucedería si de un momento a otro descubro que ya no lo amo tanto? ¿Realmente sería malo solo tener un novio en toda mi vida? ¿La pareja perfecta existe? S...